Inside And Out |Vhope|

Treinta y cinco

-Yo también te amo, Taehyung.- susurró con una sonrisa mientras bajaba la mirada al sentir la gran mano del menor rodear la suya, haciendo notar ambos anillos comprados sin intención alguna, a juego.

Hoseok sentía caricias cerca de su nuca, los dedos del menor se aseaban por la zona dejando una cálida sensación en aquella sensible zona, pero se terminó alejando un poco, no quería quedarse dormido luego de tan conmovedora escena.

Taehyung al sentir al mayor moverse retiró su mano lentamente, de alguna manera ninguno quería moverse bruscamente como si temieran que aquella burbuja que los envolvía se rompiera.

Hoseok apoyó sus codos a los costados del torso de Taehyung enredando sus piernas dándose calor; por las bajas temperaturas. Apoyó su mentón sobre el pecho del menor, se miraban intensamente, sin ser conscientes de que lo hacían, ni de cómo pasaban los minutos.

Hoseok deposito unos pequeños besos sobre el torso del menor, sin despegar la mirada subió los besos hasta la boca del mismo.

-Berry.- Taehyung sintió los suaves belfos del pelirrojo posarse sobre los suyos, ejerciendo un poco de presión, para luego separarse levemente- Berry.- llamó Taehyung, pero el mencionado repitió su acción anterior- Berry.- esta vez apenas terminó de llamarlo, el mayor juntó sus labios, le encantaba que le hablara por ese extraño apodo- Berry.- repitió el menor intentando aguantar su sonrisa al recibir otro suave beso, dejándolo sólo como un inútil intento- Berry, déjame hablar.

-¿Qué?- preguntó melosamente Hoseok con un puchero retorciéndose sobre el cuerpo ajeno.

-Tengo frío.- contestó el platinado abrazando al otro más cerca de él, encontrando un poco de calor corporal.

Hoseok sonrió por el momento, seguía incrédulo frente a todo, pero de lo único que está seguro es que todos aquellos sentimientos son reales.

-Traeré unas mantas.- Hoseok intentó levantarse pero los brazos del menor no dejaban de envolverlo- Si me sueltas las podré traer.

Hoseok al ver que el otro no lo liberaba dirigió sus manos a los costados de este y tentando bajo la camiseta que le había regalado, presionó sus delgados dedos por fracciones de segundos en distintas zonas, hasta que cerca de las costillas escuchó cómo Taehyung dejaba salir una suave y profunda risa entre dientes.

Hoseok movió velozmente sus dedos por la misma zona, arrancándole a Taehyung una que otra estruendosamente grave risa, que por momentos se volvía silenciosa, a los pocos segundos ya no lo tenía sujeto, pero seguía con las cosquillas. Hoseok disfrutaba escuchar la risa contraria, en un par de veces este había reído sin disimular nada, pero se le hacía extraña y contagiosa su manera de reír, no lo podía criticar, bien sabía que él no contaba con la risa más normal y atractiva.

Cuando vio que Taehyung ya casi ni podía respirar, paró el movimiento de sus manos y se levantó en dirección a un mueble que contenía cobertores, sábanas, toallas, entre otras cosas. De regreso se quedó mirando a Taehyung con una pequeña sonrisa.

Taehyung se encontraba con sus brazos rodeando su abdomen, le dolía luego de hacer fuerza al reírse, sudaba en pequeña cantidad, su cabello revuelto y cara acalorada. Hoseok al mirarlo se percató de lo realmente guapo que era el chico del que estaba enamorado, y la suerte que tenía al saber que este lo amaba de igual manera.

Se tiró en la cama con la manta verde claro entre sus brazos, al caer en la cómoda cama se sentó para estirar la manta y cubrir ambos cuerpos, apenas los cubrió, sintió unos brazos alrededor de su cintura. Taehyung lo atrajo y una vez pegados pasó un brazo por debajo de la nuca de Hoseok, mientras mantenía el otro alrededor del estómago de este.