Bad Boy

E I G H T

YoonGi

Me encontraba caminando hacia la escuela, tenía unas ganas inmensas de correr vuelta atrás y encerrarme en mi casa. No quería ver a Jimin, no quería ver a Tae, no quería ver a nadie en realidad.

Para mi suerte, cuando llegué aún no llegaba los chicos. Lo que me dió tiempo de relajarme un poco antes de que llegaran y arruinaran mi paz.

- YoonGi!! -gritó con su chillona voz mientras corría hacia mi-.

- ¿Que quieres? -pregunté lo más cortante posible-.

- ¿Que ocurre? ¿Estas bien?

No mierda... Estoy hecho trizas porque te acostaste con tu mejor amigo en lugar de mi.

- Si, estoy bien. Ahora vete.

- YoonGi encerio ¿que pasa?

- ¿Puedes irte de una maldita vez?

- ¿Hice algo?

Apreté mis puños con fuerza tratando de relajarme, funcionó un poco, ya que si no me controlaba rápido iba a estamparle mi puño en esa carita de bebé que tiene.

- T-Tú... Me gustas ¿si? -solté a punto de ponerme a llorar-.

Puede sonar muy tonto lo que digo, pero este chico me gusta mucho y lo que hizo enserio me lastimó. Solo quiero llorar.

- ¿Que? -preguntó el muy infeliz- ¿Que dices?

- Por la mierda, ¿no escuchas lo que te digo? Me gustas!

Vi que frunció su ceño, ya lo esperaba. Él prefiere a TaeHyung, prefiere a su mejor amigo... Pero estoy bien. Supongo.

- Es una broma ¿verdad?

- Que follaste con tu amigo es una broma ¿verdad?

Mierda, ahora si la embarré.

- ¿Quien te dijo eso?

- Eso no importa. Te odio!

- ¿Por qué me odias? No somos nada más que amigos!

Y esa fue la gota que derramó el vaso...

- Te odio! -grité lo más fuerte que pude- aléjate de mi!

- YoonGi! ya calmate -tomó mi brazo fuertemente- dejame explicarte.

- ¿Que me dirás? No quiero que me digas como fue que se la metiste a TaeHyung!

- Cierra la boca pedazo de...

- ¿Que pasa aquí?

- Hablando del rey de Roma -bufé observando a TaeHyung-.

- Tae, ya vámonos -dijo Jimin llevándoselo-.

Se lo llevó lejos, ya no pude seguir escuchando lo que hablaban.

Corrí al baño a encerrarme, necesitaba desahogarme de alguna forma.

Me sentía tan mal, tan humillado. Creí que quizás Jimin me quería, al menos un poco. Creí que aún quedaba algo bueno en él. Pero supongo que estoy bien.

Soy huérfano, vivo solo, no tengo más familiares aquí en Seúl, soy el único pendejo con 17 años en nuestra clase, repetí dos años seguidos, durante un tiempo vendí droga y robaba. Lo entiendo perfectamente, no soy lindo, no tengo un cuerpo lindo y bien formado como ellos dos, así que estoy bien, yo tampoco me elegiría.

Jimin

- Ya basta! Dejame tranquilo -gritó nuevamente mientras lloraba-.

- TaeHyung, por favor...