Bad Boy

T H R E E

La tarde del día 8 de Marzo se encontraban Jimin y YoonGi sentados en el sofá de la casa del menor. Eran poco más de las doce y veían películas mientras comían golosinas.

- Deberíamos hacer algo más divertido -dijo el menor mientras sacaba la película que habían puesto hace un rato- esto ya se está volviendo aburrido.

- Si, tienes razón. Deberíamos hacer otra cosa más divertida.

- Escuché que mañana es tu cumpleaños -dijo con entusiasmo lanzándose hacia su mayor- seré la primera persona que te desee un feliz cumpleaños YoonGi.

- De hecho solo faltan algunos minutos.

- Verdad! -se levantó rápidamente y corrió a un cajón de su habitación sacando una caja envuelta en papel de regalo- lo podrás abrir en exactamente cinco minutos.

Ahora la expresión del pálido era de asombro, nunca imaginó que el increíble Park Jimin le diera un regalo de cumpleaños. Pero aún así sonrió con timidez. Solo un poco más y podría ver el grandioso regalo que Jimin le tenía.

Desde el momento en que el pelinegro sacó la caja el tiempo pasaba mil veces más lento. Hasta que por fin... El reloj dió las 00:00.

- Feliz cumpleaños Yoonnie!! -gritó abalanzandose al mayor con un rubor en sus mejillas- uh, lo siento... No quise llamarte así.

- Tranquilo, me gusta.

Ambos sonrieron y volvieron a unirse en un cálido abrazo.

- Ten -el pelinegro extendió la caja hacia YoonGi para que la tomara-
e-espero te guste.

Comenzó a abrir la caja mientras un color carmesí teñia sus mejillas. Al terminar de abrir su regalo, pudo encontrarse con un poleron color negro y diseños de color rojo. Se sintió extraño, ya que estoy colores no le gustaban mucho, pero cuando terminó de sacar lo que traía dentro quedó sin palabras. Estaba demasiado feliz, solo quería abrazar, darles las gracias y besar las regordetas mejillas de Jimin.

- Gracias! -dijo mientras abrazaba al menor- ¿Como sabías que me gustaba Kumamon?

- Pues... Tengo mis secretos -sonrió con ternura provocándole un escalofrío al pálido por aquellas palabras-.

- Gracias de todos modos, eres genial -rió y luego se puso su ancho poleron de kumamon-.

Ambos rieron por lo chistoso que se veía el mayor. Pero muy en el fondo, ambos deseaban que ese momento durara para siempre.

- ¿Cumples...

- 17.

- Oh... Esta bien.

- Hey... -llamó la atención del contrario- ¿Por qué tu actitud es así?

- Pues... Es algo complicado de explicar YoonGi -se acomodó en su lugar invitandole a seguir con el relato- Verás... Cuando Rosseane tenía 10 años sufría de bulling, y yo que soy su hermano mayor, quería ayudarla a seguir adelante. Mi apariencia en ese entonces era demasiado tierna para serte sincero -soltaron risitas- y decidí cambiar para así poder ayudarla. Tiempo después dejaron de molestarla a ella y a mi.

- Mis padres murieron -soltó creyendo que era el mejor momento para decirlo-.

Jimin quedó observándolo algo asustado por su tan repentina confesión. Sintió un pinchazo en su corazón al ver como los ojos de YoonGi se llenaban de lágrimas poco a poco.

- Mi mamá tenía tuberculosis, y el tratamiento era bastante caro. Mi papá se suicidó y luego mi madre murió cuando estaba terminando de juntar el dinero -soltó un suspiro para poder continuar- estuve muy ocupado juntando dinero de distintas maneras, ahí está tu respuesta de como repetí dos años seguidos.