Susurro Fantasmal

Capítulo 47/ Adiós ángel parte 1

Pavel (POV)

Nota de la autora: Este capítulo es parte del flashback de Pavel. No tiene secuencia con el anterior capítulo. Disfruten de un poco de la vida de nuestro gruñón policía Pavel.

Me encontraba flojeando en la sala de mi casa luego de un exhausto día de escuela, pretendía ver la televisión aunque los programas me aburrían infinitamente.

En realidad sólo aplazaba lo inevitable, la de hacer la puñetera montaña de inútiles deberes que esperaban a hacer hechos por mí, no quería a mi viejo cabreado, dándome sermones sobre la importancia de la escuela y el futuro bla, bla, bla...

Mi viejo tenía una gran esperanza en mí de unirme a la policía y algún día ser el Sargento Hanford y poder continuar la tradición, justo como mi abuelo. Típico de esas familias de larga tradición, mi padre es igual.

Para su mala suerte, yo soy la oveja negra. Muy típico sí, pero qué follón seguir los perfectos planes de mi padre. Aunque, para ser sincero; me gusta el rollo policial. Pasaba mis ratos libres resolviendo misterios por mi cuenta o, viendo la única chorrada que no pasan en televisión como CSI. Papá decía que no todo es real, que su departamento se acercaba bastante a ellos pero que no todo es miel sobre hojuelas. Qué le den, es bastante emocionante.

Tengo unas increíbles habilidades de deducción, por lo que podría decir que soy un jodido genio. Con la pinta de chico malo que no le importaba nada, pero soy brillante. Tanto que me aburro, todos y todas me aburren, ni mencionaré la escuela. Lo más cerca que se puede comparar la prisión, es con la escuela. Para ponerlo todo aún peor, tenía que aguantar ese montón de idiotas en la clase. Hago lo mínimo para sobrevivir.

Mi viejo notó esta inteligencia en mí, aún recuerdo cuando dijo que entraría rápidamente al departamento de inteligencias.

-Pav, eres más listo incluso que yo. Ya te puedo ver a cargo de inteligencias-me da una de esas sonrisas de padre orgulloso-, Hanford al poder.

-Cálmate Pa, hay que pasar muchas pruebas para eso. -dije sin el mínimo rastro de ánimo.

-Siempre eres tan flojo -me regaña-, podría hacer sólo una prueba de diagnóstico, tengo contactos Pav. Ya sabes que hay una división para jóvenes como tú, sólo debes tener 18 ¿Vale?

-No tengo interés en estar en un grupo de frikis amantes de la Ley y el Orden -me encojo de hombros-, pero si eso te prueba algo, venga haz la prueba.

- Lo bueno de ser tu padre es que, te conozco lo suficiente para traducir eso y saber que en realidad sí quieres que te haga la prueba. -suelta una carcajada.

-Ya cállate. -gruño con tono grosero que Papá decide ignorar.

-Programaré una prueba pronto.

Me alejé a mi habitación, no temía a la prueba.No soy estúpido, puedo con ese tipo de evaluaciones. Temía a otra cosa, una cosa que había hecho un buen trabajo escondiendo. Era esa "habilidad" que me permitía ver algunas cosas que nadie más. Me tomó tiempo y una que otra sospecha de que estaba loco para darme cuenta que yo era... diferente.

Desde pequeño, muy pequeño miraba sombras que yo creía que estaban allí, que era normal y que todos podían verlas pero no. Nadie las miraba, ni siquiera mi legendario viejo. Mi instinto de supervivencia me había hecho cerrar la boca y no hablar al respecto. Me tomó mucho más tiempo y reconsiderar mi cordura saber lo que realmente eran, eran... espíritus, fantasmas, llámalos como se te venga en gana. Un estúpido, no tan estúpido de la clase fue quien me lo dijo en una fiesta. No debí de haberle creído porque el tipo estaba ebrio.