22. Política.

82 6 0
                                    


Sé acerca la hora del crimen, puedo verlo en mi reloj mientras cada segundo que pasa se vuelve más oscuro. Al salir a la calle aprecio cómo los murales de los criminales recubren las paredes de sus víctimas, quienes las lucen con todo orgullo con la esperanza de que podrán saborear un poco del tesoro que estos les han robado, pero por algún motivo ignoran. Enciendo la radio con el afán de escuchar algo de música y perderme un poco de toda esta inmundicia, pero al cabo de unos minutos me doy cuenta que todas esas dulces mentiras lamen mis oídos intentando seducirme, buscando que les dé vía libre a todas esas bestias para que puedan clavar sus puñales en mi espalda y beber hasta última gota de sangre de mi agotado cuerpo por las duras condiciones que ellos escogieron para mí sin siquiera preguntarme. Apagó aquel aparato en busca silencio, pero resulta inevitable el no darse cuenta que nos convertimos en ovejas que sirven a los lobos, en peces que saltan al barco pesquero y en el peor de los casos, en meretrices devaluadas que solo con palabras insustanciales hacen cualquier cosa con tal de satisfacer la progresiva insatisfacción de estos falsos profetas. Esta artimaña rebajada resulta tener un costo excesivo para nosotros, puesto que provoca que los miserables trabajen hasta morir en un período de tiempo constantemente en ascenso, a fin de mantener y rodear de lujos a estos reyes con coronas de boñiga. Sin importar que tan pocos sean a comparación de la plebe, nunca están conformes y siempre se encuentran dispuestos a arrebatarnos cada uno de nuestros derechos con tal de convertirnos en inodoros donde pueden defecar cada vez que se les antoja. De eso se trata todo este espectáculo, de nacer encadenado en un cuarto de tortura, donde cada cuatro años nos dan la oportunidad de escoger al verdugo de nuestros sueños, quien buscará provocarnos tanto daño como le sea posible, y estará presto a escupirnos en la cara cada vez que tengamos sed. 

Relativamente bien.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora