Hermanos D'angelo.

Capítulo 2.

CHARLOTTE

Estaba preparada para una familia disfuncional, personas extrañas, familiares sobreprotectores, niños fastidiosos, intentos de padres dulces o cualquier otra cosa que conllevara un hogar, una familia. Pero sin duda alguna, no estaba preparada para cinco hermanos en una enorme mansión.

¿A qué clase de padres se le ocurre dejar a su hija con cinco chicos?

Definitivamente no tenían idea, o prefirieron ignorarlo por la gravedad del problema que ahora estaba sobre nosotros. Nunca había tenido que enfrentar las decisiones de la manera tan precipitada en que lo hice al alejarme de todo y todos, aunque no habían muchas personas, las pocas me hacían sentir bien.

-¿Te gusta la casa? - preguntó uno de ellos. Estaba completamente hipnotizada por la elegancia del lugar, lo rústico que lo hacía ver más original, sin duda alguna ellos tenían buen gusto.

-Es hermoso, considerando que son hombres - lancé lo primero que cruzó por mi mente. Conocía que a las mujeres nos gustaba ser más decorativas y solíamos darle toque a todo, algunas mujeres al menos, pero ver la casa de cinco hermanos en perfecto estado y decoración valiosa, para mi era nuevo.

-Eso fue alagador y ofensivo - mencionó Max -Pero lo acepto.

Lo miré un poco confundida, realmente parecía el más relajado y gracioso de los cuatro que hasta ahora había conocido. Diego y Danton eran un poco más reservados, simplemente me miraban con disimulo, corriendo su mirada por cada paso que daba dentro del lugar. Parecían del tipo al que le puedes pedir un consejo, pero nunca confiarle algo, sorprendentemente extraña combinación.

Pero Chris, el de ojos azul profundo, mirada altanera, rostro fino, cuerpo no muy corpulento como el de sus hermanos, pero si trabajado y definido, ese chico estaba acuchillando con su mirada mi presencia. Podría jurar que lo que pasaba por su mente no era muy amable y menos, carismático. Luego de la presentación fugaz que tuvo al llegar, no volvió a acercarse o a hacer preguntas, simplemente se cruzó de brazos, optando la posición menos sociable que existe, sin duda dejándome claro que no tenía el mínimo interés en saber de mí, o la razón que me llevó allí.
Yo no era indiferente a su comportamiento, realmente estaba actuando de manera grosera e incluso parecer altanera, pero no podía bajar la guardia o dar un concepto erróneo de lo que soy. Si iba a estar solo con chicos, era mejor demostrar lo ruda que puedo ser.

-Debes tener hambre - mencionó uno de ellos. Tenía una mirada tierna, ojos de un profundo negro, cabello como en corte militar, cuerpo más desarrollado que el resto. Me atrevería a decir que era el mayor de todos por su aspecto físico.

-Seguramente, preparemos algo para nuestra invitada - sugirió Max con una pequeña sonrisa. Él a diferencia del resto, tenía una mirada muy oscura, a pesar de tener los ojos color verde, algo que resaltaba sin duda, un cuerpo como los demás, casi la misma talla, con la diferencia de llevar el cabello más largo, cubriéndole incluso parte de las orejas. Noté por el aspecto que me tenía un poco confundida, que tenía cicatrices en sus brazos, como cortadas horizontales y verticales, casi parecían latigazos que quedaron en cicatrices que intentaba cubrir con algún tatuaje. Como el de Dragón que cubría parte de su cuello y hombro derecho -Aunque debes estar satisfecha.

-¿Disculpa? - pregunté confundida, dirigiendo mi mirada directamente a sus ojos.

-Casi me devoras con la mirada princesa - elevó una ceja, mientras el resto de chicos comenzaban a reírse de mi actitud seguramente.

Sentí el calor subir a mis mejillas de inmediato. Intenté no bajar la guardia soltando una pequeña sonrisa, aunque estaba segura de que iba a parecer fingida, esperaba que no lo notara.

-Realmente lo que tengo es sueño - quería cambiar el tema, además de que me sentía cansada y necesitaba una siesta -¿Cuál será mi habitación?

-Puedo llevarte, si quieres - dijo Max. Volteé los ojos con algo de cansancio, al tiempo en que mi mirada se topaba con Chris, que de nuevo mantenía esa penetrante y fría actitud.

-Gracioso Max, la llevaré yo - dijo el que no había intentando ser cortés, dándome solamente su nombre como saludo y bienvenida -¿Segura que no deseas algo de comer? - se aseguró con un toque de amabilidad.

-No, gracias - aseguré.

Tomó mis dos maletas como si se trataran de bolsas de dulces, algo que sin duda me sorprendió, considerando que costó mucho bajarlas del taxi por el peso.

Comenzó a ascender en las escaleras principales. Me llevaba ventaja por unos pasos ya que era más rápido que yo, además de que me detenía a cada segundo admirando las enormes pinturas sobre las paredes, algunos adornos antiguos y bastante originales sobre las mesas de descanso. Todo estaba impecable.

-¿Cómo es posible que solo vivan ustedes? - pregunté confundida mientras le seguía. Él me miró un poco cansado, como si mi pregunta lo hubiese incomodado.

-Nuestros padres eran millonarios, murieron hace poco de un año y nos dejaron todo a nosotros - limitó su respuesta, pero eso ya era un avance.

-¿Cómo es que mis padres los conocen? - pero me conocía, y una vez que comenzaba, era difícil detenerme.

-Eran amigos de nuestros padres, no podíamos decir que no - se encogió de hombros.

-¿A una desconocida? - cuestioné su respuesta. Éste suspiró cansado y se detuvo.

-La próxima vez te acompañará Max, hablas demasiado, se llevarían bien - comentó sin toque de gracia, realmente lo decía enserio.

Me quedé en silencio, un poco avergonzada, pero al menos con unas cuantas respuestas.

-Esta será tu habitación - señaló la puerta tras de mí -Yo estaré en la puerta del lado, Max está dos puertas adelante de la mía, por si necesitas algo.

-Claro, gracias - dije con amabilidad.

Me di la vuelta dispuesta a abrir, pero a mitad del proceso me detuvo.

-Ésta es la llave de la habitación, eres la única con una copia, así que no la pierdas - me extendió la llave y se fue.

Estaba segura de que era temporal, que mis padres resolverían los problemas e iba a volver a casa, sana y salva.

Al menos eso creía antes de entrar a la habitación, ya que al fondo del que parecía el pasillo, se escuchaban gritos, de dolor, de angustia, alguien estaba sufriendo y gritando realmente fuerte.

¡¿Qué estaba pasando?!
¿Quién era?

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¿Cuál de los hermanos les gusta más hasta ahora?

Les digo que algunos los sorprenderán, así que esperen ansiosas 😆💕

Pero no se preocupen, suelo actualizar rápido y seguido 🤗