Eres mi desafío - TERMINADO ✔

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Declare todo. Se puso la orden de investigación y supuestamente se ejecutarían cargos contra Richard, ya que habían testigos que lo habían visto salir minutos antes de que me encontraras en el piso, golpeada.

Cuando llegue a casa, entre y me encontré a mi madre echada en el sofá con las piernas cruzadas en su laptop.

-¿Donde estabas? -Pregunto sin despegar la vista de lo que hacia.

Esto era demasiado.

-Me desaparezco un día y una noche... ¿Y eso es lo único que dirás?

-Que -dijo al fin mirandome-, ¿quieres que me ponga a llorar? Ya te conozco, es obvio que andabas con algún chico revolcándose en su habitacion. ¿Te cuidaste verdad? No quiero niños aquí, bastante tuve contigo.

Sus palabras me hirieron a pesar de que había pasado años soportandolas. Aun no me acostumbraba a ser despreciada por mi propia madre.

-Si me conocieras tan bien, podrías darte cuenta que lo que piensas es mentira con tan solo verme.

Deje notar mis moretones de los brazos y del estómago.
Pero ella no se inmuto, de hecho, apartó la vista demostrando que no le importaba en absoluto.

-Apuesto te caíste por borracha.

Deje en silencio el momento. No tenia ganas de responderle, la verdad, no tenia ganas ni de vivir.

Deje escapar un suspiro y subi a mi habitación. Dentro de ella me lance a la cama y enterré la cabeza en la almohada, dejando salir aquel llanto que tenia atorado de hace mucho. Deje que las lágrimas me cubrieran la cara y mojaran toda la almohada si quisieran, deje que mi dolor abandonara un poco mi cuerpo a través de esa acción que calma luego de hacerlo.

Porque lo que mas necesitaba era calma.

No me importo que mi madre escuchara mis quejidos y sollozos desde abajo, no aquí dentro donde podia no verla y estar lejos de ella aunque sea unos metros.

Sentía el pecho apretado, un nudo en la garganta difícil de disipar y mis extremidades templar. No tenia ánimos, ni siquiera para pensar en Tomas.

Tomas...  Mi loca obsesión. Mis locas ganas de intentar conseguir algo, hicieron que me terminaras gustando...

El celular sonó dentro del bolsillo de mi pantalón. A duras penas lo saque y desbloquee la pantalla, en su interior se mostraban varias notificaciones de distintas redes. Ninguna me importaba en absoluto, pero hubo una que llamo mi atención.

"Le llego el karma a la puta"

Decía como titulo.
Presione la notificación y salia que lo habían compartido de una pagina anónima y sin nombre, la cual había agregado a todo el colegio.
Había estado escribiendo cosas de mi respecto al incidente, y todos habían estado compartiéndolo para hacerlo publico.

De los nervios me senté en la cama y empecé a leer las otras publicaciones:

"Le salio el tiro por la culata"
"Intento sacar celos y casi la violan"
"Le llego el karma a la puta"
"Haber si con esto se le pasa lo asquerosa"
"Que aprenda que ella también puede ser una víctima"

Fueron las únicas que pude leer, porque llegando a la última mis ánimos cayeron al piso. Las lágrimas salieron una vez mas, soy el blanco de aquellos que siempre trate mal y ahora me esta llegando el karma... Si, es verdad.

Pero no contentos con eso, habían colocado una foto mía bajo cada publicación para dejar claro de quien se hablaba.

Sentía vergüenza, pena y ganas de morirme.
Me dieron desaparecer de una buena vez, al fin ybal cabo la única que lamentaría mi ida sería Jane.

Cuando estuve apuntó de bloquear el celular y romper a llorar sobre la cama, una vibración del celular me asusto. Con miedo de que fuera otra represalia contra mi, otra burla, o palabras hirientes con el fin de acabar  con la poca reputación que me quedaba, note que el nombre sobre el mensaje llegado era... Tomas.

Tomas: No dejes que te afecte

Decía... Y no pude aguantar el llanto.

Abrace el celular junto la almohada y espere a quedarme dormida mientras las lágrimas seguían cayendo.

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Linda semana a todos, denme una estrella o comenten 💕