Soy una perra. Una que no le importa nadie y de pronto sin darme cuenta, llega un chico a acabar con esa rutina.
Me enamoré de él y él odia las chicas como yo. Pero, ¿realmente crees que esa es la historia?
Mi historia es más que eso.
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...
Me habia adelantado a tomar la bandeja para recibir el almuerzo antes que el grupito de nerds. Me acerque sigilosa para que no me notaran. Note como hablaban de su musica del asco y de juntarse a una pijamada el fin de semana.
¡Por favor! ¡Como puedes seguir haciendo pijamadas a los 18 años!
Que pateticas.
Cuando estuve al lado del grupito notaron mi presencia y se quedaron mudas. Una de ellas, una morena con horribles ojeras se dispuso a acercar la bandeja a la cocinera, pero me adelante y la empuje con la cadera para que se hicera a un lado. ¡Dios! Que educación. La morena se corrio a un lado y me sedio el paso. Acerque mi bandeja y la cocinera con mirada asesina y pregunto:
-¿Que quieres? -Su voz ronca me molestaba.
-Arroz blanco con ensalada -Le respondi sonriendo, haciendome la linda.
Asintió agarrando un cucharon y lo untó en la bandeja de chuleta de cerdo con grasa, lo tiro al platillo y me miro. No alcance a protestar cuando tomo una hoja de lechuga y la puso al lado. Finalmente agarro con un dedo un poco de oregano y lo tiro sobre la comida.
-Aqui tienes -sonrió-, tu almuerzo.
Mordi mis labios con rabia.
-¿Bromeas vieja? -Le espete con asco. No se que mas me daba asco, la comida, o la vieja gorda.
-Lo recibes o te quedas sin almuerzo -sugirió casi victoriosa.
Me mire la panza completamente plana.
-¿Sabes que? Te lo agradezco. Me ayudas a bajar unos kilos para no llegar a como estas tu -sonrei-, vieja, gorda, y amargada.
Ella iba a responderme cuando la interrumpí.
-Deberias dejar eso de ayudar a los pobres indefensos. Actuas como si se te diera el nombre de defensora, y en fin, aca todos te dicen la vieja de la cocina.
Antes de escuchar algo me voltee dejando que mi cabello largo y rubio golpeara como un latigo la cara de la morena. La mire de soslayo para burlarme y me despedi haciendole gestos con los dedos.
Llegue a la mesa de mis amigas. Ellas sentadas junto s la ventana en una mesa grande y limpia me miraban.
-¡Dios Sam, eres mi maldita ídola! -gritó jane casi dando brincos en su asiento.
-Ya lo sabia -le respondi cerrándole un ojo y cruzándome de piernas en la silla.
-Eres una maldita perra cobarde. Puta asquerosa mal nacida -Dijo Claudia. Ella era la ultima en llegar al grupo, y estaba aca por lo hermosa que era. Por tenerla aca obligada debiamos aguantar insultos en contra a nuestra forma de ser, nuestras acciones, que no le parecian buenas en lo mas minimo.
-¿Perra? Si. ¿Cobarde? ¿Acaso no viste lo que acabo de hacer cieguita? Puta, si querida con mucho gusto. Asquerosa quizas, cuando me dan ganas acepto lo que sea -le confieso riendo-. Pero, ¿mal nacida?.. Cariño si soy la mejor nacida aqui, ¿no me vez? Soy hermosa.
Claudia se mordia sus labios con furia.
Jane me había dado los cinco diciendo que estaba orgullosa de mi.
-Deberias ser mas como nosotras, Claudia -le recomendé-. Es divertido.
Ella me miraba con esos ojos verde agua.
-Jamas sería como ustedes -Confesó, sin ni una pizca de arrepentimiento.
-Que triste -Me mofe.
Las tres somos las mas codiciadas por todos aqui en el instituto. Adoro ser el centro de atención entre mis dos perras falderas. Y como no ibamos a ser miradas si claudia ademas de tener ojos hermosos, su fisico es de envidiar. Alta y delgada. Su cabello hasta la cintura con ondas. Jane es blanca palida cn pecas en la nariz. Cabello anaranjado narural y labios siempre rojos. Mediana y delgada. Y yo? Rubia. Y amo serlo. Blanca son ojos celestes. Amo andar en bikini porque tengo un cuerpo grandioso. Y lo mejor de todo, podia obtener todo cuando quisiese.
Y tampoco me importaba que me catalogaran como alguien superficial, porque lo era y me encantaba serlo. El fisico es importante para todo, y todo lo que he logrado hasta ahora ha sido en base a una caminata sensual hasta mi víctima, una mirada coqueta y un beso lento en su mejilla. Con eso ya es suficiente.
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Salimos de clases las tres juntas. Yo al medio. Vi a una pareja besarse, la chica espaldas a mi. El chico me vio y yo le cerre el ojo, pase de largo sintiendo como no me sacaba la vista de encima y su novia al darse cuenta le dio una bofetada y se largo.
Adoro ser yo.
Me subi a mi jeep blanco y me despedi de Jane y de mala gana de Claudia.
Maneje hasta llegar a mi casa, grande, de dos pisos. Entre cerrando la puerta cn el pie y en eso me tope a la sirvienta.
-Señorita, buenas tardes.
-Buenas Laura
Subi a mi habitación, cerre la puerta y me lance a la cama dando un largo suspiro.
Entonces senti que algo vibraba en mi bolsillo. Abri los ojos de golpe incorporándome, garre el celular y lei un mensaje.
Chat
Jane<3: Supe algo Sam. Debes saberlo yaaaa❤
Yo: Que cosa?
Jane<3: compañero nuevo 😍 querida
Yo: de verdad?😨
Jane<3: y esta guapo 😶Me aguanto las ganas de soñar con el y hacer cosas sucias jaja
Yo: Acaso ya lo viste ???
Jane<: tengo contactos amiga
Yo: Mandame una foto😘 ahora
Cuando me llego la foto fue lo mejor del dia.
"Otra victima" pensé.
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