O. S CASHTON Y MUKE

Luke

N/a: Si sientes que no es para ti esta historia, solo lee la nota al final:)

Era un nuevo día, abrió los ojos y como ya se le había hecho costumbre, paso su mano por el resto de la cama, esperando encontrar a esa otra persona.

Él ya no estaba ahí, había hecho sus maletas y decidido partir sin razón alguna, quizá se le habrá hecho demasiado fácil el abandonar a la persona que lo apoyo incondicionalmente.

Ojalá Luke hubiera tenido el valor para volver a buscarlo y decirle que estaba abandonando a su familia.

Pero no se atrevió. Luke pasó su mano derecha por su vientre, estaba completamente plano pues aún no pasaban más de dos semanas.

"Nos hará mucha falta, lo sé, pero no quiero que se vea infeliz al enterarse o que llegue a odiarte" murmuró mientras daba pequeñas caricias.

Los primeros meses para Luke fueron los peores, y no porque la pequeña criatura que estaba creciendo dentro de él lo molestará, más bien era porque no se acostumbraba a la ausencia de Michael, algo le decía que necesitaba más que nunca su precencia.

Lloraba todas las noches sin falta con una playera que guardo de él. No fue hasta que un día, cuando pudo sentir la patada de su bebé, decidió que se olvidaría de Michael, que olvidaría que lo necesitaba.

"No creo que sea buena idea, Luke" había dicho Ashton, y Calum negaba, el rubio había tomado la decisión de irse lo más lejos posible de aquella ciudad que sólo le daba recuerdos de su pasado con Michael.

"Deberías esperar, por lo menos hasta que nazca" aconsejó Calum con una sonrisa genuina.

"Y sería injusto que te fueras y no nos dejaras conocerlo o conocerla" Ashton se había encariñado con un bebé que aún no nacía.

Luke se quedó pensativo un rato, sabía que podría ser injusto porque ellos lo ayudaron y apoyaron mejor que nadie, pero todos los días se le hacía cada vez más difícil, sin embargo, accedió a las peticiones de sus amigos.

"Está bien, está bien... De todas formas, no faltan muchas semanas" sonrió. Le emocionaba más que nada en ese momento la idea de que tendría a su bebé en brazos, que podría ver como serían sus rasgos, acertar en el color de sus ojos... Quizá serían verdes como los de Michael o azules.

Luke no había querido saber el sexo de su bebé, a pesar de que Ashton había insistido, porque era algo que le daba miedo averiguar y prefería que fuera una sorpresa.

Estaban los tres reunidos en la casa de Ashton y Calum, porque sí, ellos mantenían una relación desde antes de que Michael lo dejara. Mientras que Ashton preparaba la cena, Calum ayudaba a poner los cubiertos, sin dejar que Luke hiciera algo.

"Chicos, no estoy invalido" se quejaba el rubio.

"Podrías lavar los trastes" rió Calum.

Poco antes de sentarse a comer, Luke comenzó a sentir un pequeño dolor, que poco a poco se fue instensificando hasta provocar que se cubriera el vientre con ambas manos.

"¿Luke? Oh por Dios... ¡Ashton!" Gritó Calum y su novio salió de la cocina, al principio con una sonrisa que se esfumó al ver a su amigo retorcido por el dolor.

Lo llevó hasta su auto y condujo al hospital más cercano, donde afortunadamente era donde se atendía.

Ashton y Calum tuvieron que esperar por dos horas, nerviosos de lo que dijeran sobre el estado de Luke y ansiosos por saber que había sido aquel bebé.

Fueron llamados para ver a Luke.

"Felicidades al nuevo papá" había dicho Ashton al entrar. Luke sonrió, se le veía bastante cansado.