T2. Episodio 1, parte 2

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Había pasado bastante tiempo desde el falso suicidio de Amelie. Exactamente cuatro meses. Aquellas semanas estuvieron repletas de casos, y Amelie por fin fue reconocida por su nombre y no por ser la hija de Sherlock Holmes. Rosie y su hermana estaban juntas todo el tiempo, o viendo su serie favorita (Doctor Who) o leyendo y hablando sobre libros de todo tipo (Exepto los románticos, ya que a ninguna de las dos les gustaba ese estilo)

Para Sherlock, estas semanas fueron mas de pensar en otras posibilidades. ¿Qué hubiera pasado si a John nunca se le hubiese ocurrido revisar el celular de Rosie? ¿Qué habría pasado con Amelie si no sobrevivía? ¿ O si sobrevivía pero no podía habar nunca mas? Todas estas preguntas rondaban por el cerebro del detective, entre muchas mas. Sin embargo, aquella semana de julio, su cerebro le pedia algo para poder pensar: Un ventilador.

"La semana mas caliente en diez años" anunciaba la televisión. En efecto en la ciudad hacia  mucho calor. Un calor, que para las personas de Londres, donde siempre hacia frio, era infernal.

John intentaba leer el periódico, mientras le caían gotas de sudor. Amelie y Rosie pagaron sus caras al único ventilador que habían encontrado. Este chirriaba cada vez que oscilaba. Sherlock se encontraba en la cocina, sin que nadie le prestara atención. Por desgracia, este salió a la sala para presumir  sus resultados con su hija y Rosie. Estas, al escuchar sus nombres se dieron vuelta y luego al ver que Sherlock no llevaba NADA de ropa, volvieron a su posición inicial.

-¡¡Papá, por favor!!- Exclamó Amelie.

-Trauma de por vida- Susurró Rosie. Luego de un intercambio acalorado ( En muchos sentidos) de palabras, el detective se dignó a ponerse al menos unos calzoncillos.

  Sherlock, ya bastante irritado, hizo una llamada a alguien, a quien Amelie pudo identificar fácilmente.  "Gracias" Había susurrado su padre por teléfono. Algo muy bueno estaba pasando. Sin dejar que Sherlock hablara, Amelie dijo, aplaudiendo dos veces.

-Vamos todos. A  empacar nuestras cosas. ¡Nos vamos de vacaciones!

La verdad, mas que vacaciones, era pasar unoa días en una playa cercana, solo por el hecho de que en la ciudad hacia demasiado calor. A Sherlock no le gustaba ir a otro lado y dejar el trabajo pero esto lo había superado. John por su parte estaba encantado, ya que siempre iba de vacaciones solo con Rosie. Sería solamente una semana, pero para Amelie, sus primeras vaciaciones la emocionaba terriblemente.

Luego de que ambas niñas preguntaran mil veces con ansiedad cuando llegaban, arribaron a una casa en el medio del campo. La playa en cuestión quedaba a una hora en auto y Sherlock para ahorrar dinero, usó como hotel la casa de sus padres.(La verdad no se si la casa Holmes queda cerca de una playa) 

La señora Holmes los recibió alegremente, besando a su hijo y su nieta. Amelie estaba tan ansiosa que entró corriendo a la casa para dejar sus cosas. Pasó por la sala para saludar  a su abuelo y estuvo a punto de ignorar un pequeño detalle.

-¿Tío Mycroft?- Sus ojos  se echaron tanto para arriba que quedaron completamente blancos, al igual que su padre. Ninguno de los dos quería que Mycroft estuviera allí.

-Por favor- Pidió la Sra. Holmes-, no te pelees con tu tío, Amelie. Sé mejor que tu padre- Los Watson no puedieron contener la risa.-Ahora: John, Rosie, ustedes dormirán en el antiguo cuarto de Mycroft. Hijo, tu dormiras en tu cuarto con Amelie. 

- ¿Es decir que Mycroft dormirá en el sofá?- Rió Sherlock. Amelie miró a su tío, poniendo una cara de "Oh, por Dios" muy exagerada.
La sonrisa de ambos se acabó cuando se enteraron de que dormirían en la misma cama: Rosie y John durmieron juntos como cualquier padre haría con su hija, en cambio Amelie siempre había dormido con escaleras de diferencia entre ella y su padre.

Luego de toda una noche de "Por favor ,¿podrias correr tu pie de mi pierna?"o "Tengo calor. Alejate",  prepararon todo para un dia en la playa. Amelie (Y en cierto modo todos los demás) se decepcionaron al saber que  Mycroft iría a la playa con ellos y los Holmes no. 

Una hora de viaje después, un sol picante bañaba una playa en donde no habia mucha gente. A lo lejos se podía apreciar un muelle. John pusó con mucho esfuerzo una sombrilla mientras Sherlock le decía sentado como hacer para que no se vuele. Amelie y Rosie pusieron sus mantas y se sacaron la ropa dejando a la vista dos bikinis idénticas pero de diferente color. Sherlock y John también se sacaron la remera una veces que no soportaban mas el calor. Mycroft (-Gracias a Dios!-)prefirió tener puesta su remera en caso de que "refresque"(-Pero que mala escusa-)

Amelie y Rosie, a diferencia de  Mycroft,tenían lindo cuerpo que lucir, lo cual despertaba ciertos celos en sus padres. Las niñas leían, John miraba el horizonte pensando en algo en particular, mientras que ambos hermanos completaban una revista de crucigramas. Al terminarlo, Sherlock, sin tener nada mas que hacer, comenzó a impacientarse.

- ¿Por que no te metes al agua?- Sugirió John. Sherlock le echó una mirada a Amelie invitándola a ir con él.

-Ufff... Esta bien...

Pasaron el resto de la mañana y toda la tarde así. Obiamente los hermanos Holmes se pelearon como tres veces, pero eso no pudo arruinar las hermosas vacaciones que Amelie estaba pasando. Correción: No se arruinaron sino hasta un día mas tarde.

"Arruinar" no es la palabra, "cambiar" sería mas acertada. 

Durante el transucurso del segundo día, mientras todos se relajaban alejados de la orilla, Rosie se mojaba un poco los pies. Amelie dormía por que esa noche los factores "calor" mas "papá" le hacían imposible conciliar el sueño. Los tres hombres discutían algo sin importancia, hasta que Rosie corrió empapada hacia ellos con una expresión que no sabía decidir si estar feliz o molesta. Pudieron ver que en un punto de la orilla, comenzaba a llenarse de gente, fromando un circulo. Algo había pasado.

Rápidamente, padre e hija, uno contento y el otro enojado, pensaron lo mismo.

Se acercaron pidiendo permiso entre la gente: Un cadáver.

"¡Un cadáver! ¡Un cuerpo! ¡¡Un caso!!" Se repetía en la mente  de Sherlock.  Al fin acabaría con esa monotonía de sentarse y no hacer nada. Se acercó al cuerpo. Mujer. Edad aproximada cincuenta años.  Asecinada hace dos semanas. No, la corriente lo había arrastrado. Unos tres días. Acuchillada multiples veces en el torax.

Las personas asustadas habían llamado a la policía rápidamente. Estos arribaron listos para investigar, pero al ver que Mycroft Holmes, el gran político y Sherlock Holmes y su equipo estaban allí- Aunque sea en ropa interior- los dejaron resolver por su cuenta el caso. 

Todo parecía ir bien: Los Holmes examinaban el cadáver, utilizando el cerebro al máximo. No sería tan complicado. O eso es lo que creyeron hasta que la policía trajo a una chica, mas o menos de la edad de las Amelie, desorientada y con toda la ropa manchada con sangre

Sherlock 2 : Las Historias De Amelie.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora