Heteroflexible 《MYG+KTH》

5

-¿Qué?

YoonGi suspiró frustrado y se pasó la mano por el rostro hasta llegar a enterrar sus largos y huesudos dedos en su cabello, llevandolo hacia atrás dejando su frente al descubierto por unos instantes, antes de que vuelvan a caer. TaeHyung no perdió detalle de lo sexy que encontró aquel acto inconsciente del mayor, pero aún así se esforzó en enfocarse en lo que trataba de decirle.

YoonGi se debatía en si repetir aquel loco trato o dejar las cosas como estaban y aguantar al empalagoso chico hasta que se recibiera de la universidad. Pensó en considerar la segunda opción pero el castaño había sido insoportablemente irritante para una persona tan arisca como él ¡y sólo había sido el primer día de clases! No se imaginaba aguantando un año si apenas pudo aguantar un día. Entonces se decidió.

-Eso, te daré lo que quieres y te besaré si prometes alejarte de mí y no volver a molestarme.

Las palabras de YoonGi sonaron despectivas a todas luces, con marcada molestía en su voz tratando de hacer notar esto a propósito, TaeHyung apenas y podía razonar en aquella propuesta.

Es cierto que él ya se había tomado el atrevimiento de besarlo, pero fué sin su consentimiento y apenas había tocado sus labios, por eso la idea de besarlo como corresponde le resultaba tentadora.

Pero aceptar su trato significaba no volver a acercarse a él y eso no le gustaba para nada. Sin embargo YoonGi estaba ahí, ofreciéndose casi en bandeja de plata y eso es mucho más de lo que podría conseguir acosandolo todo el año sólo para que huyera de él o peor aún, se cansara y volviera a darle una paliza. El mayor estaba siendo demasiado considerado y TaeHyung no lo conocía bien aún, ya que sólo habían estado juntos un par de horas, pero estaba seguro que YoonGi no era del tipo de persona que tenía mucha paciencia.

Además, por lo general, él nunca insistía mucho para conseguir algo cuando le gustaba alguién, en cambio el pálido se había vuelto muy díficil para alguien tan casanova como TaeHyung, si llegado a este punto no había logrado conseguir nada de atención por parte del mayor definitivamente ya no conseguiría nada. No porque fuera imposible a la larga, sino porque al castaño le resultaba agotador ser muy insistente, él nunca había tenido que insistir tanto y YoonGi era justamente el tipo de persona que no dejaba dar su brazo a torcer y podría lograr que se aburriera de intentar gustarle más pronto de lo que quisiera. Y TaeHyung nunca se quedaba sin nada cuando le gustaba alguien y mucho menos antes de que dejara de gustarle.

Pasaron minutos en que YoonGi veía como TaeHyung se balanceaba sobre sus talones mientras hacía gestos pensativos que le daban a entender que se encontraba perdido en su propio mundo meditando su propuesta. Y en aquellos minutos YoonGi aún se planteaba la posibilidad de retirar lo que dijo porque ¡¿enserio?! ¡¿besar a un chico?! Es algo que jamás hizo y jamás pensó hacer, pero, de nuevo, él no iba a soportar un día más al castaño insinuandosele como colegiala enamorada, definitivamente no.

-¡Esta bien, lo haré! -Exclamó TaeHyung, sobresaltando a YoonGi -Prometo no volver a acercarme a tí a cambio de que tú me beses.

Las últimas palabras emitidas por el castaño sembraron la incomodidad y el miedo a lo desconocido en el estómago de YoonGi. El extraño chico había aceptado y él tenía que cumplir con su parte.

YoonGi cerró fuertemente los ojos y torció una mueca de desagrado en su rostro mientras se acercaba y tomaba el rostro de TaeHyung en ambas manos. El castaño amortiguó una pequeña risa ante su expresión y se acercó un poco más tomando a YoonGi por los costados. Ante esto el pálido sintió un escalofrío de horror, abrió los ojos y al ver tan cerca al castaño lanzó quejidos que parecían sollozos de desagrado causando ahora sí que se le escapara la risa contenida al menor.

-Hyung, a este paso no vamos a terminar nunca.

-Calláte, esto no es fácil para mí ¿sabés? No me gusta tener que besar a un hombre.

-Si no le gusta entonces no lo alargue tanto y hagalo de una vez. Mientras más tarde, más tiempo tendrá que estar en esta desagradable situación conmigo -Dijo usando un tono de burla a lo último.

-Para tí es fácil porque eres gay.

-Ya te dije que no soy gay, soy bisexual. Y aparte eso no tiene nada que ver, sólo es un beso, puedes hacerlo con quien sea, a menos, claro, que me tengas miedo.

-¡Yo no tengo miedo de un maldito raro como tú!

-¡Entonces hazlo de una vez si t-

YoonGi apretó en puño el dobladillo de la camisa de TaeHyung y lo atrajo denuevo hacia él de un solo movimiento juntando de golpe sus labios con los del otro por inercia. El primer contacto fué sorpresivo para el castaño y tardó segundos eternos en darse cuenta de los movimientos tensos de los labios de YoonGi sobre los suyos, sintió burbujas llenando su estómago y pronto correspondió gustoso al forzado beso del chico del cual recibió un flechazo esa misma tarde.

El mayor tenía los ojos cerrados fuertemente, su cuerpo rígido y manos aún en puño en el cuello de la camisa del menor. Se estaba esforzando mucho por no retirarse, y mucho más cuando el castaño empezó a corresponder al beso; quería que terminara pronto, pero debía hacerlo bien o tendría que repetirlo. Por eso, tratando de no reparar en aquello, se animó a presionar su lengua contra la boca del moreno haciéndo que el beso sea más profundo.

TaeHyung, quien ya estaba demasiado perdido en los labios del mayor, instintivamente trenzó su lengua con la de YoonGi, fundiéndose en aquel beso húmedo que le provocó una sensación efervescente que hormigeó desde su estómago hasta su garganta. Lo estaba disfrutando tanto que no pudo evitar suspirar en medio de la acción dando un leve gemido de satisfacción, siéndo escuchado por YoonGi quien no pudo evitar abrir los ojos un poco sorprendido, notando que el contrario los tenía cerrados.

No era extraño para él sentirse un poco orgulloso de saber que estaba haciéndo disfrutar del beso a aquel chico que se había comportado tan atrevido e insolente con él hace unos momentos. Sin embargo, lo que sí le resultaba un poco extraño era que no pudo evitar prenderse ante esto, provocando que el pálido empezara a sentir un calor agradable al besarse con él. Y fué ahí que la tensión desapareció, volvió a cerrar los ojos pero esta vez de forma relajada y se dejó llevar por el momento.

Posó una mano en la nuca del castaño enredando sus dedos en los cabellos ajenos, y la otra en su mandíbula para tomarlo de un mejor ángulo y así profundizar el beso, a lo que el castaño se dejó. Ya no había rastro de inseguridad o incomodidad en YoonGi, besar a TaeHyung se sentía muy bien y no sólo eso, sino que el menor era un gran besador, el pálido podía asegurar que estaba casi a su altura en ese aspecto y eso sólo hacía mejor las cosas. El mayor podía imaginar que a lo lejos se veían como una auténtica pareja besándose apasionadamente detrás del establecimiento. Con TaeHyung acariciando su espalda, apretando ambos cuerpos más cerca si eso era posible, y YoonGi tironeando los cabellos del otro totalmente extasiado.

Después de un rato de estar así, a YoonGi ya no le bastaba con tomar fugacez bocanadas de aire para seguir besándo a TaeHyung, y sintió la necesidad de apartarse un momento para respirar correctamente. Al hacerlo sus bocas dieron un pequeño chasquido al no querer separarse aún, mientras que sus cuerpos seguían juntos con sus rostros a unos cuantos centímetros de distancia.

Y fué ahí que YoonGi volvió a la realidad otra vez y se dió cuenta de lo que había pasado. Su respiración estaba agitada al igual que la del chico en sus brazos, ambos se miraban a los ojos sin decir nada, esperando a que sus respiraciones se estabilizaran. Sólo entonces, TaeHyung escondió su rostro en el hombro de YoonGi, riendose en el acto, para después acercarse a su oreja y susurrarle aún entre pequeñas risas.

-No puedes negar que te gustó.