TaeHyung era muy escandaloso en clase cuando la gente le prestaba oído. Hoseok no entendía cómo hacía YoonGi para aguantar su parloteo, sobretodo los últimos días que se la pasaba alardeando con todos sobre las prendas nuevas que traía, las cuales, según él, eran de su marca de ropa favorita y le habría costado varias mesadas conseguirlas por si mismo. Era muy ostentoso, a Hoseok no le agradaba, decidió ignorar el resto de su superficial conversación y centrarse en el trabajo.
Al terminar la hora salió disparado a la confitería. Todavía le quedaban tres clases y siempre le daba hambre, seguro era porque su cerebro le pedía azúcar debido al esfuerzo mental que demandaba una carrera tan difícil como la que cursaba. En eso también le caía mal TaeHyung, siempre le iba bien en todas las materias y no parecía estar fatigado por eso.
Al voltear con su bandeja en mano para encontrar un lugar, se encontró a YoonGi sentado en una mesa ya apartada. Fué a reunirse con él, parecía estar leyendo el material de alguna materia en la que no coincidían, ya que Hoseok estaba recursando otras asignaturas. Hoseok admiraba a YoonGi, sabía que se esforzaba mucho por aprobar sus materias, y aparte de eso trabajaba para mantenerse en la ciudad y poder estudiar una buena carrera, ya que sus padres no podían apoyarlo, pero de todas formas le costaba y es que no la tenía fácil de todas formas.
Conversó con el chico pálido un buen rato antes de notar que aún no había pedido algo para comer y pronto sería su siguiente clase. Le extrañó aquel detalle porque el mayor siempre comía a la mitad de la jornada, por lo que le preguntó si no pediría nada, a lo que el otro le respondió que estaba cuidando su dinero porque le quedaba poco y todavía tenía que pagar el alquiler.
A Hoseok esto le extrañó, YoonGi siempre fué cuidadoso con su dinero, incluso para darse sus gustos siempre trataba de medirse. Fué entonces que vió a TaeHyung pasar a lo lejos y recordó todos esos regalos que alardeaba en el aula, armó el rompecabezas y se alarmó al darse cuenta de lo que ocurría.
-¡E-esto no puede ser! YoonGi, no me digas que... no puedes dejar que-
-Yah, Hoseok-ah, no estoy de humor para soportar tus regaños de todos los días.
Dicho esto, dejó al más jóven con las palabras en la boca y se marchó del lugar. Es cierto, YoonGi tenía un humor de los mil demonios y era mejor si evitaba a cualquiera que tocara el tema acerca de por qué. Lo cierto es que TaeHyung le empezó a pedir regalos, al principio eran cosas pequeñas, sólo para fastidiarlo con otra costumbre de pareja, pero al probar que, en efecto, YoonGi no se negaba a sus pedidos, pronto comenzó a abusar de la billetera del mayor, pidiéndole regalos cada vez más caros, sabiéndo que no se negaría a complacerlo, a cambio de que no hiciera un berrinche y lo dejara en abstinencia de besarlo.
Y entre esas cosas, estaba ir al cine todos los fines de semana. Como hoy que TaeHyung quería ver una película de la cual no tenía idea de qué trataba pero como era un estreno, y todos hablaban de ella, quería verla de todos modos. Eligió las golosinas del cine que ya se había malacostumbrado a pedir en exceso y se acercó a YoonGi.
-Tú pagas.
-¡¿Qué?! Tienes que estar bromeando, yo siempre pago, te toca.
-Sí, pero fuíste tú el que me pidió que fuéramos novios, así que lo correcto es que siempre pagues tú.
-Romperé contigo.
-¿Enserio quieres terminar conmigo, YoonGi-Hyung?
TaeHyung se acercó a su rostro y rozó tentativamente sus labios, YoonGi tratando de contener un suspiro, sin decir nada sacó el dinero para pagar por los dos y se adentró a la sala. TaeHyung se mordió el labio inferior tratando de contener una carcajada, el pálido era tan fácil de manejar, lo tenía comiendo de la palma de su mano y no podía sentirse más superado ante eso.
Al ingresar vió al mayor sentarse en la esquina superior más alejada de la puerta. Eso le molestó, desde ahí no tenía buena vista de la película.
-¡YoonGi-Hyung, este lugar es el peor que pudiste escoger! vamos, busquemos otro sitio.
Sin embargo, YoonGi no le hizo caso y en vez de ponerse de pie y seguirlo hacia donde indicaba, tiró de su brazo para que se sentara junto a él, dejando caer todas las golosinas del castaño. Éste último quiso quejarse por eso pero, cuando levantó la vista del suelo, YoonGi presionó sus labios contra los suyos y el castaño no dudó un segundo en corresponderle.
-Buena suerte intentando ver tu estúpida película porque me encargaré de que no puedas darle ni una mirada.
Y dicho esto volvió a besarlo pero esta vez con más profundidad, haciéndolo suspirar en el acto.
YoonGi era estúpido si pensaba que así iba a molestarlo, porque para TaeHyung él sólo le estaba dando lo que quería, porque el pálido estaba a sus pies y le daba todo lo que quería cuando lo quería. Sonrió al pensar en eso y se animó a morder ligeramente el labio inferior de YoonGi para tirar de éste, provocando un gruñido de molestía del mayor, él odiaba que el menor fuera atrevido con él en momentos así. Ante eso se disculpó y no volvió a repetir aquella acción, dejando que YoonGi tome el control del beso.
Está bien, él prefiere que sea así de todas formas, no es que YoonGi lo domine, no, es él el que se lo permite.
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Heteroflexible 《MYG+KTH》
FanfictionTaeHyung se enamora a primera vista de YoonGi, un recursante que estudia la misma carrera que él. Intentará de todo para conquistarlo. Y YoonGi tratará de resistirse a la insistencia de TaeHyung por conquistarlo, sin mucho éxito. 🎓Universitary AU!�...