Heteroflexible 《MYG+KTH》

19

YoonGi se encontraba en su habitación meditando sobre si llevar a su novio a comer a aquel restaurante para tener su estúpida cena romántica de pareja que tanto le exijía.

Era domingo, al día siguiente tendrían clases, no parecía conveniente aparte de que eso significaba gastar mucho dinero, el cual se le había acabado tras pagar el alquiler. Miró hacia una caja que dejaba sobre el armario de su habitación, en ella guardaba lo que le sobraba a fin de mes, no era nada especial, sólo lo guardaba porque planeaba irse de vacaciones al extranjero algún día, pero no era algo que lo entusiasmara demasiado.

Su celular sonó varias veces, seguro eran los mensajes del castaño que le seguía escribiendo pese a que YoonGi sólo se limitaba a marcar como leídos; pero eso TaeHyung lo tomaba como una contestación, por lo que seguía escribiendole. Era similar a cuando estaban juntos, él siempre hablaba mucho y le bastaba con un asentimiento del mayor para seguir hablando. YoonGi rió levemente al pensar en esa similitud, el menor era inusual.

Decidió no pensarlo tanto, sólo sería esta noche, y después podría jugar un rato con él de todas maneras.

Cuando llegaron al restaurante TaeHyung no pudo contener un "¡wow!" de asombro. No era un sitio muy lujoso, pero la decoración era muy bonita para él, habían flores y algunas pinturas adornando cada rincón y el dorado de las paredes hacían que el lugar brillara más a travéz de las inmensas ventanas en medio de la noche. YoonGi entró al lugar diciéndole que no era gran cosa, y TaeHyung lo siguió riendo para sus adentros ¿enserio a YoonGi no le molestaba pagarle una cena ahí sólo por unos cuantos besos y un trabajo manual? No pudo evitar soltar una pequeña risa, que estúpido era, se conformaba con tan poco, si supiera que habían cosas mejores.

Al sentarse en su mesa, el mesero les dejó el menú para que eligieran lo que querían ordenar, hicieron su pedido y, junto con eso, les hicieron llegar una botella de vino. TaeHyung no le gustaba beber pero de todas formas le dió un par de sorbos a su copa y descubrió que aquel vino sabía bastante bien, YoonGi le explicó que era de sus marcas favoritas y que por eso lo pidió.

-Me gustaría poder darme estos lujos todo el tiempo -Dijo mientras le daba otro sorbo a su copa mirando a su alrededor.

-¿Y por qué no te consigues un trabajo? Ganarás tu propio dinero y podrás comprarte todo lo que quieras.

TaeHyung ignoró su comentario y bebió lo que quedaba de aquel tinto líquido en su copa. Se sentía muy bien en aquel lugar, era hermoso, pero era el hecho de que estuviera con YoonGi lo que le encantaba, nunca antes pudo hacer cosas como estas con sus parejas anteriores. TaeHyung sentía que podría enamorarse de él si seguía reparando en aquello. 

De pronto sintió mucho calor acumularse en su nuca y sin saber por qué, se acercó a YoonGi por encima de la mesa y tomó su barbilla para darle un profundo beso.

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Habían llegado al departamento de YoonGi, pasaron un largo rato dandose caricias y besos. TaeHyung sentía mucho calor, la bebida había hecho que se embriagara un poco, inhibiendo la tímidez y dandole la confianza que necesitaba para atreverse a tocar al chico que le gustaba. Estaba perdido besandolo, y que apenas llegaran y el mayor decidiera cambiarse con esa ropa holgada que usualmente usaba para estar en su departamento no ayudaba a su autocontrol, podía ver sus brazos y piernas, que por lo general siempre estaban ocultos bajo mucha ropa, y para TaeHyung ver más de esa pálida piel sólo lo hacía desear poseer a YoonGi de todas las formas posibles.

A YoonGi no le gustaba ceder el control, pero TaeHyung besaba muy bien, y sólo fué cuestión de unos segundos para que dejara de batallar por dominar la situación y entregarse a él por completo. TaeHyung lo hizo retroceder hasta su cama, mientras lo besaba y daba caricias por sus brazos descubiertos, lo recostó suavemente, colocandose sobre él, mientras seguía besandolo y buscando sentir más de esa piel que lo volvía loco.

Se sentía muy excitante en un inicio, pero después de unos minutos a YoonGi empezó a darle miedo, TaeHyung lo estaba besando de forma muy insistente y se había atrevido a pasar sus manos por debajo de su remera, dandole un escalofrío de terror, nunca antes había llegado a eso con él. Intentó levantarse pero el peso del castaño se lo impedía, posó ambas manos sobre su pecho para apartarlo pero éste tomó sus muñecas y las sostuvo a ambos lados de su cabeza para que no estorbara.

-Oye... detente... un momento... -Pidió el mayor entre beso y beso, pero no le hizo caso.

De pronto TaeHyung pasó de sus labios a succionar su cuello, haciendo que YoonGi sintiera escalofríos nuevamente, lanzó un quejido de sorpresa, TaeHyung nunca lo trataba así y le incomodaba, pero no fué hasta que el chico sobre él rozó tentativamente su entrepierna contra la de él que sintió terror, el miedo a lo desconocido se apoderó de él, y se obligó a detenerlo como sea.

-¡Detente! ¡Oye! ¡Es enserio, para! ¡Te digo que pares!