Sirius recordaba vagamente, la conversación que había tenido con James y Remus en el tren, cuando el chico pálido les explicaba que temía no poder asistir a Hogwarts por su frágil salud. Sirius lo sabia. Pero aun así, se sorprendió cuando a la mañana de su tercer día en Hogwarts Remus no se despertó el primero y les hizo levantarse para no llegar tarde, cuando al desayunar ni siquiera toco el chocolate, cuando casi se duerme en una clase, cuando no les riño a el y a James por hacer que Peter se acercase a el nuevo árbol boxeador.
Entonces, cuando llego la hora de la comida y Remus solo jugaba con la suya Sirius decidió que ya era suficiente.
- Deberías comer un poco. - Le aconsejo el de ojos plata.
- Lo sé mama. - Contesto con sarcasmo. - Pero no tengo hambre.
Dejo el tenedor al lado de el pato y lo aparto.
- Deberías ir a ver a madame Pomfrey. - Dijo Peter, que había ido a con Pomfrey después de lo del sauce.
- No, chicos enserio estoy bien. - Aseguro Remus con un intento de sonrisa.
- No luces como alguien que se encuentra bien. Como tus ojeras sigan creciendo, tendrás que cuidarte de no tropezarte con ellas. - Aseguro James.
- Me duele admitir que esta vez estoy de acuerdo con Potter, Rem. - Dijo Lily sentada frente al castaño.
"¿Rem? ¿Desde cuando es Rem para ella? ¿Por que es Rem?"
- ¿Quién te ha dado vela en este entierro pelirroja? - Pregunta Sirius, pero Lily le ignoró.
- Ves a ver a Pomfrey.
- ¡Que no necesito ir a ver a Pomfrey! Dejadme en paz. - Salta Remus. Es la primera vez que alguno de ellos ve al castaño perder la calma y eso confirma a Sirius que enserio no se encuentra bien y hace que deje sus pensamientos de lado para centrarse de nuevo en su amigo.
- Hey Rems, tranquilo. - Dice Sirius poniendo su mano sobre el brazo del castaño. - No tienes porque ir, solo estamos preocupados.
- Si, lo siento Lily.
- No pasa nada. - Dijo la pelirroja dulcemente.
- Oye Rems, porque no te vas a la cama, tenemos hora libre, te despertare para ir a la siguiente clase ¿vale? - Remus solo asintió. - Vamos, te acompañare a la habitación. - Remus se levanto y Sirius se acerco a James y le dijo casi susurro: - Coge todos los chocolates que puedas.
- Siento haberos hablado así. - Dijo en el camino a la torre.
- No pasa nada, no te encuentras bien.
- Eso no importa.
- Si que importa, cuando no te encuentras bien, no piensas bien las cosas. Aun así, Rem, nosotros nos hablamos mucho peor sin estar enfermos. - Sirius le sonrió y ambos siguieron caminando en silencio.
Cuando llegaron a la habitación Remus se tumbo en su cama bostezando y cerro los ojos.
- Sirius.
- ¿Mmm?
- Gracias. - susurro Remus mas dormido que despierto.
- Descansa Rems. - Dijo Sirius, pero no se fue de la habitación hasta asegurarse de que Remus estaba dormido. Después fue a buscar a James y Peter.
- ¿Cómo esta? -Pregunto el de gafas en cuanto le vio.
- Dormido. ¿Tienes los chocolates?
- Si, están en mi bolsa. - Sirius cogió la bolsa de James y metió todos los chocolates en su propi bolsa.
- ¡Eh! ¡Déjanos alguno! - Dijo Peter.
- No son para mi, son para Remus. No a comido nada, cuando despierte seguro tiene hambre.
- Pensé que ibas a despertarle para la siguiente clase. - Dijo Peter.
- Le mintió Peter. - Aclaro James. - ¿Acaso no viste sus ojeras?
- Necesita dormir, así que le dejaremos dormir. - Dijo Sirius antes de irse de nuevo. - Ahora vuelvo.
Remus despertó bien entrada la tarde. La noche siguiente seria su primera luna llena en Hogwarts, el miedo y los nervios le estaban matando. ¿Y si lastimaba algún alumno? ¿Y si el plan de Dumbledore no funcionaba y todo terminaba en caos?
Remus se dio cuenta de que seguramente se habría perdido como mínimo una hora de clase. El maldito Sirius no había cumplido su palabra de despertarle, seguramente nunca tuvo intención de cumplirla. Pero Remus había estado demasiado cansado para pensar en eso.
Se sentó en su cama y en su pequeña mesita de noche vio un montón de barras de chocolate, perfectamente apiladas en una pirámide con un trozo de pergamino en la parte mas alta.
No te enfades conmigo.
Tomare todos los apuntes de todas las clases con la máxima precisión (seguro que Evans me ayuda si le digo que son para ti).
He pensado que podrías tener hambre cuando despertaras (Como no has comido).
No le digas a Peter y a James que me comí una de tus barritas.
Come, te sentirás mejor. ;p
Pd: Espero que estés mejor cuando leas esto. Y por favor no te enfades.
Pd 2: James y Peter no sabían que no iba a despertarte y les he amenazado si te despertaban ellos así que no es su culpa.
Y Remus sencillamente no puedo enojarse, cogió dos o tres barras de chocolate y guardo el resto. Se cogió todas sus cosas y se fue a su siguiente clase.
Remus jamás olvidara el día que Sirius le hizo una pirámide de chocolates.
Sirius jamás olvidara la primera vez que tuvo que engañar a Remus para que durmiera.
Remus será incapaz de olvidar que Sirius se sentó con Lily (a quien por aquel entonces no soportaba) solo para coger sus apuntes correctamente.
Sirius será incapaz de olvidar la sonrisa de Remus cuando le entrego los apuntes y le giño un ojo.
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Wolfstar
FanfictionLa historia de como Sirius se va enamorando lentamente de Remus. Capítulos cortos. Los personajes NO me pertenecen.