Wolfstar

Los Black

- Lily. - Dijo con su voz calmada alcanzando a la joven Gryffindor y empezando a caminar a su lado. - Necesito tu ayuda.

La chica pelirroja le mira alzando las cejas. 

- Necesito consejo con algo. - Le dice el chico a Evans. - Pero necesito que no se lo digas a nadie. 

- ¿Qué pasa Remus? - Pregunta la chica de ojos esmeralda empezando a cansarse. 

- ¿Sabes Regulus? 

- ¿El hermano de Sirius? - Remus asiente jugando con las mangas de su capa. - ¿Qué pasa con el?

Remus le cuenta a Lily absolutamente todo sobre las notas que Regulus le ha ido dando desde que empezó el curso, cinco contando esta. 

- ¿Qué crees que debo hacer? - Pregunta al final. El chico la mira mientras ella reflexiona con los labios apretados. 

- ¿Qué tan malo puede ser que se salte una estúpida fiesta? - Pregunta Lily y Remus se siente incómodo. 

- Muy malo. - Contesta y no especifica a pesar de la cara de incredulidad de su amiga. El tampoco sabría que decir, pero conociendo como conoce a Sirius y sabiendo bastante sobre familias pura sangre como la suya puede imaginárselo, aún que Irius jamás haya hablado de ello. 

"Soy la cucaracha mas molesta que ha tenido que soportar jamás." Le había dicho Sirius una vez sobre su relación con su madre. 

- Tal vez, - La voz suve y clara de Lily consigue sacarle de sus pensamientos. - deberías hablar de esto con Sirius. 

Remus se muerde el labio  sabe que es un buen consejo, como la mayoría de los que da Lily, pero no sabe si ese será el movimiento más inteligente. Se despide de Lily en el pasillo y mientras recorre el castillo en busca del chico de ojos grises decide seguir el Consejo de Lily.

Encuentra a Sirius en la torre de astronomía, sentado en el suelo como si se hubiera dejado caer y le hubiera dado pereza moverse. Remus sabe que es una postura estudiada y practicada para que parezca desastrosa, descordinada y sobretodo una falta de respeto a la etiqueta.

Se sienta a su lado y Sirius sonríe sólo con la esquina derecha de sus labios. Es una sonrisa cínica y resignada.

- Regulus te ha dejado otra notita hoy ¿verdad? - En realidad no lo está preguntando, lo está confirmando. Remus se sorprende visiblemente y la sonrisa de Sirius aumenta mientras niega con la cabeza. - Ese pequeño cabron. Dile que no se preocupe Rems iré a la puñetera fiesta.

- Eres demasiado inteligente para que te engañe el idiota de mi hermano Remus. No te fíes de el ni de esas estúpidas notas, ningún consejo que de alguien de mi familia será para ayudarme, eso puedo jurartelo.

A partir de ese momento se sumergen en el más absoluto silencio mientras Remus le da vueltas a la idea de que su amigo no pueda confiar ni siquiera en su hermano.