Los Merodeadores: Segundo Año

Flourish y Blotts

Flourish y Blotts   

La lista de libros de Segundo Año fue entregada a mitad del mes de julio. Lily y sus padres fueron al Callejón Diagon a comprar los libros en Flourish y Blotts. Petunia se había enfurecido, argumentando que no quería ir de comprar en una tienda de bichos raros así que fue dejada sola en casa, con lo cual Lily estaba a gusto. Tuney había sido excepcionalmente desagradable con Lily y empeoraba a medida que los días iban pasando. Llamaba a Lily fenómeno o bicho raro y se rehusaba a estar mucho tiempo cerca de ella, siempre pedaleando su bicicleta tan rápido como podía para alejarse cuando Lily trataba de dar un paseo con ella, y diciéndoles a los otros niños del vecindario que no se acercaran a Lily. Severus aún no estaba en su casa, así que ser excluida por los niños muggles había despertado su inquietud y le molestaba más de lo que debía. Cada día se acercaba al claro donde solía encontrarse con Severus, pero él nunca estaba ahí, tampoco había señales de que hubiese estado antes, y Lily tenía el corazón roto al ser olvidada por su mejor amigo.

Sin embargo, el Callejón Diagon hizo desaparecer todos esos horribles sentimientos. Compraron helados la heladería de Florean Fortescue y fueron al Emporio de lechuzas para comprar comida para Bubo cuando fuese a dejar las cartas de Sirius. Lily renovó su set de pociones y compró nuevos pergaminos y algunas plumas. Se deleitó de saber que tenían una tinta que cambiaba de un color a otro mientras escribía y había unas plumas hermosas, directamente extraídas de un hermoso avestruz africano.

Estaban en Flourish y Blotts, recorriendo la tienda, cuando Lily escuchó que alguien llamaba su nombre. Se dio la vuelta para encontrar a James Potter y un hombre que se parecía considerablemente al niño –su padre, supuso Lily- caminado en su dirección desde el otro lado de la tienda. De entre todas las personas que conocía de la escuela, ¿por qué tenía que haber sido James?, se preguntó.

-Hey, Evans –dijo él- ¿Comprando tus libros?

Lily asentó.

-Sí. Veo que ya tienes los tuyos.

James asintió.

-Y esto también –sostuvo en el aire un libro titulado Quidditch a Través de los Tiempos con una sonrisa en su rostro- Tiene una sección especial de unas jugadas geniales que usaré cuando entre al equipo.

-En caso de que entres –señaló Lily.

-Lo haré –respondió James.

Charlus posó sus manos sobre los hombros de James.

-No deja de hablar sobre el equipo de Quidditch de Gryffindor desde que tiene conciencia –alzó su vista a los Evans- Ustedes deben ser los padres de Lily –dijo, extendiendo una mano- Soy Charlus Potter.

El señor Evans estrechó la mano de Charlus.

-John Evans –dijo- y ella es mi esposa, Rosemay –sonrió, bastante emocionado de conocer algún mago.

-Son muggles, ¿cierto? –preguntó Charlos. Lily parpadeó un par de veces en sorpresa. De repente, fue bastante evidente de donde había heredado James su falta de tacto. De tal palo, tal astilla.

-Supongo que sí –respondió el señor Evans.

-Genial –dijo Charlus con una sonrisa- Soy un gran fan de ustedes.

-Papá, silencio –susurró James. Rodó los ojos hacia Lily- Como sea, ¿intentarás entrar al equipo? –preguntó mientras Charlus y los señores Evans comenzaban a hablar por encima de sus cabezas. Lily se encogió de hombros- Sirius dijo que le dejarás usar tu escoba, eso fue un buen gesto de tu parte –añadió él.