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Se sentía feliz. Esa expresión de orgullo y alegría en el rostro de su madre jamás la olvidaría. Anne lo había visto bailar, después de tantos años pudo presenciar tal acto y, no sólo una vez, Harry se dio la libertad de bailar en tres ocasiones con tres diferentes chicas las cuales, suspiraban hasta por una mirada de esos grandes ojos verdes, aún sabiendo la orientación del muchacho les era imposible no ilusionarse un ápice. 

El rizado al fin había hecho todas las tradiciones de su familia en aquella reunión, aunque, no cantaba total victoria en uno que otro momento tuvo pánico al imaginarse en una bochornosa situación, como darle tremendo pisotón a alguna de las chicas que, bueno, siendo él sin pensarlo se lo hubieran perdonado, con todo y mueca de dolor le hubieran dicho "tranquilo, no fue nada". Aquellos vagos pensamientos permanecían en su mente y se iban con tan sólo sacudir la cabeza, concentrándose en que el peligro a un ridículo, ya había pasado, de hecho, desde hacía un rato.

-Alguien parece feliz.- Comentó un sonriente Niall, observando el brillante rostro de su amigo.- Pero no plenamente, algo te falta: ¿o debería decir alguien?.- Se le escapó una sonrisa al idear dicha pregunta.

-Dejemoslo en que mi pareja ideal no está aquí.- Apretó los labios para después encoger los hombros.

-Anímate Hazz, ni que ya no lo fueras a ver. Pasas más tiempo con él que con Zayn o conmigo.- Rió un poco.- Considera llamarlo o mensajearlo más tarde. 

-Tal vez lo haga, la verdadera cuestión no es esa; la cosa es si se va a dignar a responderme o no. Con Louis nunca se sabe, es... impredecible.- Contestó, estirando el brazo para alcanzar una copa de champagne recién servido y que, los meseros contratados, se encargaban de distribuir.

-Eso te pone peor: te da alas y después actúa como si no le importaras haciéndose el difícil, sabe cómo controlarte para tenerte en la palma de su mano. Por Dios, Harry, con lo que requiere tu carrera ya debiste haber reflexionado eso hace tiempo.

Styles negó, dándole un trago a la bebida antes de responder.

-Por supuesto que sé lo que hace y diría que no soy un tonto por saberlo, pero lo soy por saberlo y seguir detrás de él; le sigo el juego como todo un adolescente.

-Harry, tienes veintiuno no treinta, no eres un señor.- Se rió levemente.

-Lo sé. A lo que me refiero es que prácticamente soy un adulto, el sigue siendo un niño y...

-Te tiene loco. Te gusta. Te estás enamorando.- Alzó las cejas seguido de un suspiro casi inaudible.

-¿Sabes qué? Voy a verlo.

-¿Pero qué? Harry, ¿Qué hay de tu mamá?

-De eso me encargo ahorita, le inventaré algo. Te veo más tarde, hermano.- Se despidió, entregándole la copa a Horan, este, se quedó con las palabras en la punta de la lengua: ¿seguro que Louis era el adolescente? Por que, el que estaba saliendo de la nada como loco enamorado era él. Bien, hacía tiempo que no lo veía así de entusiasmado no era nadie para quitarle esa dicha. Niall también solía ver lo bueno en las personas, podría asegurar ante cualquiera que, Campderich, era capaz de cuidar el corazón del ojiverde.

-Señores perasi, un gusto verlos. Espero estén disfrutando de esta noche.- Saludó el rizado a la pareja que se encontraba con su madre.- ¿Les molestaría si les robo a mi mamá por unos segundos?.- Pidió con sonrisa tenue. Recibiendo un ademán cortés como respuesta.

-¿Qué pasa, cariño?.- Cuestionó Anne en cuanto se vio frente a su hijo.

-Necesito salir un instante, ¿recuerdas que estuve en casa de Zayn esta tarde? Olvidé mi celular, y él olvidó traermelo. Estoy esperando un mensaje importante de un profesor, lo necesito.

castle walls ♕ l.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora