Capítulo 33

506 66 92
                                    

––Al fin lo admitió.

––¿Nunca lo había hecho?

––No, aunque era bastante obvio. Conozco a Rin desde que tengo memoria y nunca le vi así de entusiasmado con algo. Hasta que conoció a Haruka. –– se me escapó una mueca de disgusto y me sentí un poco culpable de haberle comentado algo que le hizo daño. ––Agh... Rin imbécil. –– gruñó.

––¿Y si tratas de hacer que se entretenga? Llévalo al club. Que baile hasta quedar cansado. Seguro que le hace bien. ––le recomendé intentando ayudar.

––Seguiré tu consejo. Tampoco me vendrá mal distraerme un par de noches.

––¿Un día duro?

Sí. Te echaba de menos.

¡Ah, idiota! Puede decir eso en este instante tan inoportuno y, además, confesarlo tan calmado como si fuese natural. Consigue acelerar mi pulso. Nervioso me moví de mi posición y de casualidad observé mi imagen  reflejada frente a la oscura pantalla de la televisión. Parecía un chiquillo con los pies sobre el sofá y sonrojado hasta más no poder.

––E-estuvimos juntos p-por la mañana. ––reí inquieto mientras tiraba de mi flequillo y ocultaba mi bochorno de mí mismo.

––Sí. Pero eso no implica que desee verte de nuevo. –– ¿qué quería que respondiese? Estoy temblando y mi cerebro se estanca cuando me dice estas cosas. Quiero decir lo que siento pero quizá sus palabras tenían un sentido diferente a mis sentimientos. El largo silencio entre ambos comenzó a hacerse incómodo pero él se encargó de destruirlo. ––Bien, ¿y qué más querías contarme?

—Oh, sí. –– agradecí su cambio de tema –– ¡Al fin, estoy a cargo de algo, Sou! Es estupendo. Creo que será lo más grandioso que hayas visto en mucho tiempo.

—¿De veras? –– escuché su entusiasmo a través del teléfono –– Enhorabuena, sé que lo harás genial. ¿De qué se trata?

—Si quieres podríamos comer juntos mañana y así explicarte.

Tengo una reunión importante con traducción y quizá se alargue. –– su voz sonó decepcionada. Mordí mi labio inferior por la misma razón.

—Ya veo...

Estoy deseando verte de nuevo, Mako. –– hará que mi corazón explote.

—Y-ya me lo has dicho. — musité.

No quiero que lo olvides. –– ¿Cómo hacerlo, idiota? Lo peor de todo es que mi cerebro lo malinterpretará.

—¿ Y... después del trabajo? ¿Podemos quedar a tomar algo?

Llevaré a Rin al club, ha sido tu idea. ––Mierda. Es cierto, pero deseo tanto contarle en persona, estar junto a él de nuevo...—Tan solo di que también me echas de menos, Makoto. –– rió y el corazón me dio un vuelco tremendo. –– Tengo una semana un poco complicada pero podemos comer juntos el viernes. Oh y no faltes al gimnasio. Te ayudará alguien, tan solo pregunta por mí.

Humm eso eran muchos días sin verle. Sin embargo, no tenía de otra pues él estaba ocupado. Sousuke pareció notar mi descontento con la situación y prometió ponerse en contacto conmigo cada día. Me despedí de él cuando escuché que tocaban a mi puerta. Haru acababa de llegar y prometí acompañarlo a comprar los billetes de tren para volver a Iwatobi.

Una vez llegamos a la estación, nos dirigimos a una de las ventanillas de compras.

–– ¿Sábado en la noche o domingo a las 7 de la mañana? –– me propuso Haru.

Anastasia, Éstas Son Las Verdaderas Sombras [Free!] [SouMako] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora