Little White Lies (Larry Stylinson) [TERMINADA]

Capítulo 28 (Parte 2/3): "Nuestra primera vez"

-L-Louis -Tartamudea.

-Harry -Murmuro su nombre, mientras me como su cuerpo con la mirada.

-¿Qué haces aquí?

-Oh, yo... -Aparto mi vista de él. Despertándose del trance-. Y-yo vine a verte, había tratado de comunicarme contigo pero no respondías

-Lo que pasa es...

-Ya me dijo Anne... Pero se me hace una tontería, tus padre y hermana tienen celulares, ¿Qué no?, y aquí tienes teléfono de casa, pudiste comunircate

De un momento a otro me molesto con él. Por que si se me hace una tontería.

-Louis, llegué hace poco y me quedé dormido

-No es excusa -Me cruzo de brazos.

-Por favor, Lou

-No

-Iba a ir a verte, por eso me bañé -Dice y se ríe-. Vaya situación, mira como me encontraste

-¿Enserio ibas a ir a mi casa? -Lo miro sonriendo.

-Claro, te extrañé mucho

Se acerca y me rodea por el cuello. Llevo mis manos a su cintura y con mis palgares la acaricio, es tan suave y tersa. Me gusta esa sensación de tocar su piel.

Lo miro a los ojos, sus ojos verdes brillan más que otros días.
Siento sus dedos enredarse en mi cabello y se acerca más, hasta que sus labios toman los míos.

Cierro mis ojos y correspondo enseguida, acoplando mis labios con los suyos.
Siento una gota de agua caer sobre mi nariz. Una gota de su cabello que sigue húmedo.

Lo sujeto más cerca y muerdo su labio suavemente, el suspira sobre mis labios y recuerdo las inmensas ganas que tengo de hacerlo con él.

Joder, enserio lo deseo.

Me separo del beso y llevo mis besos a su oreja, mordiendo el lóbulo de esta. Él baja sus manos a mi espalda y la acaricia sobre la camiseta.

Mis labios hacen un recorrido hasta llegar a su cuello, besando, mordiendo y lamiendo esa piel tan suave y blanca que me encanta.
Aspiro el dulce aroma a vainilla que sobresale de su piel.

Echa la cabeza hacia atrás y suelta un jadeo.
Mi mano baja hasta el borde de la toalla y estoy a punto de sacarla.... Cuando él se aleja.

Abro mis ojos y lo miro, confundido.

Tiene sus labios rojos y unas marcas rojas en su cuello.

-Louis...

-¿Qué ha pasado? -Pregunto muy confundido con la situación-. ¿He hecho algo que no querías?

-No, es sólo que no deberías dejarme marcas, sabes que mi padre aún no esta de acuerdo con esto

-¿Y? Es tú vida, tú puedes hacer lo que desees con ella y hacer lo que te plazca

-Lo sé, pero cuando él vea esas marcas...

-Sí no quieres hacerlo conmigo sólo dilo y no pongas excusas estúpidas -Si. Me enojé.

-No son excusas, Louis. ¿Tantas ganas tienes de satisfacerte que ni siquiera piensas en mi? -Me mira mal-. No me has preguntado sí yo lo deseo

Entorno los ojos.

-¿Y no lo haces? ¿No deseas esto?

-Si, pero no así

-¿ASÍ CÓMO? -Le grito-. Sólo es cuestión de quitarnos la ropa y ya, no seas dramático. No es como que sea algo especial.