Madre, ¿quién es esta mujer con la que te expresas tan serenamente? —pregunté a la extrañamente alegre Madre. Se encontraba demasiado alegre parar ser un evento de tal magnitud como el que las abejas y abejorros vinieran en mi búsqueda.
Madre, sin dejar de sonreír y con un sentimiento extraño emergiendo de ella, bajó desde el punto donde estábamos en la cueva hasta la planta inferior y me llamó. Al bajar y estar todos a pocos metros de distancia, Madre solo acarició y mi cabello y soltó un comentario.
—Nicolet, esta mujer de apariencia casual similar a un humano es llamada Lirio, Lirio Velteste, ella es una de mis más antiguas amigas, podría decirse que la considero como tu madrina. Lirio fue encomendada por mí para cumplir el rol de representante en gestión de las relaciones exteriores entre todo el bosque de Verona y la región de abejorros dentro del mismo, pero luego de que dicha región concluyera uniéndose completamente al bosque Verona, ella terminó...
Y sin dejarla terminar de responder, la mujer llamada Lirio chasqueó su lengua bastante fuerte, a modo de interrupción para evitar que Madre se extendiera con la historia.
Aclarando su garganta y haciendo rizos en su cabello de forma más rápida que cuando llegó, ella solo comenzó a hablar.
—Oye, Morgana, deja dar la introducción de esta madrina a sí misma. Joven Nicolet, como dijo tu madre, me llamo Lirio, me fue encomendado el cuidar la espalda tanto de mi gente como de la tuya hace bastante tiempo, pero cuando todos entramos en paz cogí unas vacaciones indefinidas hasta que mi tonta hermana se interesó por ti hace un mes. Mi relación con Morgana se remonta a la época en que ella era una cría, al igual que yo, por lo que contar todos los sucesos que nos hicieron tan familiares es un verdadero dolor. Tómalo como que soy tu única fuente de información actualizada sobre el territorio abejorro, así como que también soy tu nueva ayudante, ¿o no, Morgana? —terminó diciendo Lirio mientras, con su mirada penetrante, dirigía la vista a Madre. Las comisuras de su boca nunca se movieron, pero sus ojos reflejaron una sonrisa, era una sonrisa espantosa y vacía que hacía helar mi sangre.
No lo entiendo, ¿cómo puede esta mujer hacerme sentir de esta forma, si en ninguna de mis vidas alguien logró hacer algo similar a eso? Esto es malo, su actitud no encaja con nada de lo que he experimentado en mi vida.
He conocido a mujeres malas, a mujeres corrompidas y a diferentes tipos de mujeres demoníacas, pero ninguna, en todo el compendio de mis vidas, había realizado tan vil e irascible sonrisa.
Y lo peor de todo, es que Madre se sentía cada vez más a gusto al ver a Lirio.
Pero lo que más me impacto...
— ¿Qué se supone que significa eso? ¿Nueva ayudante? —pregunté a ambas en señal de ignorancia.
¿Por qué sería tal persona como una vieja amiga de mi madre ahora mi ayudante? Entendería que compañera en la administración de Verona o algo similar, si Madre me lo pidiera no objetaría... bueno, eso podría no ser verdad, la actitud de Lirio en verdad es muy incierta.
Viendo que Lirio parecía más irritada que cuando llegó, la que respondió a mi pregunta fue una serena Madre.
—Nicolet, como Lirio ha dicho, ella será tu nueva ayudante de ahora en adelante. Sé que te las has apañado con tus dos juguetes, la ogra y la oveja silvestre, todo este tiempo junto a la ayuda de tu fuerza e increíble inteligencia, pero te hace falta la experiencia de vivir en este bosque, cosa que no ganaras de la noche a la mañana... a menos que alguien la cual la posea esté contigo instruyéndote. Lirio ha realizado las labores de sobrellevar las relaciones de ambos bandos durante bastante, digo, un buen tiempo —dijo Madre, entrecortando la palabra bastante ante la gran presión que se originó en Lirio—. El hecho de que Lirio te apoye es fundamental para tu mandato temprano en Verona, de forma que cualquier cosa que no puedas afrontar sobre los intereses o costumbres de una raza la cual está aislada de las demás en este bosque, Lirio seguramente ya tenga unas cinco opciones para ti como las tenía para mí cuando subí al mandato de Verona.
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Quelícero - Reencarnado en otro mundo.
Fantasy«Después de morir y reencarnar cientos de veces, es imposible no darme cuenta que ya no estoy en la tierra. ¿Acaso son patas las que salen de mi espalda? ¿Por qué nada se asemeja a lo que conozco? En fin, solo es una nueva vida, veamos qué puedo hac...