Sobrevivir

5

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Pasaron dos días desde esa noche que nos besamos, no sé porque seguía ahí,  estaba rodeada de hoteles lujosos  pero yo seguía en casa de Jasper,  corrección, casa de Liam, eso duele menos.

--¿Como puedes beber a esta hora Jaspah?—solo quería iniciar una conversación pero él me ignoró,  su comportamiento me irrita,  también es mi culpa por intentar hablarle,  me concentré en mi móvil pero  siempre volvía a él.

 -- ¿Qué hay de tu novia Jasper?— me volvió a ignorar, ni siquiera fue capaz de mirarme, no podía seguir así,  todas las veces que intenté acercarme, el me rechazó,  yo solo quiero dejar las cosas clara y poder vivir en paz.

-- Si tanto te molesta mi presencia me puedo ir a otro lado, yo solo estoy aquí porque necesito a Liam— en realidad esa era la verdadera razón y siempre lo será.

 -- Puedes quedarte todo el tiempo que quieras Princesa—dice abandonando la habitación,  por más que aguanté las ganas fue imposible,  comencé a llorar como una niña, no sé por qué él tiene tanto efecto en mí.

-- Liam acaba de avisar que no vendrá a dor...--  intenté ocultar mis lágrimas, no lo logré,  él se quedó en silencio.

 -- Liam dijo...--

-- Te escuché –- susurré, se quedó en silencio observándome, me ofreció un vaso de whisky y yo acepté.

 -- Felicidades por tu Compromiso—me sonrió, sé que no lo dijo de corazón.

-- Aun no he dicho que si—susurré.

 -- Salud por eso— tenía una enorme sonrisa que me hizo sonreír también.

Es tan difícil poder comunicarnos, en realidad con Jasper siempre todo es difícil.

 -- Perdón por rendirme--

-- No hagas esto—supliqué.

 -- Merecías algo mejor,  tu hermano siempre me lo dijo—sus palabras poco a poco destrozaban mi corazón.

-- Robert no sabe nada Jaspah--- cada vez nos acercábamos más y más,  podía sentir su respiración acelerada cerca de mis labios, su mirada me estaba matando, cada vez me hacía más pequeña.

 -- Te quiero—dejé de respirar.

-- Yo...-- no pude responder.

Su boca recorrió cada parte de mi cuerpo, mi espalda no podía quedarse quieta en el sofá, cada roce me elevaba hasta el infinito, intentaba detenerme pero era imposible,  sus ojos brillaban cada vez que me miraba.

-- ¿Estas segura?—preguntó besando mi cuello desesperado.

 -- ¡Follame! —supliqué, rápidamente se hundió en mí,  eso me provocó un grito ahogado de dolor, Jasper Frost siempre me provocaba dolor,  en el sexo y en el corazón, le regalé mi cuerpo una vez más, en realidad siempre permito que haga lo que quiera conmigo, porque lo que siento es más fuerte que cualquier otra cosa en el mundo, en este momento no existe nadie más que él y yo.

Hace tiempo no dormía tan bien, sus brazos en mi cuerpo, sentir su respiración, todo.

-- ¡Buenos Días! –- susurró besando mis labios, sabía perfectamente que significaba ese beso, no quería más, necesitaba escapar pero mi cuerpo me traicionó, respondí a su beso e hicimos el amor otra vez.

-- Jamás pensé que vería esto—-dice Liam tapando sus ojos, Jasper rápidamente ocultó mi cuerpo con un cojín, no podía creer que  nos había visto, no quería mirar, no podía hacerlo.

-- Ya se fue—  Jasper intentó abrazarme, pero rápidamente de solté de sus manos y comencé a vestirme. 

 Ese día no hablamos, me oculté en mi habitación la mayor parte del tiempo, no podía ver a Liam menos a Jasper, tenía mucha vergüenza.

-- Lenny lo siento—susurró Liam

 -- Créeme que yo lo siento más— cubrí mi rostro con la almohada. 

-- No  te vi muy arrepentida hace un rato—me miró fijamente.

 -- Liam—di un golpe en su brazo, comenzó a reír.

-- Me quedé donde Greta para que pudieras hablar con él, pero jamás pensé que pasaría esto— toda la culpa que sentía desapareció.

 -- ¿Entonces esto es tu culpa?— No era toda su culpa, pero si un poco.

-- No puedes culparme—dice divertido.

 -- Me voy a casar Liam, no entiendo que mierda hice—la culpa regresó a mi otra vez.

-- Len desde que entraste a este apartamento no han parado de atacarse, ustedes desean esto--- odiaba cuando Liam tenía razón.

 -- Tengo que irme a un hotel Liam...--

-- ¿Puedo hablar contigo?—interrumpió Jasper,  Liam no me dio la oportunidad de decir no y desapareció.

-- Jaspah yo...-- creo que no se escuchaba mi voz.

 -- Lo que sucedió ayer fue un error Len, tú te vas a casar y no te molestaré más--- apenas podía respirar.

--Está bien--- susurré, eso me dejó realmente sorprendida.

 --Esta bien-- repitió. 

Había sido un error, un grave error.