Sobrevivir

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--Jasper despierta--- sentí unas manos tratando de moverme.

 -- Jasper--volvió a decir, levanté de mi cabeza y era ella. 

-- Sara Alice-- dije, la verdad no estaba muy emocionado, no por ella, si no que ya sentía que nada tenía sentido para mi. 

 -- Hice  estos dibujos para la Princesa-- no era uno o dos, eran miles. 

-- Ella se ve muy dormida-- dice, yo aún estaba buscando las palabras correctas para agradecer sus dibujos. 

 -- Ella lo está-- respondí, tratando de no demostrar mi dolor, ella la quedó mirando con tristeza, puedo reconocer su cara cuando no se siente alegre. 

-- Vamos a dejarlos aquí para cuando ella despierte sea lo primero que vea-- su cara cambió en un instante, su rostro podría iluminar una ciudad entera cuando está feliz. 

 -- Me gusta esa idea-- chilló. 

-- Ayer conocí a los bebés y son muy bonitos Jasper--

 -- Realmente lo son-- mentí, porque ni siquiera sabía como eran, en todo este tiempo que llevo aquí  nunca fui a conocerlos,  no quería hacerlo, tenía miedo de abandonar a Len un sólo instante y lamentarlo para siempre. 

-- Tienen que tener una niña para que pueda jugar con mis muñecas-- Sara Alice cree que los bebés se consiguen en una tienda.

 -- Entiendo Sara Alice pero no es posible, al menos por ahora--se decepcionó pero tampoco quería mentirle. 

-- Yo puedo siempre cuidar a los niños— susurró mientras caminaba por la habitación dejando sus dibujos. 

 -- Por eso  te quiero mucho-- ella me miró fijamente.

-- ¿Porque has llorado tanto?--preguntó.

 --Porque es bueno llorar aveces --siempre me sorprende con sus preguntas. 

-- Igual como lo hiciste en Navidad—no pudo mirarme al decir eso, su mirada estaba pegada en la ventana de la habitación. 

--¿Como sabes eso?-- sentí algo de vergüenza.

-- Yo te vi--seguía sin mirarme. 

 -- Cuando alguien tiene pena es bueno llorar--- mis excusas eran realmente una mierda, pero no podía decir lo que hizo mi Padre o  que las posibilidades de que Len muera eran más altas a las que ella sobreviva. 

-- ¿Tienes pena?-- acarició mi rostro, mis ojos se estaban nublando. 

 -- Un poco--intenté aguantar mis lágrimas.

--¿Porque?--

 -- Porque me siento solo--mi mirada se fue automáticamente a Len, me acostumbré tanto a ella, sus locuras, sus enojos, a todo, verla dormir cada día me esta matando. 

--Pero me tienes a mi—eso me hizo sonreír, primera cosa que me hace sonreír en mucho tiempo y fue gracias a ella.

 -- Tu también me tienes a mi---respondí, ella no lo sabe pero es parte de mi familia también, junto con su Padre. 

-- Lo sé--esa respuesta la esperaba porque ella tiene un ego enorme. 

 -- Traje esto también—de su bolsillo sacó una fotografía.

-- ¿Quiénes son?---

 -- Mis Papás—no pude responder.

-- Papá James me dice que ellos son ángeles guardianes que se encargan de cuidarme--me sonrió y luego continuó

 -- Y ahora le prestaré mis ángeles guardianes a la Princesa para que la cuiden---

-- Sara eso...--

 -- Lo siento por no venir antes, es que nadie me dejaba venir—se disculpó, la abracé con todas mis fuerzas, mientras mis lágrimas caían

-- Eres la mejor amiga que he tenido Sara Alice—me regaló una enorme sonrisa. 

 -- Ahora volveré al palacio a cuidar a los bebés—susurró feliz.

-- Gracias por ser el ángel guardián de mis hijos y por traer esto—mostré la fotografía, ella asintió caminando hacia la salida.

 -- Jasper--se detuvo.

-- ¿Dime?--

 -- ¿Has pensado en besarla?--

-- ¿Porque?-- pregunté confundido. 

 -- Porque el beso del verdadero amor despertó a la bella durmiente—corrió hacia mi, besó mi mejilla y se fue, a pensar de su inocencia quedé pensando en lo que dijo, no tengo edad para creer en los cuentos de hadas pero ¿si funciona?, mi mente no paraba de hacer mil preguntas, me acerqué a ella para besar sus labios, mi corazón iba a explotar, la besé y todo siguió igual, estaba tan desesperado que comencé a creer en los cuentos de hadas, era un completo idiota, en ese momento entendí lo que estaba sucediendo.

-- Es tu decisión si quieres seguir--

 -- No me he rendido Len, es sólo que no puedo ser egoísta, estas sufriendo y yo te hice tanto daño que no podría hacerlo otra vez---sostuve su mano para darle calor. 

-- Me voy a morir sin ti, porque te amo con todo mi corazón y siempre lo haré hasta el fin de mis días-- era un mar de lágrimas otra vez. 

 -- Jasper...--

-- No quiero hablar, solo necesito estar solo Liam—no sé cuánto tiempo estuvo de pie escuchando todo lo que dije.

-- Jasper..-- lo ignoré, salí de la habitación casi corriendo,  necesito caminar, necesito aire, perderme en la oscuridad, mi móvil comenzó a vibrar, no me importó,  quería estar solo y que el silencio me consumiera.