Enamorado De Un Criminal [Libro 1 Y 2]

Veintiuno.

Vengo aclarar que el fanfic ¿En donde está Min Yoongi? Será nuevamente subido, no preguntes, solo gozalo.  :u

— ¿Por qué no, Jimin? ¡El no tuvo piedad de mi! —exclamó el mayor mientras movía su cabeza negando.

— C-creo que sería mejor irme. —habló el señor con un tono avergonzado.

Se paró en seco, y aunque le costaba caminar lo hizó al ritmo lento.

— ¡No señor! Si yoongi no lo quiere aceptar, yo si, por qué usted me salvó la vida. Ahora déjeme salvarlo a usted. —hablaba mientras se acercaba y con un gesto de amabilidad lo trajo hasta  en donde estaba sentado.

— ¡Maldita sea! —yoongi no pudo soportar más y se encerró en su cuarto.

El padre se sentía mal, creyendo que fue la peor idea en querer volver. Mientras que yoongi se encerró a su cuarto a llorar  y recordar los momentos en donde era feliz.

— Yo iré a comprar algo de comer, creo que deben que hablar en privado. —susurro Jimin mientras se iba, el padre si había escuchado y agradeció.

El padre sube las escaleras y toca la puerta.

— Quiero estar solo, Jimin. —cuestionó yoongi en el otro extremo de la puerta.

— No soy Jimin..

— ¡No te quiero ver!

— ¡Vamos yoongi! Déjame explicarte las cosas, en cuanto escuches todo lo que quiero decir, me iré para siempre.

— ¿Me promete que se irá?

— Si hijo.

Yoongi abrió la puerta y le indicó a su padre que se sentará en la cama.

— Bien padre. Lo escuchó.

Suspiró, miro hacia el suelo y habló:

— A veces somos tan estúpidos que no nos damos cuenta que podemos disfrutar la vida sin tener que hacer algo malo. A mis veinte años yo era un mafioso, secuestrador, obviamente no tan conocido como tu. Amaba lo que hacía, yo era bastante bueno para eso. Pero en eso conocí a tu madre, esa bella mujer que me enamoré tanto de ella que hice muchas locuras por ella, la locura de dejar todo lo malo solamente para que ella me aceptará como novio. Tu y ella fueron los fundamentos importantes para no volver a caer en el vicio. Pero lamentablemente sabes que esto te deja enemigos y yo los tuve, ellos se encargaron de hacerme la vida de cuadritos, lo lograron.

— ¿Y mi madre supo de lo que eras? —preguntó mientras se sentaba a lado de su padre.

— Si, lo sabía. —dijo entre dientes—, Pero aún así quiso seguir conmigo. Ella era fabulosa.