FAR AWAY © | SUGA - BTS.

CAPÍTULO SEIS

POV Suga

Hoy tenía que ir a ver a Mary, definitivamente no podía seguir dejándola sola y menos con todo esto que esta sucediendo. 

Me había levantado solo pensando en que pronto tendría una linda sobrina en mis brazos.

Recordar como muchas veces imaginé una vida con Hanna me hace querer borrarme la memoria de una maldita vez.

Muchas veces le preguntaba sobre si ella quería bebés a lo que ella dudaba y decía que sí pero a la vez que no. Solo imaginarla embarazada de mí, me hacía feliz, aunque solo fuera parte de mi estúpida imaginación.

Iba caminando hacia la cocina cuando recordé que no había nada comestible en ella y mi estómago empezaba a rugir.

Volví a mi habitación y solo me coloque unos zapatos para salir del apartamento e irme directo a la tienda más cerca.

Con la mayor pereza posible tomé mis llaves y me fui.

Ver mi reflejo frente al espejo, era terrible. Tenía grandes ojeras, el rostro más pálido gracias al efecto que hacía mi despeinado cabello rubio y la sudadera y pantaloneta negra. Era un desastre.

Después de caminar unos minutos llegue al establecimiento.

Recorría los pasillos sin ver nada en específico ya que mi mente estaba perdida en cualquier cosa que no era alimentos.

— ¿Quieres chocolate?  

— No.

— ¿Dulces?

— No.

Escucho y luego de eso empiezan unas fuertes risas provenientes de una chica.

Me asomo entre los estantes y veo a un chico haciéndole cosquillas hasta que ella esta roja de tanto reír.

Mi corazón se vuelve pequeño al recordar que yo pase un momento realmente igual con ella.

Su risa era vida, escucharla me encantaba, me llenaba de una paz infinita, de una tranquilidad inigualable.

Intento que mis ojos no se cristalicen pero es imposible. Empiezan a picar y siento la llegada de las lágrimas.

Sacudo mi cabeza y empiezo a respirar profundo para evitar llorar, por lo que salgo de la tienda sin comprar absolutamente nada directo a mi apartamento.

— Esto solo me pasa a mí — Me decía a mí mismo mientras caminaba — Ahora hablo solo, lo que me faltaba. Eres un imbécil, Suga. 

Sigo hablando conmigo mismo hasta que llego al apartamento y me doy una ducha rápida para vestirme y salir directo a casa de Mary.

El camino fue algo molesto por el tráfico pero cuando llegue respire profundo y fui directo a  su piso.

Toco el timbre y escucho varios pasos lo cual me extraña. "¿Será Edward? ¡Esta niña no entiende!".

— Hermano — Mis ojos no podían creer lo que estaban viendo. Cinco meses sin saber de él y ahora estaba parado frente a mí.