FAR AWAY © | SUGA - BTS.

CAPÍTULO DIECIOCHO

POV Tina

Me había costado demasiado el poder evitar las llamadas y los juzgados, aún faltaba uno donde se daría la condena o si tal vez saliera en libertad condicional.  

No podía mentir diciendo que no me dolía, más que un esposo fue mi mejor amigo y la persona que más quise en el mundo.

Jungkook marcó mi vida de tantas maneras que por más que lo intente no podría olvidarlo, aunque tampoco quiero hacerlo.

— Doctora Tina, ya no hay más pacientes por el día de hoy — Me avisa Lea, mi secretaria.

— Gracias, Lea, puedes irte, hasta mañana — Esta se despide de mí con una reverencia y yo se a regreso.

Respiro profundo y pienso en si de verdad tengo que moverme, estaba agotada tanto física como mentalmente.

Me levanto a duras penas de la silla y tomo mi abrigo y mi cartera, salgo del consultorio y coloco llave a la puerta para por fin irme a casa.

Cuando llego al aparcamiento saludo al señor que trabaja en la vigilancia y sigo mi camino.

Al llegar a mi auto, dejo mis cosas en el asiento de al lado, lo enciendo y prendo la radio.

No me sabía ninguna canción, pero es relajante poder conducir mientras te enfocas en la letra de las canciones y no en tus malditos pensamientos que hacen más ruido que cualquier final de futbol.

Llego a mi apartamento después de un tráfico insoportable y una lluvia infernal y la vibración de mi móvil me hace sobresaltar.

Meto mi mano en la cartera pero no lo consigo debido a la gran cantidad de cosas que hay en esta, así que la volteo en el sofá hasta que por fin doy con el delgado aparato y atiendo sin siquiera ver el número:

— ¿Hola? — Digo agitada por aquella búsqueda.

— Hola querida, es el señor Jeon, ¿está todo bien? — Los nervios suben y bajan en mi estómago y grito internamente — ¿Hola?.

— H-Hola señor Jeon, ¿Cómo está? —, digo mientras respiro profundamente.

— Un poco triste ya que has estado esquivando mis llamadas tanto en tu móvil como en tu consultorio — Siento el remordimiento crecer en mí.

Lo he evitado por todo este tiempo porque saber alguna noticia de su hijo sería volver a caer en el pozo sin fondo del cual ya estoy escalando las paredes hasta poder lograr salir.

— Sí, lo siento es que...

— No te disculpes, entiendo tu posición solo que, como seguramente mañana es el último juzgado y de verdad quisiera que estuvieras presente — ¡Joder! — Eres una persona demasiado importante en la vida de Jungkook y sé que él quisiera con todas sus fuerzas que estuvieras ahí.

¡Esto solo me podría pasar a mí!.

— Señor Jeon, yo...

— Por favor, Tina — Paso una mano por mi rostro y respiro profundo, esto es frustrante.

— De acuerdo, ¿A qué hora debería estar allá?

— Yo pasaría por ti, no tengo problema. Me gustaría hablar contigo algunas cosas — Asiento y luego hablo cuando caigo en que no lo tengo de frente.

— Esta bien.

— A las nueve de la mañana estaré esperándote frente a tu edificio.

— De acuerdo, buenas noches señor Jeon.