CAPÍTULO TREINTA Y DOS

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A pesar de su insistencia, tuvimos que convencer a Jimin de alguna forma de que fuera al juzgado, no antes de hablar con Hoseok y me contara el porque él también estaba distante con él.

Al entender lo que estaba pasando, hice que estos dos se reconciliaron por lo menos esta vez para poder ir al juzgado y que Hoseok se quedara fuera con Jimin.

Por mi parte a pesar del miedo y la intriga, necesitaba ver y escuchar la condena, no iba a estar tranquila hasta saber que de verdad él iba a estar encerrado sin dañar a más nadie.

Las palabras de Jeun So vinieron a mi mente y no podía sentir más rencor por ella, aunque algunas veces llegaba a sentir lastima por tener que llegar a esos límites solo por el amor no correspondido de alguien. Justamente de ese alguien que su amor correspondía al mío

— Hora de irnos, hermosa — Yoongi me saca de mis pensamientos y asiento para tomar las llaves, mi bolso y salir del apartamento con aquellos tres chicos tras de mí.

Llegamos a la calle donde estaban los dos autos aparcados, pero debido al estado inestable de Jimin, todos nos fuimos en el auto de Yoongi, con Hoseok como copiloto y yo atrás tomando las manos de Jimin.  

Cuando íbamos por mitad de camino, aprieta mis manos y cierra sus ojos mientras siento como el temblor en su cuerpo incrementa.

— Estar contigo en la parte trasera del auto, es recordar cuando él nos llevó... — Aprieta sus labios y empiezan a correr lágrimas por sus mejillas — ¿Por qué? ¿POR QUÉ NOSOTROS? ¡JODER!

Los gritos de Jimin eran tan fuertes que Yoongi por un momento perdió el control del auto y tuvo que estacionarse a un lado de la carretera.

— Ya todo está bien, Jimin. Él ya no nos va a dañar ¿de acuerdo? — Digo intentando ignorar el susto que acabamos de pasar.

— ¿Cómo lo sabes? ¿Cómo sabes que ese enfermo no nos va a volver a hacer nada? — Me quedé en silencio — ¿SABES QUÉ FUE VER CÓMO ENTERRABAN A JIN OTRA VEZ? ¿SABES QUÉ FUE VOLVER A RECORDAR ESE DÍA? ¡ANTES DE IRSE ESE DÍA DEL APARTAMENTO ESTABAS COGIENDO CON NAMJOON Y YO DICIÉNDOLE A JIN LO MUCHO QUE LO AMABA HASTA QUE ESA MALDITA LLAMADA LLEGÓ! ¡ERAS MALDITAMENTE FELIZ CON ÉL, HANNA! ¡Y ESE IMBÉCIL TE VIOLÓ Y NOS HIZO PASAR UN INFIERNO!

Escuchar todo lo que estaba diciendo, cavaba un hoyo en el centro de mi pecho, porque recuerdo perfectamente ese día.

He intentado reconstruir mi paz en este tiempo, he intentado dejar de tener miedo, pero hasta el sentir cualquier toque fuerte en mi piel me recuerdo a su tacto, a sus violaciones y maltratos. Yo también tenía miedo, pero intentaba llevarlo de otra forma muy diferente.

De soslayo veo hacia la parte delantera del auto y Yoongi tiene la vista al frente apretando el volante de una forma tan fuerte que sus nudillos se veian blancos y Hoseok, tenía su vista fija en la ventana.

Escuchar lo que dijo Jimin para ellos no debe ser nada fácil, no sé para quien sería más difícil, pero sé que es una total mierda escuchar esas cosas.

Jimin llora sin consuelo tapando su rostro con sus dos manos. Ver a una de las personas más felices del mundo de esa forma, destruye a cualquiera que lo ve, justo como en este momento me hiere verlo de esa manera.

— Chimchim — Lo llamo y él no me mira — Jimin, ya todo se acabó. No habrá más maltratos, quemaduras o violaciones. Ya no habrá más privación a nuestra libertad, ya no hay quien nos vuelva a pasar esos momentos de terror.

No hay respuesta, ni siquiera un movimiento.

— Sí, fuimos felices con ellos pero, llegaron personas mejores a hacernos igual o más felices de lo que ellos lo hicieron, ¿no crees? — Poco a poco levanta su rostro hasta que puedo ver sus pequeños ojos hinchados mirarme — Él no va a volver, Jimin.

FAR AWAY © | SUGA - BTS. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora