FAR AWAY © | SUGA - BTS.

CAPÍTULO CINCUENTA

POV Suga 

Me despierto y abro los ojos lentamente debido al gran dolor de cabeza que tenía, sentía que la cabeza me iba a explotar y maldigo por haber salido a mitad de la noche a comprar más alcohol.

Me rindo al no poder abrir los ojos y vuelvo a recostar mi cabeza en la almohada cuando me doy cuenta que algo está abrazado a mi cuerpo y yo estoy rodeando algo con mi brazo derecho.

— Maldita sea, ¿qué hice? — Digo pensando lo peor y que quien estaba conmigo era alguna tipa que haya metido en casa.

Ahora me obligo a abrir los ojos y me encuentro con una cabellera castaña, esa que conocía perfectamente. Subo un poco mi cabeza y veo Hanna con sus ojos cerrados durmiendo sobre mí.

El corazón se me iba a salir del pecho, algo corrió por mis venas y estoy seguro que era la sobredosis de felicidad que sentía en éste momento. ¿Qué milagro había pasado o que pacto hice con el diablo mientras estaba ebrio para que ella estuviera justo aquí?.

No quiero moverme pero, la curiosidad podía más que yo. Subí un poco mi cabeza y la ví dormida. Se veía en paz, cómoda, tanto como yo ahora.

Con cuidado la muevo y la dejo sobre la cama, al levantarme la presión en mi cabeza se hace más fuerte por lo que maldigo bajo pero no lo suficiente como para que ella no oyera.

Empieza a moverse pero no abre sus ojos, no me muevo para esperar si despierta pero al contrario, sigue durmiendo.

Me acerco y no sé si está bien o está mal lo que estoy haciendo, pero necesito hacerlo, así sea por última vez.

Me acerco y dejo un pequeño beso en sus labios, me separo solo un poco sin abrir los ojos y necesito más. Quiero más de ella.

Dejo un beso más profundo en sus labios y llevo mis manos a su cintura donde doy caricias debajo de su pequeña blusa.

Ella suspira entre sueños reaccionando a mis toques y bajo mis besos a su cuello donde beso más profundo.

Un gemido bajo sale de sus labios al saber que una de sus partes más sensibles, es su cuello. Sonrío triunfador y sigo mi trabajo.

Su cuerpo se tensa y mi nombre sale de sus labios en un susurro.

— Y-Yoongi — Subo mis besos a su mejilla y quedo frente a ella.

Nuestros ojos se conectan y se que mi mirada le dice más de lo que mi boca pueda decirle.

— Déjame hacerlo — Se ve que tiene una guerra mental en éste momento, pero si no quisiera, no lo pensara tanto.

Acerco mis labios a los de ella y los rozo haciendo que ella los entreabra más.

— Déjame besarte, tocarte y hacertelo antes de que todo acabe — Su respiración es agitada al igual que la mia haciendo que nuestros pechos rocen, sólo que estoy muriendo por quitar la ropa del medio — Déjame demostrarte con mi cuerpo, corazón y alma que la única a la que le pertenezco es a ti.

Ella piensa por unos momentos y sus ojos se cristalizan.

— Yo no quiero que ésto acabe — Y ese fue el incentivo que necesitaba

— Yo tampoco — Uní nuestros labios y ella respondió con la misma intensidad con la que yo la besaba.

Abrió sus piernas para hacerme espacio entre ellas provocando un gemido en ambos cuando afinque mi miembro en su parte íntima. Maldita ropa, siempre estorba.

Sus manos van hacia mis mejillas en un intento de acercarme más pero ya eso no era posible, no había manera ni de que una hormiga pasara por el medio de nosotros.