Capítulo 29

2.7K 196 28
                                    


-Opino que sí estuvo involucrada en tu secuestro.- dice mi amiga.

Nos encontramos en la habitación, tras contarle todo lo sucedido a Taylor y mis sospechas de que Emily es la portavoz del equipo contrario, por decirlo de algún modo, están siendo acertadas de manera indirecta.

Ella para mí ya no es confiable para que esté en la investigación que tenemos en este momento.

Tengo que sacarla de nuestro grupo, ella sólo hace atrasarnos en vez de ayudarnos, cuando creemos que estamos dos pasos adelante de los científicos es totalmente erróneo, ella pasa información a las otras personas, les dice dónde me encuentro y ocurre una persecución. Tengo que parar esto de manera urgente, y la primera persona con la que tengo que hablar es con Logan.

-Yo también creo, cambiando de tema ¿Dónde está Logan? Llegamos a la casa y no sé si salió de nuevo- le pregunto a mi amiga con intriga.

-Debe estar en la casa, con lo que pasó, no creo que te deje sola un momento- responde mi amiga con obviedad.

-Bueno, quédate aquí, tengo que buscarlo para aclararle algunas cosas- termino de hablar y me levanto de la cama para salir de la habitación.

Bajo las escaleras y recorro toda la casa y no encuentro ni rastro de Tom o de Emily ni de Erick que se vino con nosotros a la cabaña, tampoco hay rastros de Logan, sólo me queda buscar en su habitación.

Subo las escaleras y me encuentro al frente de su puerta teniendo un debate mental en si tocar o no. Me voy por la primera opción, toco dos veces y nadie me abre, levanto la mano para tocar por última vez y me encuentro a un Logan con cara de recién levantado sin camisa y con un mono deportivo, cabe destacar que son las diez de la noche y que me encanta su vestimenta.

Sus abdominales se ven tan marcados como una barrita de chocolate, y despierto del viaje ancestral en el que estaba sumergida por culpa de sus abdominales.

Malditos abdominales.

-¿Te gusta lo que ves?- habla con cierta picardía.

-Eh... Normal, si, normal, no es que te veas mal sólo que estás bien pero no quiero decir que te veas mal ¿Me entiendes?- ¿Qué acabo de decir? Malditos nervios de mierda que aparecen cuando menos te los esperas.

-¿Okey? Bueno, ¿Qué te trae por aquí?-pregunta con una ceja enarcada.

-Ehmm, quiero hablar contigo sobre un tema serio, y no sé cómo te lo vayas a tomar- hago una pausa para organizar mis ideas y calmar mis nervios- Pero antes de decirte el asunto por el que vine ¿Sabes dónde están los chicos? Cuando te estaba buscando por toda la casa pensé que al menos vería la cara de alguno de ellos pero no fue así-termino de decir algo que es lo primero que me pasa por la mente, vine a decir una cosa y digo otra.

-Se fueron a comer pizza, al parecer los panes con jamón y queso no fueron suficientes para sus estómagos -me responde con algo de humor en su voz- Ahora, ¿Qué me vienes a decir? La curiosidad me quema la mente -pregunta curioso.

-¿Puedo pasar al menos a tu habitación? Estar parados aquí en tu puerta me ha cansado -digo.

No me gusta decir algo realmente serio estando de pie con otra persona por dos razones la primera, es que me canso rápido «por esa razón no voy al gimnasio, y también por la flojera y la segunda, es que por mi estatura siempre me siento intimidada por otra persona.

-Claro, discúlpame- habla Logan y me dirige al interior de la habitación que comparte con Tom hasta sentarnos en su cama.

-Bueno, es sobre Emily -comienzo a hablar y veo confusión en sus ojos pero no me interrumpe -Tengo sospechas de que ella le está aportando información a los científicos sobre mí- le hablo con total sinceridad.

-¿Cómo puedes pensar eso de ella? Puede que se caigan mal mutuamente, pero no creo que llegue a defraudarnos de ésa manera -me responde indignado. Se levanta de la cama y comienza a caminar la habitación de un lado a otro frustrado.

-Te recuerdo que para comenzar no nos llevamos bien, siempre cuando ocurre algo ella está más rara de lo normal, he escuchado una conversación de ella anteriormente por teléfono y créeme fue muy extraño ¿Qué otras pruebas quieres? Quítate la venda invisible que tienes en tus ojos, y no la defiendas a ella como tú amiga sí la quieres defender al menos preocúpate por ver la realidad -termino de hablar y me doy cuenta que estoy al frente de él a poco centímetros.

Todo está en un incómodo silencio. Sólo él y yo, en el cuarto, mirándonos, buscando respuestas en nuestras miradas para saber resolver el maldito conflicto que nos envuelve.

-¿Sabes? Te creo, creo todo lo que me dices, sólo fui un idiota creyendo que nos está ayudando, sólo dame tiempo, hablaré con ella, y trataré de resolver todo- termina de hablar con culpabilidad en su mirada.

Sí me preguntaran ¿Cuál es mi pasatiempo favorito? Mi respuesta sería estar con él, me siento tan pero tan bien hablar y convivir con él que no haría otra cosa si no quedarme aquí hablando, mientras el tema de conversación no sea Emily, todo está bien.

-Perfecto, no hay problema... Bueno, me iré, buenas noches -termino de hablar rápidamente para voltearme y tocar la manilla de la puerta pero Logan me interrumpe el acto hablándome.

-Espera -habla Logan tomando mi brazo y volteándome quedando a lacónicos centímetros.

-Ehmm ¿Qué sucede? -pregunto mirando sus carnosos labios, aunque miro sus ojos rápidamente y él está mirando mis labios. Lo caché.

-Estoy tentado a besar tus labios pero prefiero pedirte permiso primero- quedo impactada con lo que acaba de decir.

-Si lo vas a hacer, no pidas permiso -termino de hablar y siento rápidamente como estampa sus labios con los míos.

Es un beso desesperado, el cual siento perfectamente su preocupación, su culpabilidad pero lo que es más palpable es toda la sinceridad que éste beso expresa.

Rodeo mis brazos en su cuello y él toma mi cadera para acercarme más a él, escucho un grave gruñido proveniente de su garganta.

Sonó muy sexy.

Encontrándonos en plena sesión de besos nos separamos sólo centímetros para poder respirar. Nos quedamos simplemente admirando el rostro de nosotros, él con sus labios carnosos hinchados levemente por lo que acabamos de hacer y sus hermosos ojos marrones mirándome con una intensidad difícil de describir.

Un sonido nos interrumpe y hace que nuestras miradas se dirijan a la puerta y así encontrarnos con una Emily furiosa.

Muy furiosa.

Bajo Mis Poderes ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora