6. Rota

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 (Nota de la autora: para un mayor disfrute del capitulo escuchar la canción Moments de Tove Lo cuando se indique).

Necesito distraerme de todo el dolor que siento y la única forma de reemplazarlo es con dolor físico. No es la primera vez que recurro a esto y si mi vida sigue así tampoco será la última vez. Recurro a ello porque no tengo otra alternativa. Es tan frustrante vivir una vida en la que no sientes nada, que a veces lo único que puedes sentir es el dolor que te infliges a ti mismo. O vivir en una donde el dolor físico es lo único que te alivia y te hace no pensar en tu vida de mierda, sino solo en sentir el dolor correr por tu cuerpo. Bueno, pues yo vivo las dos.

Abro mi cajón y saco mi mechero de allí. Escucho un pitido del móvil. Cha-Cha. No he hablado con ella desde la mañana. No quiero hablar con ella ahora. Ya le inventaré algo para explicárselo mañana.

Me saco la chaqueta y la cuelgo. Me quedo en manga corta, hace algo de frío pero pronto eso no lo notaré. Me vuelvo a sentar en cama y respiro profundamente. Me tumbo mirando el techo. Levanto mi brazo izquierdo para poder verlo bien. Veo las marcas anteriores cicatrizándose. Hoy habrá una nueva. Cojo el mechero. Vuelvo a sonar el móvil. Mierda. Me levanto y lo tapo con el cojín. Me vuelvo a tumbar en la cama. Intento encender el mechero y no va. Joder. Empieza a sonar el móvil, una llamada. Cha-Cha.

- ¡Joder! ¡Déjame en paz! - tiro el móvil contra la cama.

Vuelvo a intentar encender el mechero. Una y otra vez. Se ha quedado sin gas. Justo en el mejor momento. Joder. Tiro el mechero contra el suelo. Cojo la chaqueta y salgo de la habitación. Bajo las escaleras para dar a la entrada. Cojo las llaves del coche y salgo de mi casa.


POV Toni Topaz

Mierda. Estoy preocupada por Cheryl. Nunca había tardado tanto en contestarme. Desde la mañana no me había hablado y ya eran las 11 de la noche. ¿Qué le habrá pasado? ¿Y si se ha hecho daño o algo? Joder, joder. Quiero ir a su casa a mirar si está bien, pero no puedo. No tengo excusa para ello. ¿Y si la llamo? No, reconocería mi voz. Bueno, no hemos hablado mucho, y cuando lo hicimos las estábamos algo bebidas. Podría funcionar. Pero también me puede pillar. Me da igual. Lo importante es que ella este bien.

- La voy a llamar.

Me levanto y cojo el móvil. La llamo. No me responde. La llamo otra vez y así unas 10 veces. Mierda, ¿qué esta pasando? Necesito saberlo. Necesito saber que está bien. Necesito ir a su casa. Estoy dispuesta a correr el riesgo.

- ¡Toni! ¡Rápido! - Sweet Pea aparece en mi puerta.

- ¿Qué pasa? Iba a salir ahora. ¿Es importante?

- Es Cheryl.

Mierda. Salgo corriendo de la caravana, dejando a Sweet Pea detrás. Veo a todos los Serpientes juntos delante de un coche. Enfrente de ellos se encontraba alguien. Cheryl. Estaba borracha y enfadada.

(Poner la canción ahora)

- Nadie ha invitado a esta fiesta a la Barbie fascista. - puedo escuchar a algunos de los serpientes.

Me meto entre los serpientes para no ser vista.

- Os confundís, imbéciles. Nadie a llamado a la basura de Riverdale aquí. Así que escucharme harapientos, no voy a premitir que interrumpáis mi paso. Así que haceros un favor y buscar otro vertedero que degradar con vuestra presencia.

Cheryl se está pasando. Está consiguiendo enfadar a las Serpientes, como no me entrometa la empezaran a demacrar. Pero tampoco puedo poner de su lado después de todo lo que ha dicho. Mierda, tengo que actuar rápido. Yo la echaré fuera, a ver si la puedo proteger de las Serpientes. Cheryl seguía hablando. Tenía que pararla ya.

- ¿Por qué no vienes aquí y me dices todo eso a la cara? - digo avanzando cara ella y quedarnos solas delante.

- Será un placer Reina de los "sin techo". - Mierda Cheryl.

- Venga, chicas. - aparece Jughead, lo que me faltaba.

- Jughead, vete. - decimos a la vez Cheryl y yo.

- No, Cheryl vamos.

Veo como Jughead se lleva a Cheryl a su coche. Y la veo irse conduciendo.

- ¿Qué haces? ¿La has dejado conducir borracha? ¿Estás loco?

- Está bien para conducir, mejor que se vaya que que se quede aquí.

Idiota. Si no hubiera aparecido, podría haber acabado todo bien. Ahora ella se a ido pensando que la odiaba. Mierda. La había cagado más.


POV Cheryl Blossom

Siento el viento en la cara. He abierto el capo para que el viento se lleve mis lágrimas. El alcohol me ha hecho demasiado efecto. Estoy pisando el acelerador más de lo que debería, pero así puedo sentir aparte de vergüenza y enfadado. Adrenalina. Me gusta la adrenalina que esto me provoca. Cada vez subo más la velocidad.

Recuerdo a Jason. La única persona que realmente me quería. Recuerdo que un año Jason intentó convencerme para que celebráramos nuestro cumpleaños juntos. Y unos años más tarde entendí porque, era porque nadie quería venir al mío. Jason no quería que yo lo supiera; él me protegió todos los días. Ojalá aquel día en el río, lo hubiera protegido. Ahora está muerto.

Sin darme cuenta me desvío de la carretera. No me da tiempo a reaccionar y me choco con un árbol. El tiempo es como si pasara a cámara lenta. Veo el árbol cada vez más cerca y el choque. Mi cuerpo se va hacia delante, pero el cinturón me retiene. Me quedo quieta en el asiento, cubierta de cristales. Nunca había sentido tanto dolor. Tengo que levantarme, tengo que irme. Me saco el cinturón como puedo y abro la puerta. No siento las piernas y me caigo al suelo. Tengo que alejarme del coche. Me arrastro por la carretera y me giro mirando al coche. Siento ira, rabia, enfado por todo lo sucedido. Cojo una piedra y se la lanzo al coche haciendo que este comience a arder. Y, así, sentada en el suelo delante del coche ardiendo es como me encuentra la policía.

Siento las esposas apretar mis muñecas. Me despierto en la comisaría seguramente esperando a mi madre. Si ella decide venir a buscarme, no me extrañaría que me dejara toda la noche allí.

Mi madre aparece y consigue sacarme de aquí. El camino a casa fue silencioso. Ni una palabra. Llego a casa y mi madre me empuja hacia las escaleras.

- Tenía que hacerlo. - le decía mientras me tiraba en mi cama.

- No, Cheryl. Como siempre es lo que tu querías.

Me quedo mirándola dar vueltas por mi habitación mientras me aguanto las ganas de llorar.

- Espero que hayas disfrutado. Porque después de hoy, no habrá más River Vixens. - dice acercándose a mí, y agarrándome la cara tan fuerte que me hace daño - Y si no fuera porque nadie va admitirte, te mandaría a un internado en Europa esta misma noche. - y se va, dejándome allí, llorando sola.

Mierda. ¿Por qué hice eso? ¿Fue el alcohol? Puede. ¿Estaba triste? No. ¿Entonces, que era? No lo sé. Sé que hay algo malo en mí. Solo, estoy rota por dentro. Nunca he hecho nada bien. Estoy rota, nunca hago nada bien.

Our Destiny Isn't Happiness [Choni]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora