Cuando mamá termina de curarme, subo arriba para seguir bañando a Bee, gracias a Dios no se salió de la tina y no mojo nada, termino de bañarlo, lo tomó en brazos envuelto en una toalla y lo pongo en la barrita del lavamanos, empiezo a secarlo y cuando está listo lo suelto en mi cuarto, tomo una toalla y me meto a la regadera, me doy una ducha caliente para quitar todas las tensiones que tengo y cuando termino de bañarme, me pongo mi pijama.
Me acuesto en mi cama con Bee en mis brazos, gracias a Dios mañana es viernes, el domingo es halloween, y en algún momento de la noche termino dormida.
~Al día siguiente~
Me levanto por unas pequeñas lamidas en la cara, abro los ojos y empiezo a acostumbrarme a la luz que entra por la ventana, muevo a Bee a un lado y me paro de la cama, no me bañare en la mañana, me bañare cuando llegue de la escuela.
Empiezo a caminar hacia mi armario y busco que ponerme, al último me decido por una falda Levis oscura, una blusa de tirantes blanca, y una camisa a cuadros de Ryan, la amarro para que no se vea que es tan grande y me pongo mis zapatos negros.
Tomo mi mochila, dinero, mi celular y ropa deportiva y salgo de mi cuarto, camino escaleras abajo y entro a la cocina, veo que los chicos ya están desayunando huevos con tocino y hay un plato servido en mi lugar.
— Buenos días chicos — les digo mientras me siento y sonríen.
— Buenos días — responden todos y empezamos a comer, cuando ya terminamos nos subimos al auto y tomamos rumbo al instituto, cuando llegamos me despido de los chicos y hacemos la entrada triunfal.
Por el pasillo veo a Susan y le guiño el ojo ella solo sonríe y camino hasta Lai.
— ¿Escuchaste que llega alguien nuevo? No lo he visto pero dicen que es guapo — hace una cara rara y yo río.
— Tu novio está presente en la conversación por si no lo recordabas — escucho que dice Simón, vuelvo a reír y ella va y lo abraza.
— Sabés que solo juego, yo te quiero a ti — Lai le dice a él y se dan un beso.
— Tu hermana está presente en la conversación por si no lo recordabas — les digo usando la oración de Simón, ella empieza a reír, caminamos hacia el salón y entramos en el, me siento en mi lugar y siento como mi teléfono vibra en mi bolsillo.
Hoy no podré ir a la escuela, tengo que ayudar a mamá en unas cosas de su trabajo y estaré ocupado. Te quiero.
Atte: Thomas.
Le respondo que yo también lo quiero y guardo mi teléfono, entra nuestra maestra de valores con un chico encapuchado, cuando entra se quita la capucha y observa el salón, su vista se clava en mí y me sonríe, frunzo el ceño y volteó hacia otro lado.
— Buenos días alumnos, este chico es nuevo, su nombre es Axel, espero y lo reciban bien y no le hagan nada — la profesora voltea hacia mí y hacia Alaia y la dos solo sonreímos.— preséntate Axel.
— Hola soy Axel, me mudé aquí por el trabajo de mi mamá, me gusta el béisbol y espero y seamos grandes amigos — cuando dice lo último sus ojos se clavan en mí y yo me remuevo en mi asiento incómoda.
Este chico es raro y no me trae buena espina.
Lo acabamos de conocer, no digas nada hasta que lo conozcamos mejor.
— Bueno Axel, puedes tomar asiento en el lugar que quieras — empieza a caminar y se sienta dos asiento atrás de mi.
Las clases pasaron normales y cuando toca el timbre para el almuerzo, siento como una mano se posa en mi hombro.
— Tu eres Leanna ¿No? — asiento y vuelvo a fruncir el ceño, no sé qué se trae este chico.
— Bueno, como no conozco mucho la escuela, me dijeron que tú hablas mucho y me pareciste muy linda, así que, quería que me dieras un vistazo por el instituto — él sonríe coqueto y yo sonreí falsamente, este chico cree que me trage su cuento, como si no supiera lo que planea, jugar conmigo, pero yo jugaré primero.
— Bueno, pues dile a la persona que te dijo que era habladora, que ella te dé el vistazo que quieres — me separó de él y empiezo a caminar hacia la cafetería, siento como me jalan el pelo y me hacen para atrás.
— Nadie me dice que no, muñeca — me da un beso en el cuello y yo me volteó dándole un puñetazo en la mejilla.
— Pues ya llegó quien, muñeco — me quitó bruscamente de él y saco una toallita húmeda para limpiarme el cuello, llegó hasta Lupita y ella me da el almuerzo, camino hacia la mesa de nosotros y me acomodo el pelo.
— ¿Por qué duraste tanto en venir? Salimos juntas del salón — Lai me dice mientras me siento en mi lugar y bufó.
— El idiota de Axel me dijo que le diera un "vistazo" por el instituto, le dije que no, y me jalo el pelo — veo que los chicos se empiezan a parar buscándolo y yo los detengo.
— Ya lo arregle, le di un puñetazo en la mejilla.
— Esa es mi hermana — choque puños con David y Simón y empiezo a comer mi hamburguesa.
— ¿Por qué no vino Thomas?
— Me dijo que su mamá necesitaba ayuda en su trabajo y la iba a ayudar — ella asiente y sonríe.
— Adoro la pareja que hacen, son tan lindos y se ven tan tiernos juntos — ella hace ojitos y aprieta sus cachetes, rei y le guiñe el ojo.
Yo también adoro la pareja que hacemos.
Después de almorzar, sonó el timbre para entrar a las últimas clases, nosotros entramos a dos horas de química, camino atrás de Lai hacia nuestro asiento juntas y cuando ella llega se sienta desparramada.
— Estás horas serán eternas — me acomodo al ver que la maestra entra al salón.
— Puede que si — ríe y yo saco mi cuaderno.
Sabes que estás horas serán eternas, ¿Verdad?
Puede que sí.
*
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El secreto de mi familia ©
Viễn tưởngYo no soy una chica como cualquiera. Mis hermanos y yo, tenemos un pequeño defectito. Creemos que no se puede salir de control, pero no sabíamos que llegaría el momento de que todo se descontrolara, o de que alguien lo descontrolara. Queda completam...