Epílogo.

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Después de dos horas de ver como Ryder manejaba y los chicos decían que iban a hacer llegando a sus casas, empezamos a adentrarnos a la ciudad, la camioneta se empieza a detener y un pitido empiezo a aturdir mis oídos.

—Esto es una trampa —todos nos bajamos rápidamente y empezamos a alejarnos de la camioneta, y frente a nuestros ojos, explota.

Cierro mis ojos ante el sonido tan fuerte que hace y hago un puchero.

—Simón conviértete en lobo, ya quiero llegar a casa —Simón asiente y de mi cuerpo empieza a salir pelo, Ryder y algunos se suben en mi, y en Simón se suben la familia del doctor, empiezo a correr adentrándome hacia la ciudad y observo las expresiones de la gente extrañadas.

En este momento no me importa ningún código de el coliseo.

Empiezo a correr más rápido y puedo ver mi vecindario, veo mi casa completamente llena de carros, y cuando estoy enfrente de la puerta, me convierto en mi persona y mis ojos se llenan de lágrimas, Simón también se convierte y una sensación de cansancio me hace caer de rodillas al suelo, Simón toca el timbre y escucho pasos correr hacia la puerta y siento como la abren, elevó mi vista y observo a mi madre y a mi padre, con los ojos llenos de lágrimas, me levanto y lo primero que hago es abrazar a mamá, empiezo a llorar en su pecho y ella me acaricia el cabello, me separó de ella y abrazo a papá, mientras mamá empieza a abrazar a Ryder y Simón, me separó de papá y corro hacia el interior de la casa.

—¡Por fin! —digo y doy un grito ahogado al ver a todos los chicos juntos, corro hacia Thomas y doy un salto, enganchando mis piernas en su cadera, y me fundó en un beso con el, el cual es apasionado y con un toque de tristeza por los días que no nos vimos, me separo de el y corro hacia mis hermanos.

—¡No saben cuánto los extrañe! —grito y siento varios brazos alrededor de mi cuerpo, me separó de ellos y los veo a todos, igual de cansados que yo, una sensación de cansancio más fuerte que todas las que he tenido en estos días invade mi cuerpo y me hace caer en el suelo, David me carga y me acuesta en el sillón, mamá entra corriendo y observo a Richard entrar detras de ella, Richard empieza a tomar mi pulso y varías cosas que no entiendo por el cansancio.

—Está débil, tantas sensaciones y acciones tan repentinas a las que su cuerpo no estaba acostumbrada, hacen que se sienta así, al pasar los días los golpes de cansancio irán disminuyendo, lo único que tiene que hacer es comer bien, y todos estará bien dentro de unos días —mi cuerpo se vuelve a recargar de energía y me levanto del sillón—. Ve, así estará recargando fuerzas y con golpes de cansancio, algo normal —sonríe y sale de la casa.

Veo como mamá enciende la televisión y le pone a las noticias, y hay algo que nos llama la atención a todos.

"Un grupo de chicos, arriba de dos lobos enormes, ¿Extraño no? Estuvimos investigando en este poco tiempo antes de la transmisión en vivo del programa y descubrimos que nada más y nada menos que se trataba de la familia Russell. Ellos son un grupo de chicos los cuales tienen poderes, los dos lobos eran Leanna Russell y Simón Russell integrantes de esa familia.
Tres de los chicos de esa familia habían sido secuestrados y regresaban de su escapé. Hasta aquí el reporte, más información sobre esta familia será informada mañana por la mañana."

Abro mis ojos sorprendida y volteó hacia mamá que se encoge de hombros.

—¡Wuuuu! —gritan Simón y David y chocan sus puños—. ¡Seremos famosos! —al escucharlos decir eso empiezo a reír y niego, camino hacia Ryder y veo a Ana, quién está roja por llorar.

—¡Hola Ana! —digo yo y ella me sonríe—. ¿Cómo está el bebé? —ella abre sus ojos sorprendida y Ryder asiente.

—Bien, extrañando a papá —Ryder sonríe y pone su mano en la panza de Ana, sonrió ante la ternura que me causan esos dos y me alejo de ellos.

—¡¿Dónde está?! —escucho el grito de mi loca mejor amiga y sonríe al verme, corre hasta mi y se estrella en mi pecho, mientras yo la abrazo con emoción—. ¡Te extrañe mucho! —se separa de mi y me ve con una sonrisa.

—Yo también te extrañe tonta —corre hacia Simón y lo abraza, dándose un beso, sonrió al verlos y camino hacia Thomas, lo tomó de la mano y le sonrió.

—Te extrañe solesito —sonrió y le doy un beso.

—Yo también te extrañe —ahora es él quien me besa y me toma por la cintura, pegando su cuerpo al mío, el beso se vuelve hambriento y lleno de deseo, pero me detengo—. Aquí no, después —el sonríe y yo solo ruedo los ojos por lo hermoso que se ve.

Volteó hacia la sala y los veo a todos juntos, riendose por algo que contó Simón, y sonrió como estúpida por verlos a todos felices.

Pasar tanto tiempo en ese lugar me lleno de experiencias que jamás en mi vida me imaginé que viviría.

En tan poco tiempo, demasiadas cosas habían pasado y yo no estaba preparada para alguna de ellas.
Pero me siento feliz, por haberla pasado todas con éxito, y con varios golpes de por medio.

Y por último, me siento tan feliz y tan libre, de que por fin, todas las personas que conozco y que habitan está ciudad, conozcan.

El Secreto De Mi Familia.

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El secreto de mi familia ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora