El secreto de mi familia ©

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Después de unos quince minutos de estar esperando los resultados, por fin nos dijeron que podíamos salir, nos subieron a la tarima y le pasaron un papel al director de los resultados.

—¿Qué les parecieron estos juegos? Creo que este año, como los demás, hemos tenido muy buenos participantes y sabemos que están muy orgullosos de lo que han podido lograr. A continuación, vamos a dar a conocer los nombres de los dos participantes que pasaron a la final para que así esta pueda dar inicio. —Alex tomo mi mano y le sonreí.

—Pase lo que pase, los dos somos muy buenos y lo hicimos excelente —asentí y fije mi vista en el director.

—El primer participante que logró llegar a la final es, Alexander —lo suelto y le doy un abrazo, doy un suspiro y nos separamos.

No lo logré.

—Y la participante que pasó a la final es, Leanna —agaché mi cabeza y suspiré, creo que no valió la pena.

—¡Leanna, pasaste! —¿Pasé? ¡Pasé! Empiezo a brincar y siento cómo me carga.

—Wu, en tu cara Jessica —empiezo a bailar alrededor de ella mientras me rueda los ojos.

—Les daremos quince minutos a los participantes para descansar, pueden sentarse —corrí hacia Ryan que me esperaba con los brazos abiertos y me estrellé en su pecho, empiezo a reír cuando siento que me carga y puedo sentir más brazos en el abrazo.

—¡Lo logré! Logré pasar a la final —les digo mientras me separó de ellos.

—Sabíamos que lo harías, enana, estamos orgullosos de ti y si no llegas a ganar tienes que estar orgullosa de hasta donde haz llegado —asiento y me mareo un poco, me tomo por los hombros y me sentó.

—¿Estás bien? ¿Qué te pasó?

—¿Enserio no vieron nada de lo que pasó? —todos niegan y suspiro—. Me mordieron dos leones, un pinchazo de un pico de los cazadores y un dardo tranquilizador —todos hacen mueca de asco—. Pero no sé preocupen, estoy bien.

—Por favor, Alexander y Alexandra, favor de pasar a la tarima, tenemos que explicarles lo que sucederá a continuación —Alex se para y camina hacia mí, pasa un brazo por mis hombros y me recargo en él.

Cuando llegamos Albert y el entrenador de Alex se acercan hacia nosotros junto con los que manejan todo.

—Chicos, así funcionará esto, Alexander, tu serás el primero en hacer tu prueba, los dos usarán el mismo poder y va a haber un pequeño cambio, cómo está prueba es complicada, será en el desierto, tú estarás en el medio del desierto y Alexandra estará sentada viéndote, si ve que tienes un problema o si algo se sale de control, ella tendrá una oportunidad de ayudarte, si ella lo usa en algo que no necesitabas ya no podrá ayudarte —los dos asentimos y nos suben a una tarima que se mueve hacia arriba—. Los expectantes estarán viéndolos por la pantalla gigante, suerte chicos.

Nos suben a la tarima y empieza a moverse hacia arriba, cuando ya estamos arriba, ya estamos en el desierto y un señor nos dice que pasemos al centro.

—Eres el primero Alexander —me siento en el lugar que me corresponde y el señor me dice que tiene que hacer una tormenta y atrapar los rayos y relámpagos que bajen del cielo.

Eso nunca lo habíamos hecho, solo era con energía utilizable.

El cielo se empieza a poner negro y visualizo a Alex con los ojos cerrados, se empieza a formar un rayo y cuando la nube relampaguea, el rayo cae en sus manos, se tambalea un poco pero logra estar en pie, tienen que caerle 5 rayos en las manos. El rayo que sigue también solo logra moverlo un poco.

Tengo un mal presentimiento.

En un descuido Alex intenta atrapar uno pero se tambalea y cae en el suelo.

—¡Alex! —corro a toda velocidad hacia él, rápidamente se empieza a formar otro rayo en el cielo y corro mas rapido, si le da, lo dejaría inconsciente por unos días.

El rayo sale disparado justo hacia Alex y alcanzo a atraparlo en mis manos, una pequeña bola de electricidad se forma en mis manos y la lanzó hacia otro lado, me agachó hacia Alex y empieza a abrir los ojos.

—Dame un toque —asiento y lo tomó de la mano, la electricidad pasa por mis manos y me separó de él, se levanta y empieza a aparecer otro rayo, me separe de ahí y volví a mi lugar con el corazón acelerado.

—¡Muy bien Alex! —le grita su entrenador.

—Puedes pasar al centro —el señor me hace una seña y yo asiento, camino hacia el centro y elevó mis manos hacia el cielo, clavo mis ojos en el y los cierro.

El cielo se empieza a poner negro y las nubes se empiezan a cargar. Alcanzo a ver como un rayo ya está listo y cuando lo veo caer, estiro mis manos para agarrarlo, siento una presión en mis brazos pero no logra moverme.

Escucho un trueno y veo como dos vienen derecho hacia mí, doblo mis rodillas un poco y puedo sentir la presión otra vez más fuerte que la otra, me tambaleó un poco por la presión y miro hacia arriba.

Otro rayo cae y lo atrapó en mis manos, caigo de rodillas a la arena y veo la expresión de terror de Alex.

Me paro como puedo y cuando veo que el último está listo, estiro mis manos, cae y cuando ya lo tengo en mis manos, me desplomó en la arena y por accidente la cabeza se me entierra en la arena.

Escucho unos pasos correr hacia mí y pongo mis manos a los costados de mi cara, la levanto y siento toda la arena en mi boca.

—¡Que asco! Me comí toda la arena —empiezo a escupirla y escucho las carcajadas de todos, Alex me ayuda a levantarme y caminamos hacia la tarima. 

La tarima se empieza a levantar y Alex y yo nos levantamos sonriendole a la gente, cuando ya llegamos nos sentamos en unas sillas que tienen listas en la tarima y en la pantalla está la repetición de lo que pasó con Alex y conmigo.

—Para no hacer tan largo toda la ceremonia, les diremos quien es el ganador, redobles por favor — escucho como todos empiezan a zapatear y a aplaudir y yo tomo la mano de Alex.

—Y el ganador fue —aprieto la mano de Alex y le sonrió—. Leanna —empieza a salir confeti del techo y me lanzo a abrazar a Alex, me carga y empieza a dar vueltas en el aire conmigo.

—Felicidades tonta —escucho que me dice y yo sonrió.

—Estuviste genial Alex, estoy muy orgullosa de ti —me da un beso en la cabeza caminando aún conmigo cargada y cuando me baja todos los chicos me dan un abrazo grupal.

Todo valió la pena.

*