Eres tan perfecta

Cap.10- Restricción

El sarcasmo es mi única defensa

Rose/Lydia

Todos me miraban sorprendidos, estaba cansada de los secretos, no entendía nada. Mire el cielo despejado en busca de una respuesta, no paraba de temblar a causa del frio, me sentía muy sola al lado de ellos, todos sabían lo que estaba pasando menos yo, y eso era lo peor ya que odiaba enterarme ultima de las cosas.

-Me quiero ir- Dije finalmente. Allison me miró preocupada y asintió, dijo que la esperara dentro y eso hice. Volvió con el coche, no tengo idea de donde lo saco pero no me importaba solo quería irme.

Al llegar a mi casa, Allison suspiró y se tapo la cara, luego de unos segundos, respiro profundo y me miró. -Necesito que prometas que no diras nada de lo que paso-

-Prometo no decir nada de lo que paso si tu me dices ¿¡Qué demonios paso!?- Exclamé bastante molesta.

-Es... es un poco complicado- Dijo nerviosa.

-Bueno qué tal si me dices ¿Qué hacia Derek ahí? o ¿A dónde se fue Jackson? o ¿Qué le pasa a Erica? Y Isaac, ¿Por qué estaba desmayado?- Dije esperando una respuesta sincera de su parte pero lo único que hizo fue agachar la mirada y se quedo pensativa -Oh lo siento ¿Necesitas un momento para inventar algo?-

-Una de las razones por las que te lo pido es porque Scott y yo no deberíamos estar saliendo así que es mejor que guardes el secreto y todo lo que sabes- Dijo preocupada por su relación, últimamente todos lucen indiferentes al dolor ajeno.

-Bien- Suspiré -No diré nada de tu novio y de ti, pero no sé nada de todos modos- Dije abriendo la puerta del coche pero solo logre bajar un pie ya que Allison me detuvo poniendo su mano en mi hombro.

-Escucha, no solo es mi novio ¿Entiendes eso?- Dijo con los ojos cristalizados.

-Me quiero ir- Dije cansada.

-Solo por un según intenta recordar...-

-¿Recordar qué?

-Recordar como se siente... todas las veces que lo ves en el pasillo, no respiras hasta que estas con él... o las veces en clases que no dejas de mirar el reloj porque sabes que él esta afuera esperándote- Dijo con una sonrisa sincera -¿No recuerdas cómo se siente?-

-No- Dije simplemente, ¿Cómo no recordar lo que sentía por Dimitri? Pero hoy, después de todo lo que pasó me pregunto si todo lo que sentí por él era real o tal vez era simplemente una fantasía por alguien mayor que yo... Me pregunto si él en realidad me amo.

-¿Cómo puedes decir que no? Has tenido novios- Dijo sin poder creerlo.

-Ninguno así- Dije y bajé del coche dejándola sola. Al entrar a la casa, las luces estaban prendidas y había una caja grande en el medio de la sala, esta tenia un moño grande. De la cocina salió Natalie con una gran sonrisa. -¿Qué es esto?- Pregunté dejando mis cosas a un lado. Me saqué los zapatos, quedando descalza, se sentía bien después de tanto llegar a casa

-Un regalo para vos, de parte de Abe- Sonrió emocionada, fruncí el ceño y me acerque a la caja, me arrodille junto a ésta y agarré una carta que estaba junto al moño. Feliz cumpleaños, decía con una letra muy linda.

-Pero hoy no es mi cumpleaños- Dije confundida.

-Lo sé, tal vez se adelanto con los regalos- Dijo encogiéndose de hombros, tal vez tenía razón o tal vez era un forma de pedir perdón. Abrí la carta y comencé a leerla.

El día de hoy nació una persona importante, amada y respetable, por eso celebramos su cumpleaños. Ah y también naciste tú. Estas envejeciendo... así que diviértete mientras puedas. Disfruta tu regalo que te lo da el mejor padre que pudiste haber tenido.