MARCEL
— ¿Recuerdas que me dijiste que nadie saldría lastimado?— acaricié el cabello de mi primo que se encontraba en mi regazo.
—No contaba con que el lastimado sería yo.
—He estado pensando en el tema... y tengo un plan.
— ¿Me recuerdas por qué tengo que asustarme siempre que resultas con tus planes?
—Vas a salir ganando. Concentraté en eso.
—Cuando aposté contigo... creí que ganaría... mi suerte va de mal en peor.
—La apuesta fue algo tonto e inmaduro...
Él se levantó y me tomó de la barbilla.
—Marcel, si no hubiésemos hecho esa apuesta, justo ahora yo estaría en la casa de una jodida prostituta. Y tal vez ya hasta tuviera VIH, — trató de hacerme reír — Marcel, si no hubiéramos hecho esa apuesta, nunca hubiera descubierto lo que significa: amor, quizá nunca sabría lo que es querer de verdad a una persona... no desearla, quererla. Me enseñaron a perseguir mis sueños, pero yo no tenía uno. Esta apuesta cambió mi vida... y te lo agradezco.
—Eres un jodido cursi, ¿sabías eso?— lo abracé —Pero enserio tengo un plan.
Saque una hoja blanca doblada de mi bolsillo y se lo mostré. Él lo leyó con atención y asintió no muy convencido.˜***˜
NICOLÁS
—Juro que meses atrás nunca hubiera aceptado hacer esto.
—Bueno... dicen que los actos valen más que mil palabras ¿o no?
Llegamos a la escuela, y de lo único que estaba seguro es que no estaba listo para hacer esto.
El plan de Marcel, como todos, está friamente calculado, hasta el último detalle, y si algo hacia mal, todo se arruinaría. Mi prima es una jodida genia del mal.*No. 1: Date cuénta de cómo es su relación:
"Persiguélos, espíalos, has lo que tengas que hacer para darte cuenta si "C" está totalmente feliz con su novio. Ojo: si cuando los veas sientes ganas de vomitar, estás en terreno peligroso".
Y ahí es cuando entro yo. Estacioné el Jeep al lado del Challenger de Alexis, y esperé afuera de la escuela "hablando" con el equipo de soccer, sobre el último partido de la liga. El BMW no tardo mucho en llegar, me disculpé con los chicos diciendo "que se me había olvidado un cuaderno en el Jeep" y aproveché para poder ver cómo es que Charlotte y Carlos, se despedían. Él estaciono el auto y se bajó para abrirle la puerta a MI Charlie. Hace tiempo que no la llamaba así. Él le entregó su mochila y se despidieron con un beso. Bah, maldición. No es tan peligroso, pero sí riesgoso.
*No. 2: Habla con ella acerca de "él".
"Tienes que hacer resaltar a la luz si lo que se ve por fuera, se siente por dentro. Cuidado: No la bombardees de preguntas estúpidas o algo por el estilo".
Después de que vi a Carlitos alejarse en su flamante auto, me acerque a Charlotte.
—Hey, hola Charlotte ¿cómo estás?— saludé.
—Hola Nicolás, muy bien, gracias. ¿Qué haces por acá?
—Oh, acabo de llegar, y te vi... ¿te acompaño?
—Claro... por qué no.Y ahí es cuando entran las verdaderas preguntas.
— ¿Carlos te trae todos los días?
—Sólo cuando entra una hora más tarde de lo normal.
—Ohhh, qué bien. ¿Y cómo te va con él? Hace un buen tiempo que no hablamos... de nuestras... cosas.
—Am, pues, con él todo ha salido bien, va de maravilla... el otro día fuimos al bosque... a la cascada con Eduardo y ellos. ¿Puedes creer que a Carlos también le gusta salir en moto como a Josh?
Jódeme.
— ¿Enserio? ¿Entonces se llevaron bien?
—Exelente.
Aghh.
—Me alegro.
Ojalá se hubiera estrellado contra algo y hubiera quedado sin cara, el muy bastardo.
*No. 3: Asegúrate de que le gustes tan sólo un poquitín.
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¿Apostamos?
Teen Fiction—Esto será sencillo. Y después descubrirás por ti misma primita, que un hombre como yo no cambia, hombres como yo no nos fijamos en ese tipo de chicas. —No estés tan seguro. Charlotte Gómez: el objetivo. Nicolás Western: el apostador. Marcel Col...