Gloria, Honor y Sangre!!! La caida de los Dragones.

Batalla de los Barbarrojas II.

Esbirro de Rayleigh.

¿Como seguimos a este hombre ? Si lo seee me refiero a nuestro señor Rayleigh, lo se estamos locos, perdidos, enloquecidos, degenerados y dementes, excluidos del mundo como herejes, como malditos, como parias, cuantas veces habre escuchado que huimos, corrimos, escapamos, el mundo es demasiado perfecto para nosotros los imperfectos, me gusta pensar que estamos rotos, siempre he estado roto, y me que he quebrado infinidad de veces, excomulgados o bajo anatema no encontramos refugio en ningun lugar sobre la tierra, cargamos nuestros pecados, nuestros defectos o nuestras maldiciones.

Cual es mi historia no es como las oleadas que cuenta Rayleigh, cambiantes y sin forma como el mar ya que el es oceano puro: un dia fue rey en otro un pescador, en una desposa a la hija màs hermosa de Neptuno a la otra tuvo un hijo monstruoso con un Kraken, mi historia es fija soy como un pedazo de arena que solo tiene una voz, esta es mi voz.

Yo era hombre que se enamoro de una pequeña costurera, yo era comerciante de un padre noble, preferi las matematicas y negocios a pelear contra 5 hermanos por tomar el poder de la casa, asi que cuando la vi lo supe me enamore, yo era tan ingenuo, teniamos una dinamica, yo salia a largos periodos de viaje y ella en casa, tuvimos una hija que se le parecia era el hombre màs feliz del mundo.

Pense que la diosa Fortuna habia sido buena conmigo muy buena conmigo ya que siempre tuve lo que quise desde niño, evite peleas con mis hermanos y hermanas con las que em lleve bien, los negocios eran buenos, fue cuando compre un cargamento de especias, iria a inglaterra, pero mi fortuna hizo que vendiera apenas en el primer puerto donde atracamos se lo vendi todo a un Colombiano al doble del precio que tenia en mente y regrese inmediatamente.

Cuando regrese a casa, entre por la puerta detras, estaba tan entusiasmado que entre por la puerta detras, pero vi a esa perra, mientras me engañaba gimiendo y gritando, nuca habia tenido esa reacciòn conmigo, busque rapidamente en mi ropa un cuchillo, cuando iba entrando, ellos estaban muy concentrados contra la pared, ella sosteniendose mientras el la embestia.

-que tal esta ese idiota criando a mi hija- dijo simultaneamente tomaba una de sus piernas y la levantaba por el aire.

-Oh siiii, oh siiiiii, la......la la.... cuida........bien....- al enterarme que mi hija en realidad era una bastarda fue lo ultimo que necesitaba, el hombre no sintio el cuchillo hasta que ya era demasiado tarde, mi queria zorra se volteo enojada que de repente el se haya detenido su cara de horror fue una sonrisa para mis labios, la golpee y luego me puse encima de ella, siempre ella estaba arriba, pero ese dia no, le apuñale una y otra vez.....y otra vez, hasta despedazarle su hermoso rostro, Nemesis eres tan cruel, asi que esta era mi fortuna, -no necesito de los Olimpicos......- grite mi destierro de los campos Eliseos, unas esclabas huyeron y tome una antorcha, deje un mar de fuego, no hice caso de los sollozos de la bastarda no merecia vivir, al final no se si fue si el crujido de la madera o el fuego que la consumio la callo, pero eso no significaba nada para mi, hui con sollozos y tambien hastio de mi propio crimen.....mate a la mujer que amaba y mate a la hija que tanto amaba.....donde podria encontrar lugar en este mundo.....podria sentir a las furias correr detras de mi, buscando justicia por mi matanza...¿pero es que no merecia yo retribuiciòn de su traiciòn?

Cai en mi escape de todo lo que conocia hacia un barco que robe a un hombre que mate en mi locura, me dirigi al mar, estaba enloquecido con las imagenes de mi venganza, la lluvia cayò en mi cara, el viento mando el pequeño barquito en medio del mar, quede atrapado en medio del mar inclemente.

Y en medio de aquella perdiciòn.... los vi, a los nuevos dioses.....2 Reyes del Mar, peleando por la soberania sobre los oceanos, uno con tentaculos y cabeza de tiburon, el otro lleno de escamas parecido a un reptil con forma humana pero con crestas y garras afiladas, peleaban sus pequeños movimientos creaban huracanes, provocaban gigantescas olas, hacian temblar al mundo, el viento surgia de ellos en su duelo, se lastimaban se arrancaban y se mataban......