Gloria, Honor y Sangre!!! La caida de los Dragones.

Planes para mañana.

-Puede decirme que paso-dijo con calma Samuel Maharero, que miraba el cielo con calma, alrededor hombres de ascendencia europea y de tez blanca lo rodeaban, pero el era negro, de ascendencia herero, su pueblo suprimido por los alemanes que sometian a su naciòn, pero a pesar del clasismo y supremacismo de los europeos en la idea de que eran superiores, todos esos hombres que le rodeaban le eran leales, le servian con devociòn y reconocian en el un genio militar sin igual.

Los hombres alrededor se miraron, no entendian el genio del hombre, un hombre que estudiaba a perfecciòn cada minuscula cosa que encontraba del enemigo, arte, literatura, musica, filosofia, cultura, geografia, lengua, historia y tacticas militares, era un hombre que intentaba comprender a los enemigos que enfrentaba.

Si alguien le preguntaba, simplemente habia refinado las habilidades de su naciòn, los herero cuando mataban a sus enemigos tomaban sus ropas y adquiran sus habilidades y poder de los muertos* (Los Hereros hicieron esto en la rebelion de 1904-1907, en la idea de que al tomar los uniformes alemanes les transferia el poder de sus enemigos).

El en cambio tomaba todo de sus enemigos, lo igualaba, lo analizaba y lo explotaba a su favor, pero esa minuciosidad se complementaba con su genio militar.

-Grupos de jinetes germanos atacaron las lineas de comunicaciòn y suministros detras del ejercito-

-No màs de 3,000, caballeria pesada y tambien especialistas en tortura...- comenzo a señalar los lugares donde fueron atacados e incluso investigaron las rutas de escape, que se convirtireron en las posiciones actuales del ejercito Eclipse.

Con calma Samuel escuchaba todos los sucesos militares con una calma prodigiosa, desde hacia horas grupos de mexicanos tanto militares como civiles lanzaban ataques espontaneos, al mismo tiempo de grupos de mercenarios que intentaban enriquecerse y aprovechar el caos.

Escucho mientras ordenaba los informes de uno y de otro, mientras en su cabeza unia piezas y tambien analizaba al "enemigo".

-Tal ves deberiamos pedir un ataque contra la posiciòn de los Germanos- proclamo uno de los oficiales-si se nos unen esos asesinos de dragones sera una victoria segura-

-Ese Erick Lidwurd cree que puede vencernos....le demostraremos que no somos faciles-

Samuel sonrio y miro a cada uno de ellos.

-¿Erick Lidwurd?-dijo mirando a cada uno de sus oficiales, aquello era una pregunta capciosa.

-Por supuesto, las tropas enemigas fueron sirvientes de los Lidwurd, estaba el caballo de fuego, el fuego, el fenix y la salamandra-

-Es agradable ver que finalmente estudian a nuestros enemigos-dijo mirando a uno de los nuevos, siempre que llegaban nuevos oficiales brillantes le menospreciaban por el color de su pie, pero una ves entendian que sus metodos les permitian una superioridad en el campo de batalla, rapidamente tocaban su filosofia y la absorvian, pero no tenian su capacidad de analisis y estudio por lo que estaban limitados tacticamente en ves de mirar el campo de batalla de manera estrategica.

-En realidad no lo es-dijo con calma-si hubiera estado ahi, probablemente el campo de batalla seguiria en este momento, en ves de eso, nuestro enemigo tiene una visiòn estrategica muy profunda-

-¿Algun oficial Aleman?- los rostros de hombres y una smujeres le miraban esperando por respuestas.

El Comandante Samuel sonrio, no contesto a sus dudas-Si les dijera no me creerian-

Dijo mientras guardaba silencio, era una ventaja de a veces guardar informaciòn, a veces ordenaba algunos planetamientos tacticos dudosos, o de capacidad nimia, a veces era para mantenerlos alertas, otras veces para controlar el escape de informaciòn, pero hoy era por diferentes motivos, en realidad un solo motivo.