Gloria, Honor y Sangre!!! La caida de los Dragones.

Tarde (Ciudad de Mèxico)

Un golpe y otro golpe, el carruaje avanzaba lentamente, cargar a 3 dragones no era tan sencillo a pesar de tener 6 caballos y el carruaje fuera de oro, en un extremo estaba Alejandra Hasburgo Quetzalcoalt, con sus ojos color miel, y piel blanca su cabello castaño rubio de su padre, abrazada de sus piernas estaba mirando al suelo, sentia culpa por sus sueños y premoniciones, estaba realmente avergonzada por hacer que su familia se alejara de un momento cumbre que habian preparado, era el momento de brillar de su familia y bueno....ella lloro y suplico y una ves obtuvo lo que queria, ahora se resentia tal ves estaba simplemente exagerando y y hundio aun màs su cabeza entre sus piernas.

Sintio una mano tocandole la cabeza, ronroneo y luego miro de soslayo a su hermano que estaba agusto sentado leyendo, desde que habia encontrado a su escritor favorito, le habia ayudado en algunas cosas como conseguirle prometida y darle muchas ventajas...se dio cuenta que era la mejor manera de hacer emerger los dones literarios de su escritor predilecto, tal ves deberia mandarlo a una misiòn o algo para que viera los horrores de la guerra en eso le faltaba un toque de realismo, cerro el libro atrayendo a su hermana, al frente se encontraba la nana de su hermana menor, la unica mujer capaz de cargar a su hermana...y si lo admitia, la chica de 18 años era muy hermosa...pero no le llamaba la atenciòn.

Carlota su hermanita de 2 años dormia mucho, Maximiliano se quedo pensando hubiera preferido quedarse en la capital y tomar las responsabilidades de su padre y dejar que su madre fuera con sus hermanas, pero su madre era terca y tenia su sentido del honor, ella estaria al frente de toda actividad al menos hasta el dia de mañana por la mañana y les seguiria, su padre deberia terminar lo que fuera a hacer y estar lejos de la capital esos dias.

Sus abuelos al parecer se les unirian despues de todo, ellos eran Hasburgo no habia nada que temer...y los sueños de su hermana solo hablaban de los dragones, pero se unirian a ellos apenas el Emperador Maximiliano hubiera dado el grito de Dolores rememorando el inicio de la independencia de Mèxico.

Por lo que pensar que pasarian esos dias en Guerrero principalmente en Acapulco al menos hoy llegarian a una mansiòn personal para ellos, resguardados con los caballeros Aguila, Jaguar, la guardia Extranjera de Austria y La guardia extranjera de Bruselas.

Al menos 3000 soldados de elite resguardandoles y al menos con menos tropas no importaba.

-LO siento- dijo su hermana

Maximiliano con un cabello castaño rubio, ojos miel, empezaba a mostrar los cambios de edad, habia tenido un estiron, unos ocasionales pelos aparecian en su barbilla, su rostro se estaba volviendo recia, sus maneras y actitudes tenian encantadas a todas las chicas nobles que esperaban poder desposar al heredero de todo este imperio, aun a pesar de todo, tenia cierta aura de niñez y tambien inocencia, como ausentarse y perderse por horas, hacer lo que le viniera a gana, tenia su pelo ya que sentia que el cabello corto de su padre y abuelo eran muy hasburgo, ademas siempre vestia de uniformes de galas y no las armaduras reales, muy vistosas para su gusto.

Al menos el problema de los asaltantes que seguramente se salieron de control y aprovecharon que todo el ejercito estaban en zonas donde transitaban miles de personas habian permitido que zonas aisladas se convirtieran en objetivos faciles, seguramente este año deberia de llegar al campo de batalla.

Una responsabilidad que no tenia ningun interes.

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Un dolor de culo era eso lo que tenia en mente, trabajar en dia feriado era lo peor que le podria ocurrir, mucha gente, un caos, gente ebria, gente que se creia con el derecho a exigir, peleas, discusiones, si arrestaban a alguien la poblaciòn local comenzaria a arrojar objetos y mostrar agresiòn, lo peor el evento era tan grande y tan masivo que toda la guardia de la ciudad estaba reunida y con una paga cuadruple, lo cual era bueno a los bolsillos porque calculaban que cuando toda la euforia se fuera, todo estaria màs barato y tendrian bastante dinero en sus bolsillos.