UN SECRETO A VOCES (Ragoney)

Tal para cual

Me despierto, desayuno, me ducho, me visto y voy a casa de Raoul. Voy conduciendo y empieza a sonar en la radio "Ya no quiero na". Recuerdo el momento tan comprometido en el que conocí a la chica que está sonando ahora en los altavoces de mi coche y lo absurdo de la situación hace que suelte alguna que otra risa tonta. Finalmente, llego a casa de Raoul. Me planto por última vez frente a esta puerta y llamo al timbre.

Ra: *abre la puerta* hola, Mickey
Ago: hola, pollito, Dios, no te vas a creer lo que me pasó ayer, llegué media hora tarde al trabajo porque vine aquí *empieza a reírse* se me olvidó que no teníamos sesión
Ra: *ríe* pues no te lo vas a creer tú tampoco pero a mí también
Ago: *riendo* qué dices? En serio?
Ra: sí, deberías haber visto la cara de mi hermano cuando vino a buscarme y seguía en pijama
Ago: qué heavy
Ra: ya ves, si es que somos tal para cual

Nada más pronuncia estas palabras, ambos desdibujamos las sonrisas que teníamos en nuestros rostros.

Ra: perdón, pasa
Ago: no importa

Me meto en su casa y, como ya es costumbre, preparo mi cámara.

Ago: esto se acaba *sonríe nostálgicamente*
Ra: sí...
Ago: bueno pues hoy toca la portada, así que ya te estás quitando la camiseta *ríe*
Ra: joder, qué directo
Ago: *riendo un poco avergonzado* no me seas cabrón
Ra: *ríe*

El rubio me hace caso y se quita la camiseta. Empiezo a hacerle fotos.

Ra: oye
Ago: *haciendo fotos* dime
Ra: la cicatriz...
Ago: tranqui, la tapo con la magia de la edición
Ra: *hace una mueca* gracias
Ago: no las des

Le hago un par de fotos más. Ya está. Esta es la última foto que le voy a hacer. Joder aún me dará pena y todo...

Ago: pues esto ya está, pollito
Ra: ya?
Ago: sí

Los dos nos quedamos mirándonos en silencio sin saber muy bien qué decir.

Ra: *señala la cámara* puedo verlas?
Ago: *se la da* claro

Raoul empieza a pasar fotos, esta vez no sonríe, se mantiene serio. Tan mal están?

Ago: te...te gustan?
Ra: sí, claro que me gustan *esboza una sonrisa* haces unas fotos increíbles
Ago: pero esa cara no es de que te guste lo que estás viendo
Ra: es que no me gusta, supongo
Ago: el qué?
Ra: mi cuerpo
Ago: estás de coña, no?
Ra: *niega con la cabeza*
Ago: Raoul, estás buenísimo

No sabría decir cuál de los dos está más rojo ahora mismo pero prefiero no saberlo.

Ra: o...o sea, no me refería a eso. Me gusta mi cuerpo en ese sentido pero esa puta mancha...
Ago: qué pasa con ella?
Ra: es que.. *sonríe falsamente* da igual, déjalo, pero gracias, supongo

Joder. Estuvo a punto de contármelo, ahora me voy a ir de aquí sin saber de qué coño es esa cicatriz y por qué le afecta tanto tenerla.

Ago: Raoul, eres guapísimo y estás bueno, una mancha de mierda en tu cuerpo no importa nada
Ra: *a punto de llorar* es que no lo entiendes
Ago: *acariciandole el brazo para consolarlo* pues explícamelo
Ra: no necesito explicarlo, necesito olvidarlo
Ago: y hay algo que yo pueda hacer?
Ra: sí
Ago: y qué es?

Raoul se abalanza sobre mí y me besa. La verdad es que no me lo esperaba. O sea, esto lleva sucediendo desde el primer día, pero no me lo esperaba ahora. Aunque obviamente no voy a negarle nada. Esta vez es diferente, esta vez hay compasión, empatía, comprensión... incluso cariño? No sé, pero cuando se meten los sentimientos en el juego, la cosa no puede acabar bien.