UN SECRETO A VOCES (Ragoney)

Mario Kart

Le beso, me besa, nos besamos... Me quita la chaqueta que me ofreció hace unos minutos y la arroja al suelo. Me acuesto en el sofá esperando que él me siga, como de costumbre. Pero no pasa lo que yo deduzco.

Ra: qué haces?
Ago: no... no lo sé?
Ra: ven

Me coge del cuello de la camisa y, después de meterme la lengua hasta la campanilla, tira de ella para dirigirme escaleras arriba. Ahora sí que parezco literalmente su cachorrito faldero como dijo Ana. No sé dónde me lleva, solo estuve en el piso de abajo así que esta parte de la casa es territorio desconocido para mí.

Ago: dónde me llevas?
Ra: a la habitación
Ago: y eso?
Ra: estoy hasta los huevos de ese sofá, es incómodo y luego me duele la espalda *ríe*
Ago: *riendo* vale

Volvemos a besarnos, esta vez, se permite el lujo de morderme el labio antes de separarnos, algo que hace que suelte un intento de ahogar un gemido que no acaba saliendo muy bien. Vamos a trompicones y nos chocamos varias veces con las paredes y algunos muebles que pillamos por el camino.

Ra: joder, vamos a hostias *lo vuelve a besar*
Ago: *bromeando* es que esta planta no me la conozco, dame unos días para memorizarla
Ra: *ríe* los que usted quiera

No sé realmente cómo tomarme esto, pero no estoy para pensar. No quiero rayarme ahora y, de todos modos, aunque quisiera pensar, el rubio no está por la labor de dejarme hacerlo.

Ra: *abre la puerta de la habitación* está hecha un asco, espero que no te importe
Ago: porque no viste la mía...

Nos adentramos en su cuarto, mientras nos dirigimos a su cama, nos vamos quitando la ropa. Cuando Raoul me tira encima de ésta, ya solo me quedan los calzoncillos y a él, tres cuartos de lo mismo.

Ra: en serio, Mickey? Calzoncillos de Mario Bros?
Ago: yasss, te tiras a un friki, asúmelo
Ra: oye, no te vengas arriba que estás hablando con el campeón del Mario Kart
Ago: y una mierda, seguro que te gano
Ra: mañana, una carrera, la Senda Arcoiris, quien gane se proclama campeón
Ago: vale, pero yo soy Yoshi
Ra: venga, trato hecho

Nos damos la mano para sellar el trato y, aprovechando la situación, tiro de él para hacer que Raoul caiga sobre mí en la cama. El rubio se coloca a horcajadas sobre mí. Con sus manos me sujeta las muñecas por encima de la cabeza inmovilizándome por completo. Sus labios empiezan a dejar besos húmedos por todo mi cuerpo. Quiero decirle todo lo que siento, necesito que lo sepa, pero tengo tanto miedo de su reacción... Y si no me quiere volver a ver jamás? Y si se ríe de mí? Joder, dije que no iba a comerme la cabeza y no lo voy a hacer. Raoul baja poco a poco por mi cuerpo, liberando mis manos, ya que al ser un enano, si sigue bajando no le llegan los brazos a mis muñecas. Con gran velocidad, se deshace de mis calzoncillos de Mario Bros, arrojándolos al suelo de su desordenada habitación. No pierde el tiempo y empieza a juguetear con mi pene metiéndoselo en la boca.

Ago: *gimiendo* pfffff... madre mía, pollito...

Raoul aumenta el ritmo de su mamada hasta que acabo corriéndome.

Ra: avisa, capullo
Ago: sí, en eso estaba pensando yo...
Ra: *ríe*

Yo ya he acabado, pero él no. Hace que me dé la vuelta y, cogiéndome por las caderas, consigue que me quede con el culo en pompa. Oigo como desenvuelve un plástico, supongo que será un condón, y en nada, noto la punta de su miembro rozando mi entrada.

Ra: voy, eh?
Ago: cuando quieras

Y simplemente, lo hace. Vuelve a introducirse dentro de mí como tantas veces hizo ya. Ambos gemimos de placer mientras el rubio sigue embistiendo. Primero lentamente y con cuidado pero cada vez se anima más. Como no quiero gritar en exceso, muerdo la almohada, pero realmente no sirve de nada porque sigo emitiendo sonidos desgarradores con la garganta. Aunque sí que es cierto que la almohada los silencia un poco.

Ra: *gimiendo* joder, eso me pone muchísimo

El rubio sigue entrando y saliendo de mí, hasta que, primero él y luego yo, ambos llegamos. Nos tumbamos un rato en la cama hasta que logramos recuperarnos y le ayudo a cambiar las sábanas. Raoul se acuesta en la cama.

Ra: ven *le da dos palmadas al colchón*
Ago: *se acuesta a su lado* qui...quieres que me quede?
Ra: sí, ibas a irte a casa?
Ago: claro
Ra: Agoney, es súper tarde y además tu coche se lo ha llevado Mimi, paso de llevarte a casa, coger el coche ahora, qué pereza...
Ago: me estás invitando a dormir?
Ra: bueno, yo creo que ya hay suficiente confianza, no?
Ago: su...supongo...
Ra: ale, bona nit *hace un gesto con la cabeza*
Ago: buenas noches

Cada uno se encuentra tumbado en un lado de la cama. Al cabo de unos minutos oigo unos pequeños ronquidos. Ladeo mi cabeza para descubrir a Raoul dormido. Puede ser más guapo? Está claro que no. Giro completamente mi cuerpo para quedar cara a cara con él y así me duermo. Mirando al rubio y con una sonrisa de oreja a oreja. Por cierto, tengo que agradecerle a Ana que se comiera esa tarta.