Hasta que...

XIX. Sentimientos revueltos.

La vida está llena de oportunidades: podemos darle una nueva oportunidad a papá cuando se ha equivocado en la elección de un vestido; podemos darle una oportunidad a los padres cuando han discutido frente a nosotros y dejarnos presenciar tal situación; podemos darle la oportunidad a algún color que jamás hemos utilizado; tenemos la oportunidad de escoger con libre albedrio lo que queramos ser; tenemos la oportunidad de realizar un trabajo que nos guste o nuestra actividad favorita; podemos darle una nueva oportunidad a una amiga que se ha equivocado; podemos darle una oportunidad a los pequeños de la casa luego de una travesura; podemos darnos una oportunidad a nosotros mismos para emendar nuestros errores; Porque sí, tenemos, y podemos dar, muchas oportunidades pero las más importantes, dentro de este círculo sin fin, son las de vivir, soñar, amar y ser amado, perdonar y ser perdonado... Ser feliz.

Si, sé que la vida no es justa todo el tiempo, la mayoría de las veces nos presenta situaciones que nos entristece, destroza y desvanece, pero sólo lo hace con la intención de volvernos más fuertes, valientes y decididos. ¿Pero saben qué? Por esa misma razón siempre debes decir 'YO PUEDO, YO QUIERO, YO LO HARÉ'. Porque la palabra tiene poder, porque los sueños se vuelven realidad y los deseos se cumplen cuando vienen del corazón. Cuando estés abatido y sientas que ya no puedes más, piensa en las cosas maravillosas que también te ha regalado la vida misma: tu familia, tus amigos, tus metas, tus sueños y el por vivir. Piensa en el inmenso amor que puedes dar y de igual manera recibir cuando luego de la adversidad, la tormenta, las injusticias y los dolores llega la paz, la calma, el rendimiento y el perdón. Cuando aceptes que todo tiene un por qué; que lo que se va no era para ti y lo que llega puede permanecer si tú lo permites, lo cuidas, lo amas y dejas que te amen. Y todo esto se resume a que: Todo pasa, el amor todo lo cura y el perdón te libera. Cuando empieces a darte tu oportunidad de vivir, aprenderás que la vida siempre pondrá obstáculos en el camino: circunstancias, noticias, decaídas, faltas pero si luchas por lo que quieres, forcejeas con los troncos en tu paso, sé que podrás decir: Lo logré.

En estos momentos puedo decir que me encuentro en una de esas situaciones en las que la vida no te permite reaccionar, me ha dejado completamente confundida ante tal situación: El que creía el amor de mi vida hace un año ha regresado para recuperarme y a quien conocí no hace mucho me ha confesado su amor por mí; ambos me han pedido la oportunidad de conquistarme, uno de nuevo  y el otro por primera vez. ¡No sé que hacer! A pesar de lo sucedido con Erick, no quiero hacerle daño y mucho menos a Ben: en conclusión, no quiero lastimar a ninguno de los dos. Erick ha sido mi paso por el amor, con quien lo conocí, lo viví, soñé diversidades de veces un futuro con él a mi lado, mi pilar en mis decaídas y mi mejor amigo en su momento. Ben, es guapo, con su carácter un poco contrariado frente a los demás, pero ha demostrado su lado vulnerable ante mi, es un nuevo rumbo que podría recorrer para aumentar mis expectativas en el amor. Su beso me ha confundido por completo, es el primero en mas de un año y, además de eso, el primero que besa mis labios luego de Erick. Mi respiración fue afectada, podría decir que mi corazón se detuvo por un momento cuando lo vi tan cerca de mí y mis manos sudorosas acompañando mis mejillas sonrojadas solo aclaran que en definitiva: Ben me gusta. Sus mensajes me han hecho sonreír, su confesión me dejó anonadada y su mirada prometedora ha hecho crecer una pequeña ilusión en mi, no obstante, mis sentidos para cuidar extremamente mi corazón han salido al flote.

Desde que quede con Ben en ir a desayunar por la mañana, conversar un poco con papá y encerrarme en mi habitación, no he podido dejar de pensar en Erick y que tal vez lo mejor sea ponerlo al tanto de la situación que se está presentando: Estoy conociendo a alguien.

...

Erick:

Después del rechazo que tuve por parte de Sam en su trabajo, había optado por comprar películas y dirigirme a su casa para proponerle una noche como las de hace mas de un año: cuando los sentimientos se notaban sin desdén; como dos locos enamorados, y nadie se había interpuesto ante nuestra relación para arruinarla -Si, con esto quiero hacer énfasis en ella, que arruinó un año de mi vida al no tener a mi lado a Samantha Williams-. De camino a su casa, pensaba en su reacción, quizás me rechazaría de nuevo, me abofetearía y me diría que soy un imbécil, mi chica suele ser muy bipolar a veces: cinco minutos cariñosa y de pronto se convertía en Hulk hecho mujer, pero vamos, es una de las tantas cosas que me encantan de ella.

Cuando me iba acercando, pude notar que una camioneta blanca yacía estacionada en el frente de su casa y al avanzar un poco más los celos y la impotencia me carcomían por dentro al ver los labios de otro apoyados sobre los de ella y aún más cuando no hacía nada para detenerlo. Descubriendo que tengo un autocontrol sobrenatural y dejando que ella misma sea quien me explique luego la situación, seguí mi camino y no me detuve en su lugar. Pero, aún así, no pude evitar que una lágrima rebelde recorriera  mi mejilla. -Así que esto sentiste cuando me viste sobre los labios de otra. Perdóname de nuevo, mi querida Sam-.