XXIX. No te alejes de mí.

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¿Qué hay despues de la muerte? Es la pregunta que se hacen todas las personas a diario. Yo era una de ellas. Ahora que pude ver a mi mamá, y espero que no haya sido un simple sueño, me ha dado una respuesta y es que en el momento en que morimos nos dirijimos a un paraíso donde existe paz y tranquilidad y que desde ahí podremos ver a quienes permanecerán siempre en nuestro corazón, cuidaremos de ellos y le entregaremos señales en sus caminos. Mi mamá ha hecho todo eso y yo lo he podido confirmar. Nos ha amado aún estando lejos sin poder tocarnos y a cuidado de nosotros como siempre lo hizo. Separados pero unidos por un mismo sentimiento; estando una barrera que nos limita y no nos permite vernos, seguimos tocando el mismo corazón que vive latiendo por el amor. Siempre vamos a amarla, así como ella a nosotros y sé, que algún día, cuando Dios ya decida por nosotros, nos volveremos a ver para seguir siendo la familia que éramos. Seguiremos siendo felices los 5.
...
Me dirigía a la universidad, habían pasado muchos días y aunque permanecerían por unos días más ciertos golpes en mi cuerpo, no me impedirían volver a clases y recuperar mis actividades. Seguía asustada, si, porque la llamada y la manera en que ocurrió mi accidente a todos nos parece extraño e incluso al cuerpo policial que ya ha estado investigando. Sin embargo, no hemos dado con nadie y no tenemos sospechosos.

Los chicos me saludan al verme llegar, realmente se les nota que estan contentos por mi regreso a la universidad y como si me hubiesen extrañado en la misma. Ben, me mira desde su asiento con cara diferente, imagino que debe ser porque antes del accidente la cita que tuvimos fue una de las mas lindas que he tenido y luego estando en el hospital no quise recibirlo en ningun momento. Entiendo su molestia, tendría que hablar con él y aclarar las cosas luego cuando nos quedaramos solos, que estaba segura los chicos lograrían eso.

-Al fin, la más bella en toda la universidad ha vuelto a empalagar mis ojos con semejante belleza- dijo David estrechando sus brazos para darmenun abrazo pero no sin antes que Nat le diera un codazo.

-¿Y yo qué? - preguntó Nat con tono ofendido.

-Pues tu también eres la más bella de la Universidad y del mundo para mí, muñeca - ¿Qué pasó y por qué no me enteré antes?

-Tenemos tantas cosas que hablar Samantha Williams - dijo Nat justo cuando se acercaba a David para abrazarlo. No me molesta que este con él, la verdad me agrada que esté con alguien y pueda por fin olvidar a aquel viejo amor, ya necesita a alguien mas que pueda estar para ella y apoyarla en todo así como lo hago yo.

-Supongo que si, luego nos pondremos al día- le respondí mientras le hacía un guiño.

Los demás chicos también se acercaron para abrazarme y no dejaban de decirme que se encontraban felices porque nada malo -o que gracias a Dios no pase a otra vida- me había pasado. Ben simplemente seguía observandome desde su lugar. Hice un adén para que los demás entendieran y nos dejaran solos para poder conversar, no me gustaba que me viera con esos ojos como si fuera lo peor de su día.

-No necesitas decirle a los chicos que se alejen, Samantha, creo que tu no tienes nada de que hablar y me ha quedado claro -sentenció.

-Te equivocas, si tenemos de qué hablar. Lo siento, si no te recibí en el hospital fue porque realmente no quería que me vieras así, como estaba. Nuestra cita fue perfecta Ben, no me había sentido así desde hace mucho tiempo, pero en estos momentos me encuentro confundida por...

-Porque él ha vuelto a aparecer en tu vida. Lo sé, ya sé quién es Erick, el chico que te hirió y por él que una vez te vi llorando en aquel bar.

-No es lo que piensas... -logré decir, seguramente papá o Nat le habían contado todo.

-Fue tu primer amor, el chico que estuvo contigo cuando más necesitaste cariño y alguien que te apoyara incondicionalmente. Esta bien que te sientas confundida porque ha vuelvo quien fue tú primera relación y con quien llegaste a compartir momentos que quizás puedan ser inolvidables, y porque un chico, yo, que se encuentra enamorado de ti, ha intentado ganarse tu corazón. No quiero presionarte Sam, lo que tu decidas para tu vida estará bien para mí si eso te hace realmente feliz.

-Eres perfecto ben- dije, una sonrisa sincera se formó en mis labios mientras tomaba una de sus manos con la mía.

-Sólo quiero pedirte una cosa Sam.

-Dime- contesté de inmediato.

-No te alejes de mí -dijo, mirándome a los ojos y podía ver que sus sentimientos eran reales a través de ellos. Tener un corazón roto y uno formándose no es nada fácil.

-No lo haré- logré contestar. El se levanto de su asiento, pensando que se iría yo hice lo mismo, pero me sirprendió cuando me tomo de la mano y me pegó a él para abrazarme, yo lo recibí y correspondí a su abrazo, después de todo, quería a Ben, pero no tenía claro cuales eran mis sentimientos y la preferencia de mi corazón.

...

Ben.

Definitivamente decirle a Sam que no se alejara de mí, fuese cual fuese su decisión, fue lo más duro y valiente que pude decir alguna vez. La quería, de eso estaba totalmente seguro pues mi corazón la había elegido a ella como la chica que gobernaba en el pero en estos momentos el suyo no tenia claro sus sentimientos y comprendía que esto también sería fuerte para ella. Por esa razón no he querido decirle nada que pueda hacerla sentir aún mas confundida, solo se aue no la quiero lejos de mí y mucho menos no saber como está. Necesitaba saber de ella aunque no fuese conmigo con quien quisiese estar.
...
Terminaron las clases, me fuí al estacionamiento para buscar mi coche y salir de la universidad, me reuniría con alguien que me había citado para poder hablar y dejar todo claro. Espero que las cosas se den como pienso y no se escape de nuestras manos, o no terminarían nada bien.

Hasta que...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora