¿Había otro Spider-Man? Esa pregunta no dejaba de rondar en mi mente mientras miraba al chico frente a mi. No llevaba su traje, era un chico común y corriente, tanto como Gwen y yo, sólo que en su rostro no había sorpresa ni nada, sólo una sonrisa algo nerviosa.
—Hola, chicos —dijo, llevándose una mano a la nuca—. Supongo que esto es algo muy extraño para ambos, sobre todo para ti, Peter.
Lo miré, y agradecí llevar aún puesta mi máscara por qué de no haber sido así, mi expresión lo hubiera confundido.
Gwen se dio cuenta de mi congelamiento, así que como siempre, fue ella quien rompió el hielo.
—Hola, Miles —se quitó la máscara sin titubeos y había una gran sonrisa en su rostro—. Yo soy Gwen Stacy.
—Lo sé, mi padre trabajó con el tuyo —se encogió de hombros, pero después reaccionó—. Bueno, antes de... tú sabes...
Ella definitivamente no sabía que su padre murió unos meses antes que ella, así que abrió la boca para decir algo pero fue interrumpida por Porker.
—Miles es un chico que llevo visitando durante un tiempo —se apresuró a decir el cerdo—. También tiene poderes y creo que nos podría ser muy útil si esto se llega a poner feo.
Poner feo... poner feo... ¿a qué se refería? Lo único que se había dignado a decirme era una advertencia acerca de un peligro inminente para mi y para Gwen, pero ni siquiera eso había explicado con claridad.
—¿Qué se podría poner feo, Porker? —me quité la mascara para que pudiera ver mi rostro y el coraje que se reflejaba— No nos quieres revelar mucha información pero de repente nos traes con otro chico araña que podría ser útil para lo que sea que esté sucediendo.
Gwen puso su mano en mi hombro y en cuanto la miré a los ojos, todo el sentimiento negativo se esfumó. En ella siempre había podido encontrar paz y tranquilidad, sus ojos enormes reflejaban paz. La comisura de sus labios se levantó en una pequeña sonrisa de lado.
—Peter, ¿podríamos hablar a solas un poco? —preguntó, aunque parecía como si la pregunta estuviera dirigida hacia Miles y Porker.
—Iré a la cocina por un poco de limonada para todos —anunció Miles mientras se levantaba—. Vamos, Porker.
Ambos caminaron hacia la puerta de la habitación y el cerdo se alejó cerrando la puerta tras el, no sin antes dirigirnos una mirada que no supimos descifrar.
Gwen suspiró y se sentó en la cama de Miles, poniendo su mano junto a ella para indicarme que tomara asiento ahí también.
—¿Qué ocurre, Gwen? —pregunté mientras me sentaba. Ella me miró divertida— ¿Qué?
—Peter, cariño, ¿qué ocurre contigo? —su tono de voz era suave, pero no como si quisiera tratarme como un bebé, sino más bien para hacerme saber que podía confiar en ella. Era el mismo tono de voz que mi Gwen Stacy usaba siempre en situaciones así.
La miré y me perdí en sus enormes y verdes ojos. Era hermosa, cada centímetro de ella era una obra de arte. Las puntas de su flequillo que se enredaban con sus pestañas, sus ojos verdes y las pequeñas manchas azules en el iris, las pecas que cubrían sus mejillas y nariz, así como su rubor natural y los labios rosados.
Mis ojos se detuvieron en sus labios.
Me acerqué a ella y tomé su mejilla con una mano mientras que apoyaba la otra en su pierna.
—Peter... —susurró al cerrar sus ojos. Nuestras narices se rozaban y nuestra respiración se combinaba—. No era por esto que pedí privacidad...
ESTÁS LEYENDO
I couldn't save you || Spider-Gwen x Spider-Man
Fanfiction"Todos merecemos una segunda oportunidad" ¿Qué se hace cuando crees haber perdido a alguien para siempre pero el destino los vuelve a unir? Gwen Stacy creía que después de la partida de Peter ya jamás podría recuperarse. Nada sería igual y se las h...