Episodio 14

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Advertencia
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El siguiente Episodio puede resultar no apropiado para todos los públicos adultos. Si el tema de la autolesión no es tu fuerte, deberías saltear este episodio antes de su final.

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Salí corriendo de casa de Emily, con solo un pantalón puesto. Totalmente destrozado, he perdido la persona, con la que tenía oportunidad de curarme... he perdido todo por tu culpa. Maldita adicción.

«Dominick...»

Comencé a respirar de prisa. Ya creo que voy entendido lo que sucede, mi adicción me controla, y lo está logrando por completo...

«Follar...»

—¡¡Cállate!! ¡¡Cállate!! ¡Te odio! ¡Me odio! —gritaba mientras me golpeaba la cabeza una y otra vez, desesperado. Salí descalzo, el frío del pavimento se metía por mis pies y recorría por mi cuerpo. Se oían truenos, mi cabeza gritarme más de una vez.  Salí corriendo, dejé la moto, nada valía la pena. Corría sin parar, aún sintiendo cansancio, no me detenía. Justo ahora quería morirme.

«Dominick... Hazlo...»

—¡¡AGGHHH!! —grité cayendo de rodillas en la carretera. Ese señor volvía a mí, me iba a golpear y me moví de rodillas, asustado, escapando de esa imagen en mi cabeza.

—¡Dominick!, ¡Dom! ¡Para ya!... ¡Soy yo, Ethan...! —me gritó, sacudiéndome por los hombros.

—¡Aléjate! ¡No me golpees! ¿Qué quieres de mí? ¡Déjame en paz! —gritaba a la nada, desesperado. Oía gritos de Ethan, pero no los entendía. Me pegó una bofetada y reaccioné mirándolo a los ojos, con la mirada asustada hacia él, nervioso, temblando. Él me miraba inexplicado, sin entender lo que pasaba.

—¿Qué...? ¿qué te pasa tío? —me preguntó, atónito.

Bajé la mirada, frustrado. —Me quiero morir.

—¡No digas eso!, ¡Basta Dom!—me gritó abrazándome como a un niño, dejando su barbilla sobre mi cabeza. Comencé a llorar sin parar.

—Volvamos a casa, me explicas allá ¿Vale?

—La perdí. La perdí hermano, no puedo hacer nada bien, ¡Joder! —me lamentaba, enojado conmigo mismo.

—¿Es sobre Emily?-asentí con la cabeza-. Vamos, venga. —me ayudó a ponerme en pie, con nervios.

Volvimos a casa de Ethan. Sus padres estaban allí, no me digné a saludarles, solo fui directo a la habitación. Ethan corrió detrás de mí, me tiré sobre la cama de golpe llorando, agarrando la almohada tan fuerte como podía. Ethan se sentó junto a mí y puso su mano sobre mi espalda.

—Venga tío, no estés así... cuéntame lo qué pasó.

—Soy un mierda tío, me odio. ¡Soy un jodido adicto al sexo incontrolable! —le grité como pude. Me sentía horrible, pesado, odio hacia mí.

—Joder. se calló un momento—. Pero... ¿no puedes encontrar a alguien más?

—¡Eso jamás pasará! ¡Jamás! —grité subiendo la cabeza, imperativo, desesperado—. Lo he perdido todo... ¡¡TODO!! —vociferé, volviendo a poner mi rostro sobre la almohada, llorando.

DOMINICK © ✅  [#PGP2024]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora