Episodio 20

539 62 22
                                    

Participación estelar:
Aarón Díaz

Después de lo que pasó en el parking el otro día, decidí llamarlo.

—Hola. —dije tartamudeando.

—¿Quién eres? —preguntó.

—Soy el chico con el que tuviste sexo el otro día.—respondí nervioso.

—Oh, aquel chico... ¿Dime?—se notaba alegre.

—Me gustaría verte.—respondí.

—Claro. —dijo.

Me dio su dirección de su casa y me colgó. Si os soy sincero creo que me ha gustado, me ha gustado él, su forma de hacerlo es totalmente distinta a las demás.

Me visto elegante y me puse camino hacia su casa, me sentía nervioso, no sabía qué hacer cuando le viera, la ultima vez que le vi le estaba chupando su pene y dejando que me hiciera suyo.

Me quedé atónito cuando vi su casa, es enorme, eso significa que maneja dinero. Me acerqué con cuidado y llamé a la puerta.

Aquella persona me abrió, me sonrió y me beso en la boca.

—Hola. —me dijo.

Me invitó a pasar, seguía alucinando cada paso que daba, tenía cosas carisimas, muebles de todo tipo y sobre todo su cara era súper espaciosa.

—Me llamó Steven. —me sonrió.

—Esto... Yo soy Dominick. —le dije nervioso.

—Follando no te pones nervioso. —dijo riéndose.

Me besó y me agarró del culo, me tiró sobre el sofá mientras me besaba el cuello. Me estaba excitando bastante mientras me besaba con pasión.

Me empezó a quitar la ropa mientras que yo hacía lo mismo, de una forma desesperada y rápida nos quedamos desnudos. Observé como su cuerpo estaba bien formado y su pene no era tan pequeño como pensé.

Me la introduje de una, sin lubricante ni saliva en el. Steven grito mientras me arañaba la espalda.

—¡Joder! —gritaba más de una vez.

Estaba cabalgando sobre su pene mientras que Steven me besaba con pasión. No sé qué me pasa pero cuando estoy excitado no soy yo, me convierto en otra persona.

—Sigue follándome así de duro pequeño. —me susurró al oído.

Gemí cuando me dijo pequeño, mientras que aumentaba el ritmo. Se notaba que Steven era principiante en esto del sexo.

Estábamos tan excitados y teníamos tantas ganas de hacerlo que no duramos mas de 10 minutos, me tumbé sobre su pecho en aquel sofá pequeño.

—¿Solo has venido a follar? —preguntó con la voz agitada.

—No, solo quería verte. —le respondí igual que él.

—Oh, eres adorable. —me dijo.

Sonreí sonrojado y me quedé dormido sobre su pecho.

<•>

—¿Te enamoraste de él?—preguntó Pedro.

—No es eso, su forma de hacerme suyo es totalmente diferente a los demás. —respondí.

—Interesante... —dijo mientras apuntaba en su agenda. —¿Eso quiere decir que te gustaba tener sexo con él más que con otras personas?

—Lo que sentía con él, nunca lo he sentido con los otros.—respondí.

Dulce amor.

DOMINICK © ✅  [#PGP2024]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora