Oreo «Yoonmin»

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Narra JungKook: En la noche de la pijamada planeanda.

El plan de iba a la perfección. A los chicos les gustó la idea maravillosa de hacer una pijamada juntos, pero el más emocionado era Jin. Él se encargó de todo, las bebidas, comida e incluso nos aviso para hacerla en su casa. No creí que él estuviera tan animado sólo por una noche. De verdad eso fue muy fácil para mi.

Todos permanecían en la cocina o en la sala de estar, donde teníamos algunas películas puestas con un plato gigante lleno de palomitas. El pequeño Jimin lo aguantaba entre sus manitad mientras comía de las suaves y crujientes esferas de maíz junto a su novio Yoongi.

Me encontraba en la sala de estar, sentado en un sofá con mis pantalones cortos y mi pecho desnudo. Me gustaba estar al aire libre y más cuando el pequeño Jimin estaba tan cerca de mi, sino fuera por Yoongi ya lo huviera robado. Lo tendría en mis brazos todo el día y lo castigaría como mi propio baby boy. Viendo sus lágrimas caer cuando le pege con un látigo favorito.

Bostecé una sonrisa al observar la pijamada de Jimin. Era una de esas que cubría todo tu cuerpo con botones. También era de color rosado con unas donitas animadas como estanpado. Era lo mas tierno verlo con eso puesto y su cabello rubio todo desareglado.

Apreté fuertemente el sillón clavando mis uñas en el. Mordí mi labio inferior deseoso cuamdo noté que la entrepierna de Jimin estaba algo marcada con esa rela ajustada. Joder, tengo ganas de desgarrarle la ropa y comermelo entero.

-Y-Yoongi...debo ir al baño- habló el hermoso rubio para levantarse y prácticamente correr al sitio que mencionó con sus labios temblorosos. Joder, joder, ya verás Patk Jimin seré ese lobo para comerte y tranquilizar esas ganas que trataste de esconder.

Suspiré y noté que Yoongi me miraba seriamente de reoji. Sus ojos eran algo oscuros con un estilo gatuno, sentía que trataba de comerme con ellos por sólo no despegar mi mirada de su novio. Le dediqué una sonrisa amable y me reí en su cara.

-¿Que te pasa Yoonie?- pregunté haciendo una mueca con mis labios rosados, mirandole directamente.

-¿Como va tu relación con Tae?- no dejó de mirarme a mis ojos. De verdad le tengo algo de miedo a Yoongi, no porque sea mejor que yo a algo parecido, sino porque él tiene todo lo necesario para descubrir todo lo que hago a escondidas. Aveces sospecho de que él sabe algo de mi y se queda callado...esperando el momento indicado para atacarme.

-Va muy bien, él es un chico muy dulce y lindo- bajé la mirada y miré mis pies, aún asi sentía esa mirada intensa sobre mi, analizandome por completo. Sino me muevo de aquí y continuo mi plan, Yoongi me ahorcará con su mirar.

Escuché una risa de su parte -Es cierto, es un buen chico- comentó y alcé la mirada, él tenía una sonrisa en sus labios. ¿Le he caido bien?

-Bueno si me disculpas- me levanté del sofá y me estiré con mis brazos hacia arriba -Iré por una cerveza- con esa misma falsa sonrisa en mis labios caminé hacia la cocina dónde me encontré con mi primera presa.

-Hola Nam- me acerqué a la nevera y la abría para buscar la bebida.

Pasaron algunos segundos de silencio y luego me contestó sin despegar su vista de su celular. Él permanecía recostado en una pared, al parecer no quería hablar con nadie. Namjoon no era alguien tan popular en la universidad pero, había escuchado que le gustaba mucho la hermana de Jin. Si lo que me dijeron fue cierto, entonces no sería tan difícil interponerme entre él y Jin. Pan comido como dijo el mosquito.

Tomé la cerveza fría en mis manos y la abrícon de un pequeño jalón, provocando un chasquido.

-Oye entre tu y yo, escuché que te gusta la hermana de Jin ¿Es cierto?- murmurré y tomé un sorbo de la bebida sin quitarle la vista de encima. Él se sobresaltó y me miró algo confuso, era la reacción que me esperaba de él.