Te lo pido, quiéreme

Parte 29: Exhalo miedo e inspiro amor

Conversación por chat entre Kevin y Malena el martes a la noche, un día antes de la fiesta.

23:01 - ¿quién es esa chica con la que estabas en el restaurante?
23:12 - ¿tanto te aburriste con el mudo que te interesa saber lo que hacía con Victoria?
23:12 - ¿Alonso, no?
23:13 - exacto, toda una preciosidad.

¿Cómo se atreve? 

23:13 - comete un moco.
23:13 - invitame uno.
23:14 - ¡Ja! Entonces supongo que lo tuyo con la señorita con apellido propio va en serio como para invitarla a un restaurante así.
23:15 - en cambio ustedes dos juntos son un chiste intentando ser novios.

Me esquiva el tema. Já, si supiera... pero ¿saben qué? no le voy a dar el maldito gusto de enterarse de mi nuevo fracaso amoroso.

23:16 - ¡Qué te importa!
23:16 - ¡Qué te importa!
23:18 - Yo lo quiero y llevo enamorada de él desde principios de año. - mentí.
23:20 - encaprichada querrás decir.
23:20 -¡No! ENAMORADA.
23:20 -¡Perfecto!
23:22 - Exacto. En cambio, vos...
23:22 - ¿Yo qué?
23:25 - no recuerdo haberla visto antes ni que me hayas contado sobre ella pero WOW de pronto parecían íntimos.
23:25 - JAJAJA
23:25 - ... ¿?
23:26 - ¿Estás celosa?
23:26 - si y también veo ovnis.
23:27 - no me sorprende que veas, te gusta el mudo.
23:29-¿ Y eso qué cuernos tiene que ver?
23:31 - Que por fin pescaste a tu dios romano, chino, buda, lo que sea. ¿Eso es lo que querías, no? Entonces casate con él y sean felices juntos.

¿Por qué no puedo simplemente decirle la verdad y admitir que estoy celosa? Él ni siquiera se imagina que mi neurosis obsesiva se debe a esto nuevo que hay en mi interior y que lleva su nombre. No un bebé, sino el sentimiento, las malditas nutrias que con sus bigotes me hacen sentir cosquillas en el estómago. 

Pero yo no puedo ceder y él solo parece perder la paciencia conmigo.

Al fin y al cabo, eso es lo que me recomendó Layla y lo único que logré fue sacarlo de sus casillas. Y a ella también cuando le mandé la captura de pantalla sobre el lío que ocasioné. 

La advertencia de Layla antes de encararlo por chat fue - No menciones nada sobre su cita del restaurante. Solo preguntale cómo está, si va a ir a la fiesta y que necesitás hablar seriamente con él.

Ejem, le pifié un poco nada más. (:o

23:32- Copado, lo haré.
23:32- ¡bien!
23:32- bien
No pasaron ni dos minutos y no me pude aguantar.
23:34- Entonces no me vas a decir de donde conoces a la chica.
23:36- no puedo decirte, no por ahora.
23:37- Pensé que éramos amigos. Mejores amigos.

Visto clavado. Pero seguía en línea.

23:43-... debe ser importante para no responder.
23:44- ¿Por qué insistís?
23:44- Quiero saber, es decir... ¿Ella?
23:45- ¿A qué te referís?
23:46- No pensé que... era de tu tipo.
23:46- ah ¿No? ¿Y qué tipo de chica creés que me gusta?
23:46- ...

¿Una especie de chica problemática como yo? Oye, si me viera al espejo antes de salir de casa e hiciera los retoques necesarios, no estaría tan mal.

23:47- ¿Sabés qué? Soy un simple hombre mortal y me gustan las mujeres reales.
23:47- ¿Entonces sí te gusta?

Visto clavado

23:55- Esta bien, no jodo más. Ella parece copada y si te gusta, genial.
Nos vemos el miércoles en la fiesta.
00:15-Chau.

Al final no sé si va a ir pero no lo negó al menos. En cambio yo, no pude evitar sentirme terriblemente mal mientras las lágrimas no cesaban.

Ni siquiera quiero leer los mensajes donde Layla me reta por ser tan boba. Pero con resignación, abro el chat que tengo con ella, pero en vez de reparar en lo que me escribió en mayúsculas, observo la imagen que me adjuntó. Tiene un bello paisaje de fondo, pero lo que más llama mi atención es la frase que lo acompaña:

"Y para estar total, completa, absolutamente enamorado, hay que tener plena conciencia de que uno también es querido, que uno también inspira amor." - Mario Benedetti.

Entonces sin pensarlo, me levanto de la cama y camino hacia el espejo. Limpió mi rostro y seco mis lágrimas. Solo estaba en ropa interior y observé con detenimiento cada parte, cada detalle de mi cuerpo, la forma de mis curvas, mis imperfecciones y como llevaba mis pies descuidados, las manchas en mis rodillas, la piel reseca. Me giré para ver mi espalda y el largo de mi cabello. Me acerco nuevamente y reparo puntualmente en mi rostro. 

Tantos años dentro de este cuerpo y parecía que nunca me familiaricé conmigo misma. No me sentía yo, sino que siempre me dividía en dos, quién me gustaría ser y quien soy; mi lado bueno y mi lado perverso. Hasta ahora sentía que tenía a un enemigo compartiendo el mismo cuerpo. ¿Cómo podía permitir que alguien me quisiera si yo misma estaba en guerra conmigo misma? Me sentía rara, pero no sorprendida. Ésta era yo.  Y por más defectos que veía, me gustaba el resultado. Un resultado relativo que en parte depende de mi. 

Siempre me dije a mi misma que no merezco nada, que no puedo hacerlo, ¿pero realmente es lo que creo? ¿O por qué simplemente apuesto siempre por más aunque las dudas me envuelvan?

Hay amor dentro de todo aquello, y es mi amor, el poder que yo puedo dar. 

Quizás aquí y ahora comenzó el principio del fin de mi búsqueda infinita, donde en este momento comprendí que yo también inspiro amor.

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¡Opa!

Hora y media después de editar y publicar el Capítulo 28, termino este breve capítulo que marca otro antes y después en la vida de Malena. 

Hace años que se encuentra detenida entre sus universos paralelos pero es recién ahora que comienza a hallar respuestas.