11. AZUL CELESTE

119 24 7
                                    

11. AZUL CELESTE

—Oppa ¿Por qué lo trajiste?—. Fue la pregunta de Xia mientras junto con Jonghyun observaban a un inconsciente Yoogeun en la habitación contigua a donde Kibum se encontraba.

—Debimos haberlo asesinado... Es solo un cazador—. Xia insistía mientras Jonghyun solo observaba al chico.

Ella tenía razón, debieron solo haberlo matado, ni siquiera él mismo entendía porque se lo había llevado.

Al final, a los ojos de Jonghyun era solo un cazador, solo un humano, una vida transitoria sin ningún valor en el mundo.

¿Por qué tomarse la molestia de llevarlo hasta ahí?

Se martirizaba al desesperada mente rebuscar en su mente para encontrar la respuesta a su extraño comportamiento.

"Sería más fácil simplemente arrancarle la cabeza y dársela a Caramelo"

Trataba de convencerse, pero no podía, Xia se dio la vuelta mientras se llevó el cachorro en brazos, Jonghyun se convenció de que realmente estaba loco, sin embargo sus presentimientos nunca habían estado equivocados.

Pasaron algunos minutos y Jonghyun solo observaba como cada hebra del delgado hilo de la vida de Yoogeun se rompía, su alma se tambaleaba en un vaivén cada más violento mientras los segundos pasaban.

Al final tomó la decisión que le parecía más fiable, la alma de Yoogeun, se la daría a Kibum, un alma fuerte y joven, era lo que el necesitaba para recuperarse.

La pálida mano de Jonghyun se posó sobre la frente del chico, sus ojos recorrieron el maltrecho frente a él, rasguños y moretones visibles por toda la piel, ropas impregnadas con su propia sangre y desgarradas por los juegos de Caramelo.

"¿Cuánto estubas dispuesto a soportar tanto?"

Jonghyun se preguntaba una y otra vez, un niño estúpido, con su cabello completamente sucio, pegado por la sangre seca que se había combinado con la tierra del lugar que debería haberse convertido en su tumba, tan asqueroso que en esa condición ni siquiera se lo daría al perro.

—¿Por qué soportar tanto para protegerme?—. Preguntó Jonghyun mientras su ceño se fruncía.

En ningún pidió ser protegido por semejante criatura tan débil y patética.

Mil pensamientos de años vividos comenzaron a invadir su mente al recordar tantos siglos en que los humanos los habían desafiado, las almas errantes de todos sus enemigos habían terminado de la misma manera, quemándose en el infierno por la eternidad o destruidas.

El patio del castillo donde se había criado era el destino final para cientos de miles de los cuerpos de sus enemigos, en ese lugar se secaban en pilas bajo el sol en espera de convertirse en mordazas para sus mascotas.

Si no hubiera pasado ese incidente con su Noona (Risa) el emperador nunca habría dado luz verde a sus esbirros para asesinar humanos, pero al final, ese incidente había sido culpa de los humanos.

Para Jonghyun los humanos eran las criaturas más viles, cobardes y despreciables que pudieran existir, pensamientos que creía olvidados comenzaron a invadir su mente y el odio invadió su corazón.

Era el impulso que le faltaba para llevar a cabo su decisión, el ver como el color de sus uñas cambiaba a negro era algo que hacía latir su corazón, no solo lo asesinaría, también los disfrutaría, una rápida muerte no era suficiente, moriría lenta y dolorosamente, cuando su alma estuviera a punto de ser destruida en medio del caos y la agonía seria el momento adecuado para dársela a Kibum.

LUNA ESCARLATA (FINALIZADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora