LUNA ESCARLATA (FINALIZADO)

45. ¿CONFIARÁS EN MÍ?

Kibum y Jonghyun se encontraban en los límites de los dominios del emperador mirando el castillo donde habían crecido a la lejanía.

—¿Qué vamos a hacer?—. Preguntó Jonghyun mientras sujetaba la cálida mano que no soltaría nunca más.

—No estoy seguro—. Respondió Kibum.

—¿Escapar no es una opción cierto?—. Nuevamente Jonghyun preguntó, pero en esa ocasión abrazó a Kibum por detrás.

—No, no hay escapatoria—. Kibum dijo colocando sus manos sobre las del otro—Y aunque fuera una opción, no podría dejar a los demás.

Jonghyun hundió su rostro en el cuello del otro sin soltarlo y aspiró la embriagante fragancia que de su piel se desprendía.

—No debes olvidar tu promesa Kibummie—. dijo al depositar un suave beso en su cuello.

Kibum se estremeció agradablemente y se aseguró de grabar esa sensación en su alma y corazón mientras una tibia y abrigadora brisa se hizo presente para abrazarlos a ambos.

Pero... Seguramente se están preguntando a que promesa se refieren.

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[FLASH BACK

Un par de días antes cuando Jonghyun y Kibum al fin se encontraron frente a frente en el patio interior de aquel monasterio testigo de la última exhalación del segundo 500 años atrás.

Jonghyun pasaba su mirada de su mano a la roja mejilla de Kibum y viceversa después de haberlo abofeteado en un arranque de ira y frustración al saber que el otro prefería morir.

Su respiración aún no se regulaba mientras se odiaba con todas sus fuerzas sin poder creer lo que había hecho.

Una pequeña y casi imperceptible sonrisa se dibujó en los labios de Kibum al sentir la piel, energía y fuerza del otro, aunque fuera de esa tosca manera, haber sido capaz de sentir el firme contacto de Jonghyun en su piel después de casi quinientos largos años era algo que realmente había ansiado.

Después de unos segundos la delgada y extremadamente pálida mano de Kibum llegó al mentón de Jonghyun invitándolo a mirarlo.

Para Jonghyun ese suave toque fue como si un ser celestial rozara su piel, y como siempre su cuerpo actuó por su cuenta cuando antes de que su conciencia ordenara sus ojos ya habían encontrado a aquel que para él era el ser más hermoso de la creación.

La bella sonrisa que tanto había extrañado, los ojos rasgados que eran la entrada a un mundo donde solo ellos dos existían y los rosas y acorazonados labios a los que era adicto, al fin los tenía frente a él.

Y como si de una terrible broma de los Dioses se tratara no era capaz de emitir ningún sonido, no podía articular palabras y no podía moverse, se sentía completamente anonadado al tiempo que se desesperaba de él mismo.

—Gomawo—. dijo Kibum mientras sus manos pasaban bajo los brazos del otro y su rostro se acurrucaba en su pecho.

—Se escucha lindo—. Afirmó mientras se deleitaba con los bonitos latidos de Jonghyun.

Por su parte, con esa acción Jonghyun logró reaccionar, sus brazos rodearon al maravilloso ser que estaba en su pecho y naturalmente como tantas otras buscó el delicioso aroma de su cabello.

—Te extrañé mucho Kibummie—. Declaró en un siseo de su voz al intensificar la fuerza de su abrazo—Por favor no me dejes nunca más, no soportaría verte partir... otra vez.