LUNA ESCARLATA (FINALIZADO)

9. UN JOVENCITO

La noche finalmente llegó mientras Jonghyun se encontraba en aquella lejana colina, en la cima se encontraba una cabaña enorme que podía albergar a los profesores y sus estudiantes.

Mientras Jonghyun miraba a los chicos ir y venir buscando insectos y demás bichos para su clase, sus ojos solo podían observabar a uno de los alumnos.

Ese chico era Yoogeun, desde aquella vez que Tamara lo había interrumpido, las ansías de probarlo no desaparecían.

Además una molesta curiosidad por el jovencito no lo dejaba tranquilo, estaba seguro, que ese niño no era como los demás de su edad.

—¡Profesor kim!—. La voz de una mujer lo llamó desde la cocina.

Jonghyun se encontraba cerca de una se las ventanas, y a su lado llegó la profesora Yoon de Biología

Una mujer de unos 27 años, alta, delgada y con buena figura, piel blanca y cabello al hombro, labios rojos y gruesos, era el modelo perfecto de mujer para el hombre promedio, pero... Jonghyun no era el hombre promedio.

—Brinda conmigo profesor—. Dijo la joven mujer mientras extendía una soda hacia él quien solo sonrió esperando que los vientos no estuvieran cerca.

La voz de la joven era tan chillona que Jonghyun podría jurar que perforaba sus sensibles oídos.

—Vamos... no sea tímido—. La joven insistió.

Jonghyun comparaba mentalmente su voz con todos los sonidos desagradables posibles hasta que llegó a una conclusión.

Era como el horrible rechinido de las cadenas oxidadas con que los humanos arrastraban sus carretas hace cientos de años, realmente era molesto, súper molesto, no lo soportaba.

Tamara odiaba ese tipo de sonidos, sin duda si escuchara la voz de esa mujer no lo soportaría.

Una sonrisa se arqueó en los labios de Jonghyun al imaginar a su hermana molesta y haciendo berrinche por esa molesta voz.

—Eres lindo cuando sonríes—. La profesora Yun interrumpió el divertido pensamiento de Jonghyun haciéndolo molestar un poco.

"¿Qué tanto me ve?"

Jonghyun se preguntaba, si esa mujer supiera lo peligroso que él era ya habría corrido hace mucho, ¿Acaso los humanos no tenían instinto de supervivencia?

—No estoy acostumbrado aun a este lugar... voy a tomar un poco de aire... si me disculpas—. Nuestro joven vampiro Jonghyun fijó su mirada en la de ella.

El calor se concentró en sus pupilas, sus ojos se pintaron de un carmesí brillante y ese bello color se vio reflejado en los ojos de la joven profesora.

—Debes tener sueño después de cuidar tanto a los niños... deberías ir a descansar.

—Debo ir a dormir... estoy cansada de cuidar a los niños—. Ella lo repitió a la perfección.

Hasta el momento no había encontrado ser alguno que se resistiera a su hipnosis, la mujer comenzó a caminar mientras Jonghyun disfrutaba burlón lo manipulables que eran los humanos.

Al pie de las escaleras Minho lo observaba, Jonghyun levanto su mirada para hacer contacto visual con el otro, era evidente que esos dos no se agradaban, y al mismo tiempo ambos se preguntaban, ¿Por qué actuaban de forma tan cautelosa con el otro?

Jonghyun se perdió en sus pensamientos, ese Choi no parecía nada en especial, pero aun así sentía que había algo que no era normal en ese hombre.

—¿A dónde fue?—. Jonghyun se preguntó.

Mientras estuvo perdido en sus pensamientos Minho desapareció, buscó en todas direcciones desde su lugar sin poder encontrarlo.