FINAL

11.1K 728 151
                                    

Había olvidado cerrar la cortina, y ahora lo estaba lamentando. Realmente lo hacía, la luz que pegaba directamente en mis ojos, que recién había abierto me repetían una y otra vez que fue una mala idea no levantarme a cerrarla por la noche.

Me giré sin ganas de nada hacía el otro lado, evadiendo un poco más el deber de levantarme. Porque una vez que lo hiciera ya no sería para cerrarla, sino, para enfrentarme a la realidad de este triste y solitario día.
Yeol estaría trabajando hasta tarde. Por lo que me habían comentado los chicos, ya que este fin de semana es la grandiosa y esperada boda de Jeon y Bomi, había un completo caos por allá.

Este último pensamiento logró acelerarme el pulso, y un gran malestar en el pecho me inundó de nuevo. Suspiré pesadamente, no tenía muchas cosas que hacer desde que renuncié. No tenía intención tampoco de buscar un trabajo pronto, quería tomarme un tiempo para mí, para lograr estar bien conmigo misma y mis sentimientos.
Había leído por ahí una vez que el cansansio repentino que sentimos no es precisamente físico. El cansancio que tienes ocasionalmente, el que es todavía más abrumador. Que te deja postrado en cama sin querer hacer nada ni saber nada del mundo es mental. Y derivado principalmente de los sentimientos.

Si tuviste un mal día, si te hicieron sentir mal, si jugaron contigo, cualquier cosa cercana a los sentimientos es la única razón por la cual te sentirás cansado y abrumado.
Justo como estaba yo ahora.
Había estado bien las últimas semanas, Yeol se encargó de eso, y estaba sumamente agradecida con él. Tuvo tanta paciencia y buena voluntad para hacer que volviera a sonreír, que tuviera ganas de salir de nuevo y despreocuparme un poco por lo que sabía sería inevitable, pero que ahora estaba cerca, la boda de Jeon.

Vamos, todos aquí sabíamos que eso sería algo que no nos tomaría por sorpresa. Por más que me hubiera gustado seguir a su lado, era lo mejor, seguir juntos sin duda sería un grave error. Uno que nunca podríamos enmendar.

Miré de soslayo el reloj que se encontraba justo en el buró. 9:37.
Aunque no tenía nada que hacer realmente decidí que era momento de levantarme. Tal vez tomar primero una ducha, y después tendría tiempo para desayunar y preparar algunas otras cosas, como mi curriculim para conseguir un nuevo empleo. Aunque, como ya he mencionado, no tengo ganas de trabajar pot ahora. ¿De qué serviría de todas formas?

Me giré de nuevo para mirar el techo de mi habitación, pensé por 10 minutos más si era muy necesario el levantarme. Pensé un poco más y no, nada.

-Tienes que hacerlo tarde o temprano-Me animé. De mala gana me levante al mismo tiempo que frotaba mis ojos y retiraba las tibias sabanas de mi cuerpo. Una vez fuera de la cama me dediqué a hacer un par de estiramientos exagerados, tenía la mala costumbre de hacerlo, debía cambiarla antes de que, como decía Tae, terminara rompiendome algún hueso.

Miré a mi costado el papel que se hallaba tirado en el piso. Hice una mueca de disgusto, sabía perfectamente de lo que se trataba. La tomé con cuidado entre mis manos. Como ya había dicho antes, el paquete seguía en mi habitación, sabiendo que era una especie de bomba empeñada en dañarme.
No podía seguir fingiendo que no se encontraba ahí, eso y que ciertamente tenía bastante curiosidad, pero por sobre todo, tenía miedo.

Decidí que ya era momento de afrontar a la nota y la inmensa caja que se encontraba a mis pies. Con resignación me incline hacia ella para tomarla y colocarla sobre la cama, ya tendría tiempo de tenderla después.

-Terminemos con esto-Dije en voz baja, pero por más que quería mi vista terminaba en cualquier cosa menos sobre la nota que tenía en mis propias manos-Bien, tal vez lo que necesito es atarme el cabello, si, eso, por eso no puedo leer comódamente.

Me acerqué al tocador de mi habitación, abriendo sin prisa alguna los cajones del mismo en busca de una liga o algo para sujetarme el cabello. Una vez que la encontré me tomé el tiempo para mirarme detenidamente al espejo y hacer una coleta lo más decente posible.

-Pff, como si alguien fuera a verte ahora mismo-Me burlé de mi misma.

Miré sobre mi espalda mordiendo mi labio inferior.

-Debo hacerlo-Insistí, yo misma me estaba provocando más ansiedad al seguir postergando lo inevitable. Llevando de nueva cuenta el papel frente a mi me animé por fin a leerlo sin entusiasmo, pero con gran nerviosismo y pánico.

Querida _________  

A pasado algún tiempo desde la última vez que tuve oportunidad de verte, ver tu bello rostro y hermosa sonrisa, misma que me encargué de destruír, y no tienes idea de lo apenado y arrepentido que me siento por eso. Sé que nunca podré compenzar todo el daño que te hice, que ciertamente, nos hicimos. Porque sí, también me has lastimado. Y cada jodido día desde que te fuiste se siente vacio. Tal vez lo merezco, por dañar a la única persona que actualmente me importa a la única persona que realmente llegué a amar. Espero no dudes de ello, porque todo, absolutamente por todo lo que pasamos, todo lo que dije, era verdad. Si bien te mentí antes, y sé de sobra también que dudas ahora midmo de mis palabras, puedo asegurarte que te quiero. No, más que eso, te amo y eres lo más valioso que alguna vez llegué a poseer.

Darte una explicación sobre Bomi o mi repentina decisión está de sobra. Es solo que siempre había sido un hombre de palabra, o al menos, hasta que reapareciste en mi vida. Hasta que a propósito hice que trabajaras para mi. Como te había dicho anteriormente mi intención al principio era vengarme de ti, hacer que te arrepintieras por las cosas malas que habías hecho antes, no solo a mi, sino a todas las otras personas.

Poco después me dí cuenta del grave error que cometí, no soy quién para juzgarte, ni mucho menos para cobrar las cosas que habías hecho antes, no me corresponde hacerlo. Pero aún así, aun sabiendo todo aquello no podía detenerme
No sabía cómo hacerlo. Una vez que te tuve entre mis brazos de nuevo no podía ni quería apartarte. Aunque sabía que después pasaría esto, y terminaría por lastimarnos a ambos.

Dirás que eso me hace un cretino, y de hecho, lo soy, y más que eso soy un egoísta, porque después de todo esto, sigo aferrandome a tu recuerdo, y a la idea de que, tal vez en un futuro, podremos estar juntos, y de verdad espero que sea así.

Si quieres eso tanto como yo, asiste a la boda. Y encontremonos en la parte trasera de la iglesia. Me encantaría que llevaras puesto lo que te obsequio. Sé que lucirás hermosa con el.
Si no es así, espero que pronto nos encontremos, para vivir las aventuras que nos faltan. Mientras tanto se feliz, y recuerdame siempre como yo lo haré contigo.

Por siempre tuyo;

Jeon Jungkook.















---------
Descuiden chicas, aun nos quedá el epilogo♡

Quiero agradecerles a todas por esperar pacientemente cada actualización. Por vivir conmigo esta historia, que de algún modo espero hayan disfrutado hasta el final💕
Nos leemos pronto, aun tenemos una historia por concluir~

Enseñame a dar placerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora